CAPITULO XXV

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Órbita del planeta Bith , Borde Exterior.....

Desde el puente de mando del Daasuum , Tarre Vizla observa como las baterías turbolaser y láser de los tres acorazados mandalorianos , disparan a discreción contra el Sith que está en órbita .
Rayos láser de intensos colores tan letales y destructivos como para reducir a escombros una manzana de edificios , cruzan el espacio .
La mayoría de esos rayos golpean los escudos deflectores que protegen.con su energía el casco . Desde tal distancia , no se pueden apreciar las ondas que crean los rayos en el escudo . Pero cuando el escudo queda debilitado hasta caer , entonces los rayos láser golpean con fuerza el casco del crucero . Su energía calórica calienta las placas de duracero del casco hasta derretirlas , debilitando la armadura . Los siguientes rayos van penetrando las capas , hasta que uno de ellos llega al interior y provoca una potente explosión interna .
Las cañoneras y cazas Víbora atacan sin dar cuartel , los cruceros de escolta .
Asiente satisfecho .
Para evitar que los Sith de la Hermandad Oscura pudieran agrupar sus fuerzas y destruirles , Tarre Vizla había ideado una campaña de ataques a planetas ocupados por los Sith , pero no de conquistas .
Conquistar , supone dejar en cada planeta una guarnición y naves de combate para defenderlo , lo que iría debilitando a los mandalorianos .
Además de dar objetivos de ataque a los Sith .
Además, para complicar aún más a los Sith elaborar una defensa eficaz , Tarre tenia en mente realizar ataques en diferentes sectores de la galaxia .
Mientras los Sith creen que los mandalorianos atacaran un planeta cercano a Onderon , sus fuerzas están a miles de parsecs de distancia, en el Borde Exterior , atacando el planeta Bith .
Con esta estrategia, los Sith se verían obligados a dispersar más sus grupos de batalla , quedando siempre a la defensiva .

- { Los estamos empujando de sus posiciones . Pronto colapsaran } - le informa en Mando'a Llust Fett , el cuál sigue el combate estelar en los monitores de la computadora de sensores .

- { Es el momento de que los Víboras y los Meteoro desciendan a la superficie } - dice Tarre y se gira para volverse - { Los grupos de asalto que han sido asignados al complejo de fabricas , tienen claras las órdenes ? }

- { Los Bith no sufrirán daño por su parte . Cosa distinta será lo que hagan los sicarios de los Sith } - dice Llust encogiéndose de hombros .


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La cubierta había temblado bajo sus botas , cada vez que el casco recibia un impacto . Y cada vez que pasaba , Jysus hacia un esfuerzo enorme por no mirar a las paredes .
El viejo dicho de , el rayo láser que oyes no es el que te mata , no le servia para estar tranquilo .
No le hacía gracia , ni se iba a acostumbrar a que le disparasen , y no poder devolver los disparos .

- { Es la hora ! A los transportes y buena caza ! } - oye gritar a su oficial .

Caminando junto a sus camaradas Jysus sube a uno de los transportes de clase Meteoro-Q , por la parte delantera .
Estos transportes con capacidad para llevar a cuarenta mandalorianos tienen como protección a parte de su grueso casco blindado , dos cañones láser a cada lado del fuselaje , y lanzadores de misiles de impacto .
La rampa sube una vez todos están adentro . Quedando el interior iluminado con una luz mortecina de color azul .
Oye como los motores rugen al ser encendidos . Con la mano derecha Jysus se agarra a una de las anillas , para evitar caerse durante el trayecto o , cuando el transporte tenga que realizar maniobras evasivas .
La elevación de la nave resulta suave . Después un leve movimiento, que le hace saber , que el transporte se mueve , para abandonar el hangar y salir al espacio .
Durante un tiempo , el viaje transcurre con normalidad .

LA ÚLTIMA GUERRA SITH - escrito por Jesús Quintela Navazo Where stories live. Discover now