Amor entre cuerdas Ꞝ Dahmo

Capítulo 14.

— Okay, ¿luego qué pasó? — La mano de Chaeyoung aún se deslizaba de forma reconfortante por mi espalda de arriba hacia abajo, en el típico papel de madre angustiada porque le han roto el corazón a su única hija.

— Pues... — Apreté los labios en una línea delgada y luego empujé el interior de mi mejilla con la lengua, recordando. — Escuché a un chico decirle palabras lindas, sentí que no tenía caso quedarme y tiré la nota

— ¿Tiraste la nota? — La expresión en el rostro de Chae era de gran sorpresa, sus cejas se alzaron al cielo y su boca se abrió de forma inconsciente. — Pero Momo, la nota era...

— Ya sé, ya sé — La interrumpí de forma inmediata, tratando de convencerme a mi misma de que había tomado la decisión correcta. — Pero no tenía caso, ya estaba con alguien y yo... — El simple hecho de recordar el momento traía de vuelta mis emociones, era horrible haber sido tan idiota y sobre todo, estar consciente de ello — Es sólo que tardé demasiado, Chae, desperdicié el tiempo que tuve.

La chica rubia negó con la cabeza, en silencio.

— Bueno... Yo no soy nadie para juzgarte por tus decisiones, pero sabes que si necesitas ayuda con algo, puedes pedirla. ¿De acuerdo?

— Por supuesto. — Asentí sin siquiera dudarlo, últimamente nos habíamos vuelto más cercanas y poco a poco comenzaba a verla cómo si fuera mi hermana. Era agradable poder sentir el apoyo de alguien de forma emocional y no solamente monetaria, como con mis padres.

Chae me sonrió de forma débil, soltó un pequeño suspiro mientras le daba una última acariciada a mi espalda y luego se levantó de su lugar, se le notaba bastante cansada. — En todo caso, me voy a dormir. Tú te encargas de apagar todo.

— Sí, no hay problema pero... De hecho, también iré a dormir — Me levanté casi en seguida, restregando las palmas de mis manos contra mis muslos.

La chica me observó a mitad de una mueca.

— ¿Qué? — Mustie.

— Ya sé que soy muy genial, pero tampoco debes imitarme e ir a dormir temprano. — Rodeó el sillón y caminó a su habitación mientras seguía hablando — Yo soy una adulta responsable, tú deberías estar de fiesta haciendo estupideces

Solté una carcajada y comencé a apagar todos los interruptores de la casa, aprovechando el momento para limpiar un poco mientras tarareaba una canción para llenar el silencio.

— ¿Ahora también limpias?, santa madre del señor innombrable, soy demasiada mala influencia.

Rodé los ojos al escuchar la voz de Chae otra vez. — Creí que ya te ibas a dormir

— También tengo derecho a orinar antes de desmayarme unas horas, niña. — Pude detectar un ligero tono irritado en su voz, así que opté por dejarlo en paz.

— Que todo salga bien — Palmeé su espalda mientras ella iba al baño y yo a la cocina para tirar la basura.

Estaba terminando de ponerme la pijama cuando de pronto alguien comenzó a tocar la puerta del departamento con insistencia.

Tomé mi teléfono celular para revisar la hora: 12:34 A.M

Nota mental, dejar de juntarme con Chae.

— Moooomooo, la puertaaaa — Su voz somnolienta se escuchaba frustrada, la chica estaba a unas cuantas horas de levantarse y su humor no sería lindo si no dormía lo suficiente.

— Ya oí, tú sigue durmiendo.

Un extraño sonido el cual yo imagino que fue un "Gracias" provino de su habitación. Me levanté de la cama, tomé la primera camiseta que estuvo a mi alcance y salí a abrir la puerta del departamento. La curiosidad realmente estaba matándome para esos momentos, pues digo, ¿Quién demonios necesita algo a las doce treinta y cuatro de la madrugada?.

De pronto una imagen de Bangchan me cruzó por la cabeza, no sería la primera vez que llega a estas horas de la noche sólo para invitarme a una fiesta o algo por el estilo. El idiota decía que yo era cómo un "Imán de chicas" y el hecho de que fuera amiga suya era una gran palanca para sus métodos de ligue.

— Chan, te juro por todos los granos de arroz en mi alacena que si sólo vienes para invitarme a una estúpida fiesta voy a... — Las palabras me quedaron cortas al abrir la puerta, la impresión y confusión eran demenciales y por algún motivo no fui capaz de sentir otra cosa que no fuera preocupación.

Pero en serio, de entre todas las personas que conozco y con las que me llevo terriblemente genial, ¿Tenía que ser Dahyun el que estuviera al otro lado de mi puerta?