Capítulo 16

221 23 0
                                    

Ver cómo todos mis amigos festejaban juntos por un lado y cómo nosotras por el otro me había llevado a decidir que ya era tiempo de arreglar este problema. No podíamos quedarnos así para siempre, yo no soportaría estar alejada de Yoongi por mucho más.

—SunHi, ¿por qué diablos te ves tan malditamente triste si has quedado seleccionada aunque bailes horrible?—Boram, como siempre animándome, se encontraba en la puerta de la habitación que compartía con YoungMi, sosteniendo el picaporte de afuera, aunque ella estuviese dentro, ya que mantenía la puerta abierta.

—Eh, cuida tu boca, chiquita—Chorong chasqueó la lengua negando con la cabeza—. No te preocupes, SunHi, sabes que estás mejorando con las coreografías.

Asentí pesadamente y solté un bostezo fingido, quería echarlas a patadas en estos momentos. YoungMi dormía y yo debía concentrarme en una sorpresa que preparaba.

—Miren, no estoy muy bien con esto de que estemos distanciados entre todos por culpa de mí y de Suga. Sé que debería estar contenta porque todos los que quiero han quedado, pero simplemente no puedo. Lo lamento. Pero ahora mismo quiero descansar, ¿vale? —les dije mientras a cada palabra las acercaba más hacia el pasillo—. Tengan una bonita tarde que mañana empiezan los entrenamientos para el gran día.

Les cerré en la cara dejándolas con la palabra en la boca y giré sobre mis talones, para luego, echarme bruscamente sobre mi cama, provocando algún ruido. Oí un balbuceo fastidiado por parte de YoungMi a lo que sólo pude susurrar un "Lo siento" como disculpa y hundir mi rostro en una almohada por un segundo.

Min YoonGi, me estás volviendo loca, de verdad.

Me senté como indio sobre el acolchado y apoyé mi cuaderno sobre mi pierna derecha. Mordí el bolígrafo tratando de buscar entre mis recuerdos, quería que ésto fuera especial.

**

—¡Park Jimin! —estaba gritando por todo el lugar como una loca el nombre de este hombre que no aparecía—¡Park Jimin!

Caminé esquivando a un grupo de alumnos y aunque ya estaba algo cansada, decidí sumergirme en la profundidad del bosque. Menos mal que luego de encontrarlo todo valdría la pena porque era para una causa muy importante para mí y él era precisamente el indicado para cumplir esta misión.

—¡Park Jimin!

Me giré y golpeé mi cabeza contra el tronco de un árbol, maldición, dolía. Me froté varias veces sin detener el paso.

—Estúpido Park Jimin—pateé una lata del suelo y me crucé de brazos haciendo puchero. ¿Dónde diablos se había metido?

Unos pasos a lo lejos me asustaron por lo que decidí ocultarme detrás de tanto verde oscuro y mirar entre las hojas de quién se trataba.

—¡Gracias al cielo!—exclamé tras suspirar notablemente saliendo de mi escondite—JungKook, ¿sabes dónde está Jimin?

El chico frunció el ceño mientras se acercaba a mí. Una vez se puso frente a mí se lo veía aún más confundido y se frotó la nuca mientras pensaba.

—¿Jimin? Él... oh... él está en la sala, haciendo karaoke, ¿por qué? ¿Qué haces aquí?

—Yo... es que... —solté aire—. He planeado una sorpresa para Suga, quiero que me perdone... por todo, en realidad—expliqué mientras él me rodeaba los hombros con su brazo y me dirigía hacia los edificios—. Y necesito su ayuda, tiene que ser algo inolvidable.

—¿Le confesarás tu amor?

Él preguntó aquello totalmente tranquilo e indiferente, pero yo estaba roja como un tomate. Yo... yo no veía a Yoongi de esa manera, él simplemente era alguien genial que me gustaba tener a mi lado y no quería perderlo.

—¡No! Le pediré disculpas. He errado en muchas cosas con él, y quiero remediarlo todo.

—Está bien—Kook sonrió apretujándome—. Pero ya verás como pronto admitirás que te gusta.

—¡Yah!

My roommate is a boyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora