Y pasaron las horas y algunos cuantos días, Haunani encerrada en el cuartico meditando con mucha concentración, sin comida y poca agua para así tener la capacidad de crear su hechizo de hielo más fuerte y no morir en el intento. Hoy no iba a cambiar su rutina, pero Gimli entro dando un portazo y gritando:
-Aragon está aquí, ¡está vivo! - si antes Haunani planeaba regañarlo por romper su meditación, ahora solo quería darle un abrazo. La mujer se paró lo más rapido que pudo y fue corriendo a la entrada de la recidencia donde se enconytraba el rey, allí vió a Legolas, Eowyn y Aragon, demacrado como nunca, pero vivo, entonces soltó un grito y fue llorando a abrazarlo
-Idiota, bobo, pendejo ¿Qué es lo que te pasa? Ni se te ocurra hacer otra tontería como esa porque si lo haces, yo misma te reviviré solo para matarte con mis propias manos-siguió abrazandolo mientras lo regañaba sin darse cuenta que los estaba llenando de escarcha
-Haunani -le dice Aragon con diversión -me estas congelando -la mujer se quedó unos momentos pensando y cuando se dió cuenta, se apartó rapidamente
-Lo siento -dijo mientras le quitaba la escarcha de la ropa -He estado concentrandome en ampliar mi llamado del invierno, el rey quiere que use mi don para ayudar en la batalla, por eso estoy sensible
-Entonces necesitas descansar un poco, tanto esfuerzo te va a dejar exhausta para la batalla -Le dice Legolas, le toma de la mano mientras observa como se llena de escarcha, quiere darle algo de calor pues ella está más fría que de costumbre, además notó un poco de escarcha en sus pestañas y pelo.
Entonces Aragon abre la puerta y se encuntra con el rey, el cual estaba con sus demás hombres planeando la defensa. Pero Aragon llegó con noticias inquietantes
-¿Una gran orda dices? -dice el rey con preocupación
-Isengard quedó vacío -le responde Aragon mientras Haunani le atiene las heridas
-¿Son muchos?
-Sí, al menos diez mil soldados
-Tantos
-Y todos vienen con un propósito -recalca Aragon -destruir el mundo del hombre, vendrán para el anochecer -El rey se fue del lugar con rabia mientras decía
-¡Que se atreban!
Salió de ahí con mucha furia, todos los demás lo seguían apresurados
-Quiero que todo hombre o niño capaz de pelear se aliste para luchar esta noche -uno de sus hombres asintió y fue a reclutar personas
-Niños? -pregunta Haunani con sopresa -pero si no saben nada de pelear, van a quedar con traumas, jamás podrían salir con vida -le dice angustiada mientras estrecha con más fuerza la mano de Legolas la cual esta cubierta de hielo (pero eso a él no le importa)
-Es lo que tenemos, si quiere protegerlos, trabaje más en lo que sea que quiera hacer con su magia -El rey junto con los cuatro de la compañía salieron de la muralla -Cubriremos la calzada y la entrada por arriba -comenta -¡ningún ejercito a penetrado el muro del abismo o a puesto un pie dentro de cuernavilla!
-Esta no es una manada de imbeciles orcos -le dice Gimli advirtiendole -Estos son Uruk-Hai, su armadura es grusas y sus escudos son anchos -el rey no está de buen humor, así que se le acerca y le dice con sorna
-He peleado muchas guerras Maese enano, se como defender mi castillo -y leugo se va para seguir dando ordenes -Se estrellaran en la fortaleza como el agua en las rocas. Las ordas de Saruman robarán y quemarán, no es ninguna sopresa, las cosechas se recuperarán, haremos casas. Dentro de estos muros, vamos a resitir
-No vinieron a destruir las cosechas ni las viviendas, han venido a destruir a su pueblo, incluso a los niños -le comenta Aragon desesperado por la ceguera del rey
