𝐈𝐍𝐅𝐈𝐍𝐈𝐓𝐘 𝐖𝐈𝐓𝐂𝐇 - 𝒉𝒂𝒓𝒓𝒚 𝒑𝒐𝒕𝒕𝒆𝒓 𝒂𝒏𝒅 𝐦𝐜𝐮 [EDITANDO]

25. 𝐄𝐲𝐞

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Capítulo Veinticinco

Ojo

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❝ Son sirenas las que cantan...❞

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El jueves por la noche Emma bajó a la sala común de Gryffindor y esperó a Harry, cuando esté llego ambos se pusieron la capa de invisibilidad, y exactamente como habían hecho la noche en que Hagrid les mostró los dragones, esperaron a que abrieran el hueco del retrato. Esta vez fue Ron quien esperaba fuera para darle a la Señora Gorda la contraseña.

—Buena suerte — les susurró Ron, entrando en la sala común mientras ellos salían.

En aquella ocasión resultaba difícil moverse bajo la capa, Harry llevaba el pesado huevo en un brazo y Emma llevaba el mapa del merodeador.

Los corredores estaban iluminados por la luz de la luna, vacíos y en silencio, y
consultando el mapa de vez en cuando Emma y Harry se aseguraban de no
encontrarse con nadie a quien quisieran evitar.

Cuando llegaron a la estatua de Boris el Desconcertado, localizaron la puerta, Harry se acercó a ella y susurró la contraseña:

—«Frescura de pino.»

La puerta chirrió al abrirse.

Se deslizaron por ella, Harry echó el cerrojo después de entrar y, mirando a su alrededor, se quitaron la capa invisible.

El baño estaba suavemente iluminado por una espléndida araña llena de velas, y todo era de mármol blanco, incluyendo lo que parecía una piscina vacía de forma rectangular, en el centro de la habitación. Por los bordes de la piscina había unos cien grifos de oro, cada uno de los cuales tenía en la llave una joya de diferente color. Había
asimismo un trampolín, y de las ventanas colgaban largas cortinas de lino blanco. En un rincón Emma vio un montón de toallas blancas mullidas, y en la pared un único cuadro con marco dorado que representaba una sirena rubia profundamente dormida sobre una roca; el largo pelo, que le caía sobre el rostro, se agitaba cada vez que resoplaba.

— ¡Wow! así si me dan ganas de ser prefecta — comentó Emma y avanzó mirando a su alrededor.

Harry puso al lado de la piscina la capa, el huevo, el mapa y una de las mullidas toallas, se arrodilló y abrió unos grifos.

Emma fue y tomó otra toalla para ella. Luego comenzó a sacarse la remera.

Harry se dio vuelta rápidamente con las mejillas rojas.