Después de la tormenta, desición y ¡No es un adiós, sino un hasta pronto!

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Narra Elizabeth:
Todo por fin acabó, Yami marik al final fué derrotado, volví a mi forma original, con la respiración agitada pero más fuerte que nunca, no sólo enfrenté mi mayor miedo, Mi oscuridad y mi soledad,sino que al fin tengo lo que siempre soñé:Amigos y a mí familia; mis amigos al notar que estaba bien corrieron a abrazarme...
-Es bueno saber que estas bien aunque te veías muy bien con esa última apariencia- dice divertido éste Joey a lo que me sonrojo ligeramente, cosa que molestó a mis hermanos (Seto, Mokuba, Maat y Marik) y a Raiden a lo que se ganó un buen golpe de los mencionados.
-Más cuidado con tus palabras Wheeler- dice Seto con molestia, solo sonreí con alegría, todo había vuelto a la normalidad y nadie (además de todo lo lo que me pasó a mí y Bakura) salió herido. Volteé a ver a Marik con cariño, cosa que él se dió cuenta, mis ojos se nublaban por las lágrimas de alegría que trataba de retener, Marik me miró con una sonrisa y me abrió los brazos indicándome que lo abrazara, no dudé ni un solo segundo y me lancé a sus brazos, Marik me acariciaba mi cabeza tiernamente mientras yo escondía mi rostro en su pecho, sollozando levemente.
-No vuelvas a arriesgarte de ese modo, creí... Realmente creí que te había perdido Mar, no vuelvas a hacer esa clase de cosas por protegerme- digo con algunas lágrimas deslizándose por mis mejillas.
-Tranquila mi pequeño Lucero, estoy bien, tu me trajiste de vuelta, mi pequeño rayo de luz en la oscuridad, debo agradecértelo al igual que al faraón- dice con una pequeña sonrisa y continuando con su acción.
-Yo no hice nada, fueron Odion y Ishizu quienes te trajeron de vuelta- digo separándome de él con la cabeza gacha, pero de inmediato senti que alguien me dió un fuerte golpe en la cabeza...
-¡Deja de menospreciarte Elizabeth, tú ayudaste incluso más que cualquiera de nosotros, deja de tratarte como si no valieras nada!- me dice Joey algo molesto por mi actitud.
-Tu amigo tiene razón señorita Elizabeth...- me dice Odion acercándose a mí-De no haber sido por usted, nos hubiera costado más regresar a Marik a ser el mismo- dice mirándome con agradecimiento.
-Marik necesitaba a alguien a quien cuidar y eso lo encontró contigo, una pequeña esperanza en él- dice Ishizu mirándome con una pequeña sonrisa.
-Pero la serie...- traté de analizar.
-Todo cambió desde que llegaste a este mundo Lizzie, como te diste cuenta, hiciste que nuestra vida fuera impredecible- inició Yami tomándome de la mano mirándome con adoración y cariño.
-Fuiste la única en apoyarnos incondicionalmente, sin importar que sucediera- dice Mokuba con una sonrisa, sonreí inconscientemente, el calor de mi pecho se encendió de forma agradable.
-Gracias chicos... Por aparecer en mi vida- digo dulcemente. Ellos sonrieron del mismo modo, incluso Seto me veía con una pequeña sonrisa sin que el resto de los chicos se dieran cuenta. Los hermanos Ishtar empezaron a hablar sobre llevar una nueva vida ya que la misión de Marik se vió concluida hasta que...
-Perdon interrumpir, pero como organizador del torneo de Ciudad Batallas, no me queda más que felicitar al ganador, aunque tú solo obtuviste la victoria gracias a la renuncia de Marik- dice seriamente mi hermano a Yami, sonreí ligeramente sabía que a pesar de su rivalidad entre ambos había una gran amistad que se irá formando con el tiempo, (aunque sé que Seto nunca lo admitirá) y eso me alegraba.
-Fué un gran duelo, y como premio obtendrás la carta más rara de tu oponente- dice Mokuba con alegría. Marik se acercó a nosotros y Yami soltó mi mano recibiendo la carta del Dragón Alado de Rá y aseguró que Bakura estaría bien y regresaría del Reino de las Sombras. Aún me preocupaba el asunto del Espíritu Maligno de la Sortija del Milenio pero no nos molestará por el momento, después de mostrarle los escritos escritos en la espalda de Marik y saber el secreto para liberar el poder del faraón, Marik le entregó el cetro y la sortija del Milenio a Yami. Regresamos a la nave de Kaiba Corp para regresar a la capital ya que, por lo menos yo ya sabía que Seto destruiría la torre de duelos, aún con los problemas con la nave logramos regresar a casa y el susto que tuvieron los chicos hacia los hermanos kaiba que al final salieron ilesos de la explosión y que casi nos linchan a Maat y a mí ya que éramos los únicos que sabíamos sobre lo que ocurriría. Al llegar a Ciudad Domino nos empezamos a despedir de Marik, Odion e Ishizu le dí mi número de teléfono a los hermanos para estar en contacto con ellos y ver si podrían venir en unos 2 meses para mi cumpleaños cosa que les alegró, por fin conseguí que Marik y Maat me dijeran cuál era la disconformidad entre ellos, pues resulta que entre ambos estaban celosos entre sí, ya que al Maat tener mayor libertad, Marik quería tener su puesto y Maat el de Marik de portar el secreto del poder del faraón, cosa que sus padres no se los permitieron siendo que ya lo tenían destinados en cada familia,ya que él es muy leal al faraón, cosa que comenzó en rivalidad entre ambos chicos, aunque Ishizu y Maat se llevaban muy bien y eso causó otra discusión con el menor de los Ishtar, y todavía contando lo que ocurrió hace poco, el enojo de Maat aumentó un poco más. Hablé con ambos ya que no quería que hubiera momentos incómodos entre ellos y más cuando empecé a tomarles más cariño, conseguí que hicieran las pases ambos que hasta me sorprendió que se abrazaran...
-Fué tierno lo que hiciste por ellos, pequeña- me dice Kaori con una sonrisa acercándose a mí y poniendo una mano en mi hombro.
-Es mejor curar, aliviar y olvidar las heridas; él no tuvo la culpa, solo que su pasado no fué lo mejor en esos momentos, y como le dije, yo realmente lo entiendo ya que el mío fué más ó menos igual- digo mirando a Marik con nostalgia.
-Realmente hiciste mucho por todos Eli, te agradecemos por volver a reunirnos, estaremos en deuda contigo siempre- me dice Raiden del mismo modo que su esposa.
-No hay nada que agradecer Ray, cumplí mi promesa y tú igual abriste tus brazos a esta joven hechicera, también te lo agradezco- digo con una dulce sonrisa.
-Megumi necesitaba una hermana mayor, gracias por aceptarnos a pesar del modo que nos conocimos- me dice algo apenado.
-No hay problema, ya quedó en el pasado, padre- digo con una sonrisa, los 3 se sorprendieron pero me sonrieron y me abrazaron con cariño. La familia Sasaki se fueron con los hermanos Ishtar; Josh también se despidió de mí y se fué ya que con el ya tenía su número de teléfono,así quedando sólo mis amigos yo, en eso recibí un mensaje en mi teléfono que decía...

Dentro de Yu-Gi-Oh: Cambiando la historiaWhere stories live. Discover now