De mal en peor. (Cosas de la vida #1)

Capítulo 33.

Han pasado ya algunos dias de que casi muero de una sobredosis y de que perdí a mi bebé. Me siento triste de solo pensar que jamas lo vere nacer, y me siento un poco culpable por ser la causa de que jamás vera la luz del sol. Pero yo no esperaba estar embarazada, no estaba en mis planes. Creo que de haber sabido que iba a tener un precioso bebé no se habría pasado por mi cabeza seguir tomando esas estupidas pastillas que mas que ayudarme me perjudicaron.

-- ¿Ya estas lista princesa? - el sonido de la voz de Ridley me sobresalta.

-- Ya casi - sonrío a travez del espejo - solo termino con esto y nos podemos ir -  rápidamente termino de trenzar mi cabello, lo amarro con una liga y lo dejo caer sobre mi hombro. Giro lentamente y miro directo a los ojos del hombre que amo y con quien me voy a casar en ocho meses justo tres semanas despues de nuestra graduación de la universidad. 

-- ¿Chicos? Saldre con Tiana - se asoma Charlie en la puerta de mi habitación.

Olvide mencionar que llego justo el dia que sali del hospital, asi que al llegar a casa lo encontre duermiendo en mi habitación junto con una chica que resulta ser su novia Tiana. No me molesto el hecho de haberlos encontrado ahi, sino que por el contrario me puso feliz ver a mi amigo de años. Y el se asusto al verme.

¿Como no? Con solo verme yo tambien me habria asustado. Palida, despeinada, ojerosa y fachosa. No es que haya estado tan mal, sino que les brinque encima y sin querer golpee a Tiana, quien pego un grito y se cayó de la cama. [Eso rimo]

Bueno como iba diciendo se asustaron pero despues de ello Charlie dio un grito de alegria y me abrazó fuertemente y me dio una muy fuerte reprimenda.

-- Esta bien Charlie que te diviertas, solo no hagas cosas que no se puedan hacer en publico - ante esto el solo suelta una pequeña carcajada y se sonroja un poco.

-- Bueno y ¿cuando estes desocupada podemos hablar? -  Charlie se rasca la nunca un poco incomodo - es algo importante.

-- Claro que si, bueno nosotros nos vamos tengo una cita a la que asistir.

(...)

-- Bueno, eso es todo por hoy. Espero verte la proxima semana y hablaremos de ciertas cosas que iremos haciendo en el transcurso de las sesiones. ¿De acuerdo?

Lo unico que puedo hacer es asentir y lentamente me levanto de mi silla.

-- Gracias doctora, y en verdad espero que esto me ayude - la psicologa que estare viendo durante los siguientes meses sonrie ligeramente y despues checa el reloj de pared con forma de angel.

Cuando salgo de la oficina de la psicologa me encuentro con que Ridley no esta. Frunzo el ceño pensando donde puede estar, me quedo unos segundos preguntandome a donde habra ido cuando una voz me saca de mi ensimismamiento.

-- Eh si buscas a tu novio esta afuera comiendo, lamento haberle sacado pero aqui dentro no se puede comer - me dice la mujer que esta en la recepción de la oficina de la psicologa. Despues de agradecerle por decirme donde esta mi prometido salgo del edificio.

Lo encuentro sentado en las escaleras de la entrada, tiene un envase de 7-up a un lado y una caja con donas también. Una sonrisa se posa en mis labios al verlo, con cuidado de no hacer ruido me acerco a el y le tapo los ojos. Sus manos inmediatame viajan a mis manos, suavemente las quita de sus ojos y las posa en sus labios, dejando un pequeño beso en ambas.

-- ¿Que tal fue todo ahi adentro? - se mueve, me toma de la cintura y me mueve de forma que en un abrir y cerrar de ojos quedo sentada en sus piernas.

-- Exelente, creo que despues de todo he cambiado de parecer y el ver a una psicologa m ayudara mucho con mis problemas. Ademas el hecho de que tu estes conmigo me hace sentir muy feliz -le miro a los ojos mientras le digo eso.