—¿Qué Qian hizo que cosa?— Preguntó Seon después de que Yeonjun explicará por segunda vez.
—Me engañó, Qian me engañaba con Jungmin—. Respondió Soobin un poco desesperado. —¿Qué tal si te hace lo mismo?
—No, ella...— Intentó decir algo pero nada salía, era una probabilidad alta si se habla de lo que vivió Yeonjun en la otra línea.
—No siquiera pude ver la cara de Jungmin, ¿cómo sabré quién es y si te engaña con él?— Murmuró Yeonjun.
—Esta noche—. Dijo Jackson metiéndose en la conversación de repente. —Choi Jungmin, es él, ¿no, bonito?— Le enseñó a Yeonjun una foto del mencionado, el pecoso asintió.
—¿Bonito?— Murmuró Soobin antes de pasar su brazo por los hombros de Yeonjun y acercarlo a él.
—Está invitado en la fiesta, los dejamos solos unos minutos y sabremos si te es infiel—. Soobin, Yeonjun y Seon se miraron esperando la pregunta obvia. —¿De dónde sacas que te es infiel?
Sí, ahí está a la pregunta, ahora tenían que buscar una excusa para así no tener que confesarle absolutamente todo y correr el riesgo de ser vistos como locos.
—Bueno, mh...— Buscó una excusa durante unos segundos. —Escuché por ahí que Jungmin es muy mujeriego y que quería acostarse con Qian, así que... Sabes, siempre hay que prevenir—. Contestó Seon soltando un suspiro al final.
—Bueno, Jungmin siempre ha sido así pero no creo que Qian acepte, ella me rechazó dos veces porque yo le gustaba a su amiga Sunyoung así que... Bueno, un dilema—. Soltó una pequeña risa divertido. —Como sea, todos están abajo, no hay que hacerles esperar por el otro precioso cumpleañero—. Le guiñó el ojo al pecoso.
—¿Precioso?— Volvió a murmurar Soobin antes de jalar a Yeonjun para evitar que caminara.
Esperó a que Seon y Jackson salieran de la habitación y posteriormente bajaran las escaleras. Luego de eso bajó junto a Yeonjun y ambos pudieron escuchar los gritos de felicitaciones dirigidas al pecoso. Era el centro de atención y por alguna razón le gustó.
Wooyoung estaba compitiendo contra un chico en un videojuego, algunos de los invitados tenían su vista en ellos mientras gritaban el nombre de Woo y el de... ¿Yunho? No lo conocía. Continuó caminando, la música, el baile, las risas; al estar sosteniendo la mano de Soobin se sentía cómodo.
—¡Gané!— De escuchó el grito de victoria por parte de Wooyoung y seguido de eso un pequeño baile extraño.
—Ve—. Alentó Soobin a Yeonjun, quién lo miró confundido y tal vez asustado. —Ve a jugar, apostaré por ti.
—Solo tuve un día de práctica... No soy tan bueno, ¡Wooyoung me va a destrozar!— Frunció su ceño.
—Confío en ti—. Sonrió antes de empujarlo suavemente a dónde estaba Wooyoung. —¡Hey! Una competencia entre ambos cumpleañeros.
Esas palabras hicieron que todos gritaran emocionados, sacándole una pequeña sonrisa a Yeonjun, el ya mencionado tomó asiento junto a Wooyoung y tomó el control. Intentó relajarse suspirando pero aún se sentía nervioso.
No podía creer que estaba ahí, en ese momento, en ese lugar y en esa época.
—Apuesto todo a Woo—. Dijo Taeyeong dejando un par de billetes sobre un plato enorme lleno de billetes.
—Pff—. Soobin se burló antes de dejar la misma cantidad de billetes sobre el plato, luego se acercó a Wooyoung para alcanzar a decirle. —Suerte, la necesitarás.
Observaron la partida, no iba a negar que Wooyoung jugaba mejor que Yeonjun, pero por suerte, el último mencionado no lo hacía mal, sabía cómo defenderse.
Soobin se acercó al pelinegro por detrás para abrazarlo de forma suave sin intención de distraerlo y sonrió ligeramente sobre su hombro antes de susurrar un "Lo estás haciendo bien", en su oído. No le importaba si perdía o ganaba, le importaba que el pelinegro se divirtiera.
—¿Lo venció?— Murmuró Seon mirando desde atrás como en la división de pantalla aparecía un "derrota" justo en la parte de Wooyoung.
—Sigue parloteando, Taeyeong—. Dijo Soobin tras alejarse de Yeonjun.
Todos gritaron por la victoria, Wooyoung había derrotado a la mayoría e los videojuegos, eso hacia el doble de genial que un chico que apreció de repente, y al que nadie conoce, o venciera. Seon hizo un pequeño gesto para atraer a Soobin y Yeonjun, diciéndoles que ya estaba todo para descubrir a Qian o claro, desmentir.
—Le dije a Qian que querías hablar con ella y a Jungmin le dije que un chico quería hablar con él, se reunirán en el baño junto al comedor—. Explicó Jackson mientras agitaba su vaso el cual contenía alcohol.
—Claro, porque el baño es la mejor opción—. Murmuró Soobin irónicamente.
—Te esconderás en la ducha, ambas puertas son negras así que no te verán —. Esta vez dijo Yeonjun ganando la atención de los tres, ya que había sonado muy decidido.
—¿Qué harás si de verdad ella. Te es infiel?— Preguntó el peliazul de ahí haciendo una mueca incómodo.
—No lo sé...— Respondió de inmediato, luego suspiró, miró a Yeonjun, luego a Soobin y sonrió. —¿Qué hiciste tú?— Cuestionó antes de entrar al baño y cerrar la puerta.
—¿Qué hice yo, Yeonjun?— Giró su rostro al pelinegro quien intentaba recordarlo.
—Mph... Llorar—. Se encogió de hombros tras decirlo.
Jackson se rió mientras Soobin apartó la vista avergonzado. No recordaba una vez, ni una sola vez en la que había llorado, en realidad, todo a su alrededor le importaba una mierda, quizás era por eso.
Los tres se alejaron de las puertas y a los segundos vieron a Qian entrar primero, a los minutos, lo hizo Jungmin.
—Hey, así está el cumpleañero. ¿Por qué tan aburrido?— Taeyeong se sentó junto a Yeonjun y lo abrazó. —¿No crees que deberías beber un poco? Ya pasa de la media noche, ya eres mayor de edad, cariño~— Murmuró cerca de su oído.
—Taeyeong—. Llamó Soobin sujetando el hombro mencionado.
—Tranquilo, Soobin, no es como si me lo fuera a comer... aún—. Le guiñó a Yeonjun.
—Detente—. Intentó apartarlo.
—Tranquilo... Creo que no hay problema si bebo un poco, ¿verdad?— Miró al peliazul suspirar. —¿Puedo?
—¿Por qué me preguntas? Eres mayor de edad, haz lo que quieras—. Apoyó su mano en la mesa y después su mentón en la palma de su mano mientras miraba de nueva cuenta la puerta, nadie había salido aún.
—Entonces adelante, bonito—. Taeyeong le acercó un vaso que contenía alcohol, no era mucho, pero para Yeonjun que era nueva en eso, lo era.
Sujetó el vaso y lo llevó hasta sus labios, bebiendo de éste. El líquido inmediatamente le quemó la garganta y no tardó en quejarse por eso, pero en lugar de recibir burlas, como esperaba, todos lo alentaban a seguir, todos a excepción de Soobin.
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