capítulo 1

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“sometimes home is a person”

(this is not another love story)

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(this is not another love story)




Un día sin más la humanidad se apagó y sucumbió ante algo letal. Algo capaz de matar y revivir. Capaz de desdibujar la línea entre la vida y la muerte.

Elio jamás creyó que las horribles historias que leía en los cómics, podían hacerse realidad, sin embargo frente a él estaba ocurriendo una pesadilla. La gente corría sin parar mientras otras personas se lanzaban sobre ellos para desprender la piel de su cuello, mano; cara. Lo que fuese posible alcanzar les era suficiente, como un animal hambriento.

El joven pelirrojo no dudo en correr, así paso días, semanas y estaba seguro de que un mes o más se había cumplido desde todo aquello. Entre sus brazos siempre iba su pequeña y rubia hermana, la razón de no ceder y dejarse morir como todos los demás.

En la ciudad de Atlanta todo estaba rodeado, cada calle, edificio e incluso algunas azoteas.

-Me duelen los pies. -Ahvi se queja en un lastimero sollozo y el pecho de Elio se aprieto, ¿qué le respondes a una pequeña de nueve años cuando te dice eso? Él no lo sabe así que se queda callado y sigue caminando.

Presenciar la muerte de su madre no fue la peor parte, podía decirse que lo más difícil era sobrevivir y alejar las imágenes de su mente. Sus amigos, sus compañeros de colegio, todos estaban muertos.

Elio se detuvo únicamente cuando llegaron a lo que parecía ser un edificio con tienda, ahí podrían conseguir alimentos y algo de provisiones.

Avhi camino entre los percheros repletos de ropa, en cambio él busco algo que pudiera servir como alimento, estarían ahí uno o dos días como máximo.

Si hacían mucho ruido los caminantes vendrían a ellos, con la fragilidad del cristal no era buena idea, así que Ahvi y él decidieron tomar todo lo necesario y crear un pequeño fuerte detrás del escritorio. De ese modo, al caer la noche ninguno notaría la luz que emanaba una pequeña lámpara.

Él consiguió abrir una lata de frijoles y su hermana no dudo en devorarlos, la última comida había sido días atrás y a pesar de que Ahvi no se quejaba; Elio estaba seguro que la pequeña no se sentía nada bien.

-¿Dónde iremos después?

El mapa entre ellos dejaba ver las carreteras y algunas ciudades cercanas, debían conseguir uno más actualizado cuando tuvieran la oportunidad, pero por el momento ese trozo de papel les serviría.

-Primero intentaré conseguir un auto, para eso vamos a necesitar que te quedes aquí y no hagas ruido -La pequeña rubia escucho cada palabra con atención, la madurez era lo que le sobraba a pesar de su corta edad-. Luego de que consiga el coche vendré por ti y entonces comenzaremos a alejarnos de esta diabólica ciudad.

Y aunque aquel había sido el plan, al día siguiente todo se vio arruinado, ¿la razón? Un grupo de personas llegó a la ciudad armando un escándalo, peor aún, habían ingresado al mismo edificio donde su hermana y él se encontraban.

Elio tomo lo primero que encontró, un fierro en mal estado que prometía partirse tan pronto lo usará, aún así se enfrento a ellos. El chico salto por sobre el mostrador, Ahvi cubrió su boca y cerró con fuerza los ojos, escondiéndose en aquel refugio improvisado.

-Miren que tenemos aquí, una pequeña mierda rojita.

Un tipo alto fue el primero en tomar la palabra, su cabello estaba corto, notandose su calvicie en algunas zonas, mientras que su rostro parecía demacrado y barbudo. Elio sintió náuseas de inmediato.

-Llegue primero, así que larguense.

El resto del grupo elevó sus manos, todos intentando calmar al joven chico que los apuntaba con un arma tan improvisada. Parecían no buscar pelea.

-Creo que hay demasiado para todos, no tomaremos muchas cosas y nos iremos sin hacer ruido. -Una mujer rubia fue quien tomo la palabra esa vez, la chica se presentó como Andrea, explicándole que no buscaban problemas.

-Solo tomen todo y vayanse, no quiero problemas.

-¿Me estás dando una orden, mocoso?

-¡Merle, déjalo! -El hombre negro fue quien se interpuso esa vez, generando que el otro tipo se alejara de mala gana, como si toda aquella situación le aburriera.

De esa forma se fue parte de su mañana, Ahvi seguía oculta detrás del mostrador y él no se alejaba mucho de esa zona. Apenas los intrusos se fueran, él tomaría a su hermana y se largaria.

Cerca del mediodía los zombies, alias los caminantes, ya de encontraban acumulados por las calles, pero todo fue para peor cuando el sonido de algunos disparos se hicieron escuchar. Un tipo armado estaba atrayendo la atención de todos esos muertos. En otras palabras, estaban más que jodidos.

Elio dió la vuelta en el mostrador, su hermana menor salto a sus brazos apenas lo vio y eso fue motivo suficiente para que todos los presentes lo observarán con confusión.

-¿Cuánto tiempo lleva esa cosa ahí?

-No le digas así, ella es más persona que tú, simio de trasero pelado -El tipo rubio pareció enfurecer con su respuesta, sin embargo se mantuvo a margen, Dios sabria porque extraña razón- Lleva aquí todo este tiempo, pero nos iremos. Su loco amigo pistolero hará que nos maten a todos.

Andrea agito sus manos frente a él, deteniendo su andar antes de que consiguiera largarse con la menor en sus brazos. Al parecer esos seres ya estaban contra el edificio, golpeando sus horribles y podridos cuerpos contra el cristal.

-Sabia que esto era una mala idea, jodida mierda.

"Volví, tengo un huésped y cuatro caminantes en el callejón"

La voz del chico asiático se escuchó por el handie y dos de los chicos salieron tan rápido como les fue posible ponerse protección. Él en cambio solo podía pensar en como largarse de ahí sin poner en riesgo a su hermana.

Unos quince minutos después cuatro hombres volvieron, el tipo que había disparado iba en uniforme de policia, Elio tuvo que contenerse para no golpearlo. Tampoco fue necesario cuando Andrea ya estaba sobre él con su arma en mano.

-Estamos muertos por culpa de este idiota.

-Eso no nos ayudará en nada, solo conseguirás motivarlos más.- Su pequeña hermana hablo, todos dejaron de gritar para prestarle atención. La niña lejos de estar asustada, parecía mantener la calma más que todos los adultos ahí presentes.

Luego de una incomoda critica hacia el chico nuevo, los disparos comenzaron a escucharse nuevamente, solo que esa vez provenían del techo.

-¿Ese no es Dixon?

-Ese maldito enfermo, le metere el arma por el culo.

-Las groserías...-Todos pararon nuevamente a observar a la pequeña rubia que iba en sus brazos, la niña dió un brinco y bajo-, solo soy una niña.



















Hey! ¿Qué tal están? Soy yo nuevamente.

Está vez les traigo un nuevo fanfic, solo que ahora son papis y no mamis (forever LGBT)

Quiero agradecerle a AmandaHernndez212 por el gif de Elio y Daryl, lloro brillitos con lo hermoso que es.

THE MONSTERS Daryl DixonWhere stories live. Discover now