Mi amor Secreto

Todo para mi muñeco viviente

Patrick y Ricky llegaron a su primera clase de cocina, por esta vez se saltaría la de jardinería, entró y fue bien recibido por los miembros, ya que les entusiasmaba que más sombras quisieran dedicarse a ser pasteleros. _Hoy como será la primera clase de Patrick cocinará algo sencillo, ¡pan! ¿Qué le parece?

_A patrick le parece perfecto pero ¿y si lo hace mal? Tiene un poco de nervios, nunca ha cocinado en su vida.

_Su muñeco viviente le puede dar una ayuda. No se preocupe. Tome. _A ambos se les dio una pañoleta blanca y delantal. Ambos se ayudaron para ponerse lo que le dieron para protegerse.

_Vamos a ver que tan ágil es Patrick en la cocina. _Dicho estas palabras pensó en que pronto Emilico probaría la creación de sus propias manos, pero el proceso ese primer día fue caótico.

Harina esparcida ya que al intentar abrir el saco, lo rasgó y la harina voló por los aires manchando todo, no podían ver así que al intentar palpar con las manos tiraron los ingredientes al suelo las sombras y muñecos entraron en pánico, resbalar con los huevos rotos del piso, los recipientes tirados a causa de la baja visión del sitio, Ricky empezó a estornudar sin parar. Patrick vio el desastre que ocasionó, así que horas después de regresar con un bajón increíble puesto que todos lo miraron diferente.

_Es como si sus miradas dijeran que Patrick no nació para ello.

Ricky aun con su alergia intentó animarlo. _No se preocupe, no todo puede hacerse en el primer intento. Para llegar a la perfección debemos cometer errores y aprender de ellos. _Luego de tan inspiradoras palabras estornudó, su nariz estaba roja y comenzaba a gotear, con su pañuelo se limpiaba tratando de lucir lo mejor posible y seguir con su deber.

_Seguro por que te expusiste a la harina, disculpa a Patrick.

Pasado el tiempo, Patrick volvía a tener un poco de ánimos y siguió leyendo pues Emilico era su inspiración y las palabras de Ricky le alentaron a seguir con su meta.

Ricky estaba sintiendo algo que no le pasaba en mucho tiempo, caer enfermo, estaba cansado, la temperatura estaba subiendo la visión se nubló y lo último que escuchó fue la lejana voz de desesperación de Patrick gritando su nombre.

Para cuando recobró la conciencia estaba sobre la cálida y suave cama de su amo, el sonido de la chimenea era reconfortante, sobre su cabeza reposaba un paño húmedo que Patrick se había encargado de mantener fresco para que bajara la fiebre.

_Amo ¿qué me ha pasado? _Se incorporó lentamente sintiendo como de su frente se resbalaba el paño y con su mano lo atrapó.

Patrick viendo que Ricky estaba despierto se lanzó a él abrazándolo. _¡Ricky! _El nombrado se sorprendió. _¡Qué alivio! Patrick estaba asustado luego que te desmayaste, antes de que tu cabeza tocara el suelo te apañó con sus brazos. _Se separa para mirar al chico. _¿Quieres comer? Patrick ya he cenado y para ti pidió un caldo de verduras con pollo, pan y galletas de vainilla.

_Pero mi amo, no debo... _Patrick silencia  al rubio con su dedo índice. _Recuerda lo que hablamos más temprano, de ahora en adelante a Patrick le gustaría tener la compañía de Ricky a la hora de comer.

Tranquilamente Ricky cenó para recuperar sus fuerzas. Luego que terminó Patrick tocó su frente comprobando que aún tenía temperatura un poco alta. _Debes seguir descansando, vuelve a la cama.

_Pero amo...

_Y vuelves con lo mismo, Patrick quiere asegurarse de que recuperes tu salud.

Ricky no protestó más y se recostó, Patrick fue a cambiarse para dormir. Luego se metió bajo las cobijas al lado de Ricky, lo abrazó ya que nunca habían compartido la cama juntos y era reconfortante tenerlo cerca. Ricky estaba mirando al techo de la cama pensando en que sí quería ser el primero en dormir con Patrick antes que Emilico ya que ellos tenían un vínculo muy especial. Ricky se giró un poco para besar la mejilla de su amo. _Que descanse.