17

227 29 30
                                    

Ya faltaba poco para la llegada de los bebés, Joaquín en cualquier momento comenzaría con las contracciones y sería el momento de irse al hospital.

Emilio había salido de bañarse ya que saldría, ahí mismo en el baño se cambió y se peinó. Ya estaba listo y solo iría a despedirse de su novio, sonrió al entrar al cuarto porque lo encontró dormido. Por estar en la última etapa del embarazo dormía mucho por el cansancio. Le dió unos cuantos besos en la mejilla y Joaquín despertó.

-¿Cansadito?- preguntó Emilio.
-Bastante, es por el tamaño de mi panza- dijo Joaquín y notó a su amigo arreglado-. ¿Vas a salir?
-Si amor, voy con Wendy porque necesito hablar con ella.
-Está bien, amor.
-Cualquier cosa me llamas de inmediato.

Se dieron un beso y Joaquín se acomodó nuevamente para dormir. Estaba por cerrar los ojos cuando vió a Emilio regresar al cuarto con una cobija, lo cubrió con ella, cerró la ventana junto con la cortina y prendió el aire acondicionado.

-Gracias mi amor- dijo Joaquín sonriendo y se dieron otro beso.
-Descansa, precioso- dijo Emilio-. Traeré algo para cenar.

Emilio le dió otro beso y dejó tres más en su panza donde estaban los halconcitos.

Emilio y Wendy se habían citado en una plaza, al verse se saludaron con mucha emoción como siempre lo hacían.

-Pasará el tiempo y nos seguiremos saludando igual- dijo Wendy.
-Ya sé wey, estamos bien pendejos- dijo Emilio.
-¿Y mi niño Joaquín?
-Se quedó descansando en casa. ¡Ya falta menos para la llegada de los halconcitos!
-¡Ya lo sé, que emoción!

Ambos fueron a sentarse en una banca que había en la plaza, platicaban de cualquier cosa hasta que Wendy notó una mirada diferente en Emilio, sabía que era de amor pero mucho más diferente.

-¿Qué pasa por tu cabeza, Emi?- preguntó Wendy-. Es una mirada diferente a como ves a Joaquín.
-Ay Wendy, ya no puedo estar más feliz teniendo a Joaquín a mi lado- dijo Emilio feliz-. Sé que es demasiado pronto pero con la llegada de los peques ya he tomado la decisión. ¡Le voy a pedir matrimonio a Joaco!

Esa noticia cayó de golpe pero Wendy logró captarla y le dió mucha emoción, pues sin duda el amor de los Emiliaco era verdadero. Wendy lo abrazó, realmente estaba emocionada por esa noticia.

-¡Que buena noticia, Emi!- dijo Wendy-. ¡Ay, voy a llorar! ¡Mis niños se van a casar!
-Espero que me diga que si- dijo Emilio.
-Ay Emi, su amor es tan grande y más por la espera de sus bebés que estoy tan segura que te va a decir que si. ¿Ya sabes cómo pedírselo?
-No, por ello fue esta reunión y también para que me acompañes a elegir el anillo.
-Se me ocurre una idea muy bonita.

Emilio y Wendy estuvieron ese rato comprando algunas cosas. Emilio estaba feliz de haber tomado esa decisión.

Amor Halcón Where stories live. Discover now