Proyecto bebé

XX

Parte 2
Advertencias: +18

Una vez ambos quedamos sin ropa, tome la iniciativa y puse con cuidado a Nico debajo de mí.
Comencé a besarlo de manera más desesperada pero siempre con cuidado, acariciando lentamente todo su cuerpo.
Las manos de él pasaban de mí espalda a mí abdomen acariciando y tocando absolutamente todo lo que podía tocar. En un momento pase mis manos de su cintura hasta su trasero apretando levemente y masajeando con cuidado de que no se sienta incómodo, al oír como un pequeño gemido escapaba de sus labios supe que me daba permiso de hacer eso.

Después de varios besos suaves y caricias tímidas me aleje un poco de Nico al sentir como de su entrada escurría lubricante natural por la excitación, creo que ya es momento...

–Niky, ¿puedo...?– Pedí permiso de manera suave antes de hacer cualquier tipo de movimiento.

–Sisi, no hay problema, hacelo...– Me sonrió y le devolví la sonrisa. –Te amo.– Murmuró suavemente y yo sonreí, otra vez.

–Yo también te amo.– Susurré y lo besé suave.

Con cuidado dirigí mí mano hasta su entrada y de manera suave ingresé dos dedos en esta. Él suspiró en medio del beso y yo busque dentro de mí un autocontrol que casi se agota.
Seguí con los movimientos suaves, y él simplemente se dedicaba a dejar caricias en mí cabello y en mí espalda. Empecé a besar su cuello y pecho dejando un par de marcas, mientras; seguía preparando su entrada y él liberaba gemidos y suspiros de placer que hacían que todo en mí quiera más de él.

Una vez que estuvo listo lo mire a los ojos y volví a pedir permiso, jamás haría algo sin su consentimiento. Al tener su "sí", con cuidado alinee mí miembro a su entrada y con cuidado lo introduje de a poco.
El ritmo fue lento en un comienzo, ambos liberabamos suspiros y pequeños gemidos con el nombre del otro.

Luego de un rato él llego a su orgasmo seguido de mí, dejamos que el nudo se forme y nos acostamos juntos mientras yo lo abrazaba de manera cariñosa, mí alfa se encontraba satisfecho y mí corazón...

Mi corazón casi sale de mí pecho al sentir que por primera vez en todo este tiempo, hicimos el amor, al saber que todo lo que lo amo es correspondido.