Capítulo 40: "¡¿Otra vez?!"

Comincia dall'inizio
                                    

Lo asesiné con la mirada y el enseguida captó el mensaje sonrojándose levemente.


-Pero claro que se han acostado, solo míralos. -Dijo mi tía Lucy reprendiendo con la mirada a mi tío John. -Podría apostar que lo han hecho más de cincuenta veces.


-¡Dios! -Intervine. -¿Acaso importa si nos hemos acostado o no? ¡Que vergüenza! -Dije tapando mi rostro con mis manos.


La noche se nos fue entre risas, comidas, recuerdos y claro, mil y un interrogatorios hacia Liam, no volvieron a preguntar si nos habíamos acostado, cosa que agradecí mucho. Mi familia se había retirado de casa con una muy buena impresión de Liam, lo cual me había hecho sentir muy feliz y orgullosa.


Mi padre... Pues noto que no termina de aceptar nuestra relación, pero la respeta.


Mi hermano no nos quita el ojo de encima, no nos acosa todo el tiempo, pero pasa muy pendiente.


Liam sigue tratando de convencerme de que me mude con el dentro de unas semanas, pero creo que no será así.


-Pero yo gané la apuesta. -Dijo renegando y haciendo un berrinche como un pequeño.


-Pero la decisión es mía. Liam, es demasiado rápido para que vivamos juntos. -Dije entrando a mi recámara seguida por el y quitándome los tacones.


Es oficial, iba a utilizar tenis converse toda la semana. Los pies me están matando.


-¡Por favor! -Rogó juntando sus manos y sacando su labio inferior.


-Calla, Liam. -Sentencié y bajé el cierre de mi vestido. -Mejor ve a tu recámara a dormirte, yo tengo que hacer tarea. -Dije.


En realidad no tenía tarea, pero estaba bastante cansada.


-En realidad, estoy en ella. -Dijo recostándose en la gran cama y comenzando a restregarse sobre esta como un gato.


¿Que mier...?


Terminé de quitarme el vestido y me puse un short de pijama lila con una camiseta de tirantes blanca con un "No Bitch" estampado. Cerré la puerta de la habitación que seguía abierta, entré al baño y cepillé mis dientes y me hice un moño alto para dormir. Retiré todo el maquillaje, lavé mi rostro y bostecé.

Salí del baño y sin siquiera voltear a ver a Liam, me acosté en la cama solo para recibir un gruñido de su parte.


-¿Que te sucede? -Preguntó resoplando con fastidio y colocando su mano en mi cintura abrazándome y recostando su cabeza en mi hombro, pues yo me encontraba a espaldas de el.


Volteé a verlo y me recosté en su pecho acariciando su abdomen.


-No me sucede nada, bebé. -Dije y reí ligeramente.


Nunca le había apodado tan cursi a Liam. "Bebé".


-No me mientas, Kaeth. -Dijo y logré visualizar una mueca. -Dime ¿Porque estabas mal hoy con la mirada baja?


Oh eso...


-Nada. -Dije y apagué la lámpara de la mesita de noche dejando la habitación completamente a oscuras.


No quería recalcar lo sucedido hace unos cuantos meses, porque para Liam fue más difícil que para mi.


Sentí como el se apartaba un poco de mi y se colocaba encima de mi.


Dios...


Sentí su nariz rozar con la mía y como iba dejando besos húmedos por mi clavícula.


Sentí un escalofrío y luego el miedo de que entrasen a mi habitación y nos encontraran de esta manera me invadió.


-A-Alto, L-Liam... -Tartamudeé con la respiración entrecortada.


-Dime que te sucedía hoy y TAL VEZ pare.


-Solo... -No conseguía recuperarme, es increíble como puede ponerme tan nerviosa en poco tiempo. -Es que, pensaba en... En que habría pasado si hubiese tenido a la bebé. -Murmuré lo último.


Escuché como Liam suspiraba pesadamente y dejaba caer su cabeza entre mi cuello.


-A veces también pienso en eso. -Dijo y sentí como su respiración se entrecortaba. -Tenía la esperanza de poder tener algo que nos uniera siempre, tu sabes, algo como... ¿Una hija?


-Todo pasa por algo, supongo. -Dije acariciando su cabello. -Solo no te desmorones por eso.


-¿Lo intentamos otra vez? -Preguntó con una enorme sonrisa.


-Nop. -Dije y con mi dedo índice golpeé suavemente su nariz. -No aún.


-Me estas dando posibilidades.


-No te lo niego, pero tampoco te lo acepto.


-Aún


-Exacto.


Reímos y el se quitó de encima de mi.


-Te amo, Kaeth.


-Y yo a ti. -Dije para luego besarle, recostarme en su pecho escuchando sus relajados latidos y me dormí.

*****

I Am Not A Lady [SIN EDITAR] -LIBRO1Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora