⟣♯Droga Despedida💉Cyno x Tignari💫 || Genshin Impact [Modern AU]

⚖️⟣𝘊𝘢𝘱 𝘐𝘝⟢⚖️

Siempre comenzamos con un nuevo día, y hoy no es la excepción. Gracias a la intuición de Cyno y su obsesión con ver películas sobre estereotipos enfermos, ahora este deberá ir a recoger las cosas de Tignari y dejarlo vivir un tiempo en su casa, tal y como le prometió.

─Buenos días, zorro.

─Buenos días ─ se levantó de la alfombra y observó al contrario con curiosidad por unos segundos, nunca le había visto en ropa tan corta ─ ¿Y esa ropa?

─Es mí pijama (?) ─ pensó por unos segundos y le volvió a dirigir la palabra ─ que pregunta más estúpida.

─Yo no tengo de eso, ¿sabes?

─Ah, mejor me callo ─ apenado por lo dicho, se levanta para dirigirse a la sala, donde rápidamente se vestiría y se llevaría consigo el teléfono, para ir de una vez a recoger las cosas del Fennec. Aunque sin olvidarse de que este es un acosador que se dedica a observarlo todo el tiempo.

─Tu cuerpo es muy inusual.

─OYE TIGNARI ─ agarra una almohada del sillón y se la tira en la cara ─ iré afuera... ¡Ojalá te hubiera matado ayer!, era la mejor opción  ─ sale rápidamente del lugar con un rubor notable.

El zorro se levanta llorando de la risa; pues Cyno a veces le parecía muy tonto, ignorando por completo el último comentario, ya que sabía que lo dijo de forma estúpida y que no se le tomaría en serio.

─Maldito acosador, lo odio con toda mi alma ─ decía mientras le escribía al fennec por su teléfono ─ ¿Por qué me lo estoy quedando? ¿Por qué no lo maté? ─ baja el teléfono unos instantes y se queda pensando en la decisión que estaba apunto de tomar, aunque rápidamente se desvanece cuando suena el tono de llamada, contestando al segundo.

─Hey perro.

─¿Qué?

─Te mandé por mensaje la dirección de mí hogar. Si llegas a ver un peliazul que se diga llamar Zandik, no le dirijas ni la palabra

─De acuerdo, como sea ─ dijo el de pelo cenizo a punto de cortar el teléfono, hasta que oyó al Fennec murmurar un poco, así que decidió no colgar e ir caminando hasta la morada del zorro.

─Mientras hago el desayuno, debería regalarle algo a Cyno, no una bomba, si no algo que compense lo que hice, aunque casi me haya matado... ─ Piensa detenidamente y observa el suelo ─ ya no sé qué pensar de que esté aquí hablando solo como un loquito, simplemente no quiero regresar a casa y con ese maldito peliazul.

Cyno escuchó atentamente todo y se ruborizó un poco al escuchar como el Fennec lo tenía en cuenta, así que le habló de la nada al zorro para asustarlo ─ Hey ya llegué, voy a abrir.

─Ah, está bien ─ se estremece y observa el teléfono ─ Cyno, ¿escuchaste qué dije?

─¿De qué hablas? ¿Lo del regalo y el peliazul?

─Pensé que dirías nada, para seguir normales, te odio.

─Yo también te odio, cliché de mierda ─ se acerca y abre la puerta; mientras recogía sus cosas observó un peluche que se parecía a él y al zorro ─ (¿Por qué se parece a mí?) ─ cuestionó el jóven con algo de terror, aunque decidió no prestarle atención y recogió todo en cajas que habían tiradas por todo el lugar, sin saber que esas cajas tenían otras cosas para decorar la casa ─ (Debe ser nuevo por estos rincones, debido a los objetos que se encuentran en las cajas y no han sido sacados de ellas) ─ salió de la casa, y mientras caminaba, pasó por el lado de un jóven peliazul. «¿Cuál era el infortunio que me perseguía?» Preguntó el de tez morena, sin voltear a verlo, este se dirigía a casa del zorro.