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A veces le gustaba mirarlo desde el fondo del salón por horas. Y no es que tuviera una obsesión con el chico, es que simplemente era tan agradable para la vista que podía perderse en su perfil la clase completa.

Habían pasado casi dos años desde que se conocieron, bueno en realidad el término "conocieron" no aplicaba muy bien a su particular contexto. Ya que él simplemente lo saludaba con una amable sonrisa cuando se topaban en clases o los pasillos de la universidad. Decir que no había intentado acercarse en múltiples oportunidades era ser injustos, ya que en más de una ocasión se halló inventando alguna excusa para poder entablar conversación, pero una y otra vez era completamente aplastado por la lejana amabilidad de aquel chico. Y es que él era tan dulcemente cortante que le dolía el corazón cada que rechazaba sus intentos por acercarse.

Honestamente, cuando se enteró de todo lo que pasaba con su compañero de clases, se molestó un poco porque siempre pensó que era del tipo de persona que mantenía un perfil bajo y evitaba involucrarse en cualquier tipo de lío. Pero desde que ese rugbista había empezado a juntarse con ellos, Hoseok había cambiado completamente para mal. Ya no era el mismo y debía hacer algo para ayudarlo a abrir los ojos.

No iba a abandonar su objetivo, él lo necesitaba cerca en su vida. Él no merecía a un tipejo como ese Taehyung, él merecía algo mucho mejor que eso y haría todo lo posible por hacerlo entrar en razón.

-Hoseok, hola - le dijo en cuanto se cruzaron a la entrada del salón -. ¿Estudiaste para el examen?

-Para nada - replicó cabizbajo.

-¿En serio? - preguntó siguiéndolo hacia su pupitre -. ¿Jung Hoseok no estudió? ¿Pasa algo?

-No pasa nada, gracias - respondió con una leve sonrisa mientras se acomodaba en su puesto sin volver a levantar la vista.

Jaebeom no se iba a dar por vencido, él se acercaría a Hoseok a toda costa. Pero no estaba obsesionado, no. Solo le gustaba verlo sonreír cada vez que hacía algo, topárselo en el autobús o pasar casualmente por donde trabajaba. Todo era una linda coincidencia de la vida, era el destino.

Cuando el profesor retiró el último examen, Hoseok se puso de pie rápidamente comenzando a guardar sus cosas en su bolso. Jaebeom lo observó desde el otro lado del salón y se sintió levemente molesto al ver cómo le sonreía lindamente a la pantalla de su teléfono. Se apresuró a avanzar para así poder caminar casualmente a su lado e intentar, una vez más, entablar conversación.

-¿Muy difícil? - le preguntó al alcanzarlo siendo completamente ignorado -. ¿Hoseok? - se atrevió a tomarlo del brazo cuando el chico avanzó sin prestarle atención con la mirada fija hacia el frente y una sonrisa de 3 kilómetros.

-Disculpa, ¿necesitas algo?

El chico a quien Hoseok miraba sin pestañear, lo observaba con una mueca molesta en el rostro mirando fijamente el agarre que Jaebeom ejercía en su novio.

-Te pregunté si necesitas algo -repitió -.

-¿Jae? - Hoseok se volvió a él y notó que lo tenía tomado del brazo, ni siquiera se había dado cuenta de que lo seguía y menos de que lo tocaba-. ¿Qué pasa?

-Hmmm yo -balbuceó sin soltarlo -. Hoseok yo necesito ayuda con unos papers de literatura antigua y medieval - mintió -. ¿Crees que puedas ayudarme con eso?

-Ahmm, hummm yo- yo no sé si soy la persona indicada - le respondió soltándose sutilmente de su agarre y mirándolo con aprensión -. Quizás sea mejor que le pidas ayuda a Giselle, ella es la ayudante del profesor.

-Vamos - intervino Taehyung -. Nos vemos por ahí, Jaebeom.

Tae sostuvo la mirada de aquel chico intentando advertirle que no debía acercarse a su novio bajo ningún caso. Hoseok por su parte, solo inclinó su cabeza levemente y se volteó para tomar a su pareja de la mano y alejarse sin mirar atrás.

Solo un juego más - VHOPE {terminado}Where stories live. Discover now