Oki viajara a las frias tierras de Asgard para encontrar su propósito en la vida y descifrar su pasado. Sin embargo llegara en un mal momento, tiempos de guerra se acercan y estará involucrada en varios disturbios que se vera obligada a investigar y...
"I wanna get in trouble, I wanna start a fight" (Get in trouble (so what) -Dimitri Vegas & Like Mike vs Vini Vici)
El clima empeoraba cada día, habían muchas tormentas que se mezclaban con la nieve provocando un frío insoportable. Asgard al estar muy cerca del mar corría el riesgo de ser azotado por olas gigantes, algo anormal estaba pasando.
Hilda miraba por la ventana como la tormenta de nieve azotaba el reino, se le veía demasiado preocupada.
—Haz estado ahí desde la mañana, hermana.—decía Flare entrando a la habitación.
—Hace dos semanas que Seiya y los demás fueron al reino de Poseidon a enfrentarlo, ¿crees que ellos...?.—bajo la mirada.
—Debemos tener fé en que lo lograran, han sabido como salir de problemas, ellos salvaron a Asgard.–ella sonrió.
—Tienes razón.—ella sonrió un poco, pero aún asi, estaba muy preocupada.
Desde la muerte de sus dioses guerreros había caído en depresión , ella no lo demostraba ya que un representante de Odin no debe mostrar debilidad ante nada ni nadie, pero la tristeza la consumía, ella se sentía culpable por todo lo que había pasado.
—Siegfried..—decia mientras se acercaba para mirar una lapida de piedra.
Al parecer el era alguien muy importante para ella, no era solamente un guerrero a su servicio. Hilda suspiró y se quedo un buen rato enfrente de esa tumba, no le importaba el frío ni la nieve cayendo, solo quería estar ahí un poco mas, si tan solo no hubiera dejado que otro dios la manipulara nada de esto habría sucedido, las secuelas de la guerra se hacían cada vez mas presentes.
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Se sentía incompetente e inútil para dirigir a todo un reino, reflexionaba que era mejor abandonar su puesto y dejar que alguien mejor que ella lo ocupara, Asgard necesitaba un buen lider y ella no era la indicada.
(...)
—Sigo sin recordar nada.—Oki se dejo caer en la cama muy irritada.
—Esta bien, lo dejaremos solo por hoy...—Andreas suspiró e hizo anotaciones en su libreta. —Tengo que volver al hospital, ¿vienes?.— volteo a verla antes de salir de casa.
—No, me quedó.—Oki estaba muy seria, parecía molesta.
Andreas abrió la boca, estaba por decir algo pero, no quería hacerla enojar mas y solo bajo la mirada unos momentos mientras giraba la perilla de la puerta.
—Esta bien, descansa un poco y no le abras a extraños.—el pelirrojo se había ido.
Oki miraba el techo con el ceño fruncido, se sentía demasiado frustrada, ella sabia que tenia un pasado y razones para venir a este lugar pero no las recordaba.
