Capítulo 43: "Déjame cuidarte.... -Mejor sálvame."

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-Que abras las piernas, joder. -Respondió forzando mis piernas a abrirse.

Me iba a violar, mierda, reverenda mierda.

-¡Que no, mierda! -Grité una vez más empujándolo.

-¡AH! ¡NO, JODER, DUELE, MIERDA. DUELE! -Grité. Pero no porque estuviera peleando contra el.

Si no porque ya lo sentía dentro de mi, brusca y duramente, se movía sin piedad y yo no podía dejar de llorar, de gritar y de gemir del dolor puro.

Me estaba violando, y no podía hacer más nada.

Luego de haber terminado y tirar el condón que había usado al suelo, me lanzó mis cosas y con tono frío y desinteresado me dijo: "Puedes irte a la mierda, puedes demandarme o hacer lo que quieras, habrá valido la pena, zorra." Y se marchó por la puerta dejándome en aquella cama de hotel, destrozada, me sentía sucia, me sentía como una total perra, no había podido evitar que Luca me violase y ahora Liam no era el único, soy una mierda.

No pasé por el departamento de policía, caminé directamente a la escuela nuevamente, cuando llegué, me adentré a mi auto y conduje hasta mi casa, planté una sonrisa en mi rostro y entre a casa.

Nadie podía saberlo.

Entré a la cocina y tomé un vaso de agua, subí a mi recámara y me encerré en esta, dejé el bolso sobre mi cama y entré a mi baño, buscando alguna gillete con las cuales me rasuraba cuando se me terminaban las tiras de cera.

Desatornillé las cuchillas y tomé una de ellas en mis manos.

Me senté en mi cama y pasé la cuchilla repetidas veces sobre mis piernas, mientras lloraba.

¿Que estoy haciendo?

¿Porque es que todo me sale mal?

Dí un sollozo al sentir como la piel se abría.

-¡¿QUE ESTAS HACIENDO, KAETHENISS?! -Volteé a ver inmediatamente.

Liam.

MIERDA.

FIN FLASHBACK.

-¡ESE MALDITO! -Gritó Liam. -Juro que lo voy a matar. Lo mato. -Exclamó llevándose las manos a la cabeza tirando fuertemente de su cabello.

Logré divisar un par de lagrimas bajando por su rostro, más las limpió rapidamente.

-No, Liam. -Pedí cabizbaja. -Lo hecho, hecho está. ¿Que podríamos hacer? -Forcé una sonrisa y me levanté de mi cama mientras colocaba una venda cubriendo mis heridas evitando que la sangre siguiera saliendo. Me coloqué unos jeans que tenía a mano y antes de que me pusiera la Camisa, Liam me detuvo.

-¿Te golpeó? -Preguntó con los ojos bastante abiertos. Colocando sus enormes manos en mi cintura acariciando hacia abajo. -Joder, que moretones.

-Liam...

-Lo mataré, lo juro por mi vida.

Salió de la recamara hecho una furia y segundos después volvió a entrar. -Pero antes de matarlo, quiero estar contigo un rato. -Sonrió forzadamente.

Suspiré y negué lentamente con la cabeza.

-Lo siento, Liam, de verdad es que... Necesito estar sola ¿Sabes? Te amo, espero comprendas.

Se me acercó y tomó mi cintura, juntó nuestras frentes y besó mi nariz.

-Déjame cuidarte. -Dijo abrazándome y acariciando mi cabeza besando mi frente.

-Mejor sálvame. -Respondí de vuelta, abrazándolo y hundiendo mi rostro en su pecho.

-Lo haré. -Prometió y suspiró. -Volveré por ti en la noche ¿Si? Te llevaré a cenar, bonita. -Sonrió y sin siquiera esperar una respuesta de mi parte, salió por la puerta y al fondo escuché la puerta de entrada cerrarse.

Suspiré y terminé de colocarme la camisa.

Vaya día.

(LIAM POV)

Conduje hasta el edificio de apartamentos y oh...

Adivinen quien estaba ahí.

-¡LIAM!

-Hola tia Kari. -Sonreí al sentir como apachurraba mis mejillas que posiblemente luego de que los estrujara a más no poder y los dejara como arcilla para moldear, estarían enrojecidos.

-¿Me invitarás a pasar a tu casa?

-Por supuesto, tía.

Llegamos a mi apartamento y mi tía sacó de su bolso una gran caja de chocolates.

Nos sentamos en la sala de estar y charlamos mientras comíamos los chocolates.

Decidí pedirle un consejo sobre el caso de Kaeth.

No mencioné la violación ni los cortes, por supuesto que no, pero si le dije que estaba muy mal y que no sabía que hacer.

-Apoya a Kaetheniss y cuídala más que nunca, piensa que ahora está en una situación delicada y necesita sentirse amada y respetada. Así que congela tus hormonas alocadas y que salga el lindo Liam dulce del que ella se enamoró. No pienses todo el día con esa cabeza, usa la de arriba y comprarle regalos y hazla sentir mejor con ella misma. -Dijo mi tía Kari para luego sonreír radiante.

-Tienes razón, tia Kari, siéntete bienvenida de quedarte en el cuarto de huéspedes, si así lo quieres, gracias. Volveré en la noche. -Dije y la abracé para luego tomar las llaves de mi auto y salir disparado hacia el centro comercial.

Kaetheniss tendría hoy una de las mejores noches de toda su vida, y me aseguraré de eso.

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I Am Not A Lady [SIN EDITAR] -LIBRO1Where stories live. Discover now