❄️Capitulo 8- Mas misterios.❄️

125 3 10
                                    

Oki habia sido dada de alta del hospital días después y fue a casa con Andreas. Ninguno de los dos dijo nada hasta llegar al apartamento.

-¡Por fin!.-ella se tumbo en el sofá.

Andreas sonrió un poco al verla bien, si que le había dado un susto. Pero ahora había otro problema el cual no se lo ha contado a Oki, ni si quiera sabia como decírselo.

Flashback:

-Encontramos algunas anomalías en el cerebro de Oki, si antes no tenia ahora tiene bastantes, se debe a un golpe fuerte en su cabeza que empeoró lo que tenia.-decía Einar.

-Bueno...ella se había golpeado la cabeza cuando se resbaló la primera vez que la vi.-dijo Andreas.

Einar suspiro y le mostró algunos tomografías a pelirrojo.

-No sabemos exactamente si es alzheimer o amnesia lo que tiene, tiene cierto parecido con esos padecimientos pero aun no hay un diagnóstico claro, es muy raro. El golpe acelero dicha anomalía y temo que con el tiempo se agrave la situación.-

-Einar, ve al punto, ¿que pasa?.-Andreas estaba algo tenso.

-Ella podría entrar en coma en cualquier momento y después ella...—no quizo decir lo último.

Fin del flashback.

Andreas estaba serio viendo su reflejo en la ventana, en su interior deseaba que esa anomalía fuera una broma de mal gusto pero era la realidad, a pesar de llevar poco tiempo conociendo a la chica, se preocupaba mucho por ella, no sabia si se había encariñado con Oki o era por ser medico y que sea normal preocuparse por la salud de la gente. No lo sabia, pero definitivamente no quería que ella tuviera un destino así.

La voz de la morena lo saco de sus pensamientos rápidamente.

—¿Andreas? Has estado algo serio ¿Pasa algo?.—ella ladeó la cabeza.

—N-no tranquila, no es nada.—se apartó de la ventana y camino a la cocina.

Sin duda era muy malo escondiendo sus emociones. Pronto sintió como la mano de Oki tomaba la suya deteniéndolo.

—Se que algo te pasa...q-quizá no nos conocemos tan bien, pero puedes confiar en mi, bueno por algo me dejaste quedarme aquí.—lo miro fijamente.

Esa actitud tan ruda mezclada con inocencia provocaba en el unas sensaciones extrañas, un sentimiento de protección hacia ella había nacido en el, pero a la vez sabia que merecía saber la verdad, ella no recordaba nada pero tampoco debía verle la cara de tonta. ¿Como decirle que en cualquier momento ella podría caer en coma y morir? sabia manejar esas situaciones pero con Oki no podía sacar una palabra de su boca.

Recordando lo que dijo Einar y a ella postrada en esa cama, lo tenia contra la espada y la pared.

—Oki—el hombre agarro los hombros de la chica.

Por fin había dicho algo.

—Te ayudare a recordar todo, burlaremos cualquier diagnóstico.—dijo sin titubear.

—¿Huh?.—ella lo miró sorprendida y a la vez confundida.

Como médico no se iba a dar por vencido, al saber que el diagnóstico no era claro, las probabilidades eran muchas. Ahora se sentía mas que comprometido en lograr que Oki recuperara sus recuerdos y quizá, encontrar una cura a lo que pudiera padecer. Su bondad no tenia límites al parecer, el era asi.

Andreas estaba empezando a crear una terapia especial para ella, tenia varias teorías y de ellas se basaba para el tratamiento adecuado para la chica. Había pasado una semana con eso, diarios, fotografías, dibujos pegados en las paredes del cuarto pero ella seguía sin recordar nada.

SAINT SEIYA FATE: ASGARDWhere stories live. Discover now