Capítulo XXI (Los secretos salen a la luz) Parte 2

483 54 10
                                    

P.O.V. Diana: 

Luego de que todos los hilos en mi mente se terminen de conectar, parecía que el ambiente se tornó ligeramente tenso. 

Sabía que en su cabeza sucedía lo mismo, solo que creo que jamás pensó que el momento de hablar llegaría. 

—Se supone que mi boca debería permanecer cerrada cuando se trata de este tema —Alec rompió el silencio —Si alguien más que tu padre o tu se entera, créeme que estaría en un muy grave problema. 

—¿Mi padre también sabe esto? —abrí mis ojos sorprendida —Prometo que me quedaré callada...  

—En la realeza, como ya lo he dicho, hay familias que por ADN ya están destinadas al poder, y cuando yo apenas era un joven, había un vampiro llamado "Rafael Fernández", el último vampiro sangrepura de España, en su momento llamada "Hispania" —Explicó —Tu padre me notificó que para este hombre, yo estaba siendo un obstáculo. 

—¿Por qué un "obstáculo"? —fruncí el ceño. 

—Porque ese vampiro era el segundo al poder, y temía que, como en la antigüedad, acabe con su vida para ocupar su lugar —respondió —entonces, aprovechando que mis padres no estaban más, su próximo movimiento iba a ser eliminarme. 

Hice silencio. Al parecer, Alec en su juventud estaba muy expuesto a cualquier enemigo o ataque, sabiendo que estaba "solo". 

—La familia Valt siempre fue la que me recibió, aunque no dejó de lado su actitud soberbia y despiadada, realmente ninguno se salva, todos los vampiros sangrepura somos unos asesinos —hizo una pausa —Y Juliann fue quien me advirtió de los planes de Rafael. 

—Se nota que mi padre y tú eran buenos amigos —comenté. 

—¿Amigos? Al principio fue quien me enseñó a atacar, Andrei también, ambos siempre tuvieron buenas técnicas de defensa y ataque —respondió —No éramos más que eso, pero a medida que los años pasaron, nuestra relación mejoró, especialmente luego de que tus padres se casaron.

Su relato continuó por algunos minutos, al parecer, la pelea con aquel sangrepura fue sumamente difícil, pues la realeza no se deja vencer sin haber dejado toda su energía.

—Al eliminarlo, se debe beber toda su sangre, la cual es la que contiene el poder, su vida, lo que realmente interesa —explicó —Y aquel que la beba, es verdad que todo comienza a sentirse diferente... Pero luego de eso, debí eliminar cualquier evidencia de que yo estuve allí, además de permanecer unos días alejado de cualquier civilización. 

—¿Pero cómo nadie sospechó nada al enterarse de la muerte de Rafael? —alcé una ceja. 

—Porque tenía una coartada, la cual Juliann también sabe, y todos creyeron que Rafael fue asesinado por un cazador —respondió —Al regresar a mi vida "normal", mi fuerza y poderes mejoraron. 

—¿Jamás se te ocurrió intentar quedar primero en el poder? —pregunté y él sonrió de lado. 

—No, de hecho no me enfrento a ningún Valt desde hace siglos, no es de mi interés... —clavó su mirada en mí —Y mucho menos sabiendo que perteneces a esa familia, no te tocaría ni un pelo. 

Alcé una ceja pícara, creo que mi mente ya divagó, y su última oración fue interpretada con doble sentido. 

Notó lo mismo que yo, para luego sonreír negando con su cabeza. 

—Es mejor que descanses, yo debo seguir haciendo algunas llamadas. —arregló mi cabello detrás de mi oreja. 

—¿Pero no piensas descansar también? —pregunté abriendo las sábanas, para luego arrastrarme apoyando mis rodillas y manos para acostarme, sin no antes mirarlo de reojo. 

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Jan 28 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Sangue DolceWhere stories live. Discover now