Malibú se convierte en el telón de fondo de como no hay un atajo para olvidar a alguien, simplemente tienes que afrontar echar de menos a alguien hasta que un día despiertas y ya no lo haces.
Después de dos años, en el dorado resplandecer de la pla...
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No tengo ni puta idea de cómo comenzar esto...
¿Hola? ¿Qué tal va todo? Me siento un poco estúpido escribiendo, en realidad, mucho, más cuando estás a mi lado durmiendo, pero lo hago porque te irás y aunque sé que he disfrutado cada segundo a tu lado, siento que nos faltó tiempo.
No pienso hacer nada para impedir que te vayas y espero no me lo pidas, porque no sé de dónde sacaré el valor para rechazarte.
Te amo, creo que no voy a tener el valor para decírtelo, porque ¿Cómo hacerlo y luego pedirte que te vayas?
Realmente no sé qué me hiciste, no tenía idea de que se podía llegar a querer a alguien en tan poco tiempo con tanta intensidad.
Nick, maldición, quiero salir y montar un escándalo, gritarles a todos que te amo, que quiero que estemos juntos. Y yo jamás me había sentido así, nunca sentí esto por nadie.
15
Fueron los lunares que alcance a contar sobre tu piel aquella noche bajo las estrellas, enmarcando tu rostro y descubriendo constelaciones que jamás creí conocer. Aunque debo admitir que no los he contado todos, me he saltado algunos y ha sido intencional.
No he querido recorrer todas las marcas de tu piel, la cual ya me sé de memoria, porque siento que, si no tengo algo más que descubrir en ella, mi mente comenzará a olvidarla y prefiero vivir en agonía, separado de ti, con la mínima esperanza de volver a encontrarnos.
¿Descubrirás tú piel para mí? ¿Te desnudarías de nuevo únicamente para que cuente cada lunar sobre ti?
No conté cuántos besos te di, debí hacerlo, porque hoy no puedo dormir y quizá por el resto de las noches estaré tratando de imaginar tus labios sobre los míos, sobre mi piel.
Te he visto dormir durante el tiempo suficiente para querer verte despertar durante el resto de mi vida.
Quisiera que tus ojos avellana, aquellos a los que me costó asociar con algún color, porque en ocasiones se pintaban de verde, no como el del uniforme, sino al verde que se queda en las hojas cuando el verano comienza a irse o, color miel, como si tuvieran un ligero toque de marrón y naranja sobre ellos. Tal vez no sean de ninguno de los colores que vi, no me sorprendería, tiene un brillo tan único, tan diferente... Me recuerdan al final del verano, aunque también pudiera ser mejor el otoño.
Solo quisiera que me vieran otra vez.
Nick, estoy enamorado de ti y ahora me siento en una situación terrible, porque tengo que dejarte ir, tengo que darte la libertad que te han privado durante años.
