Capitulo 4

637 69 3
                                    

Phayu

Si había algo de lo que jamás en mi vida me arrepentiría era haber aceptado la ayuda de P'Pakin, aún cuando eso significaba trabajar en la línea entre lo legal y lo ilegal.

Porque aún cuando quise ignorar una amable invitación a trabajar con el, debía recordar que había tomado una responsabilidad importante...

Sky

Era un niño que necesitaba protección, sus padre habían fallecido junto a los míos, ambos trabajaban para mí familia y aún cuando yo mismo era un joven mi sentido de responsabilidad me hizo madurar, por lo que sin dudar tome el cargo del llorón pequeño.

Recordaba claramente como la herencia de mis padres mermaba rápidamente y necesitaba ayudar a mantenernos antes de que nos quedaramos sin dinero, en eso y como la más irónica casualidad un dia justo frente a mi se apagó la moto de P'Pakin.

Mi pasión por los autos me hizo acercarme por curiosidad para ayudar sin ningún interés a un desconocido pero de eso a volverme su mecánico principal fue cuestión de poco tiempo.

Solo que jamás me imaginé que tendría que ocultarme en la fachada de mecánico y no solo para poder seguir viviendo cómodamente si no que también poder mantener los estudios de los tres, todo era gracias a los pagos que recibía  por reparar los autos personales de P'Pakin, pronto y gracias a qué P'Pakin confiaba y valoraba mi trabajo, nos empezarían a pagar a Saifah y a mi por reparar, mantener y cuidar las motos de las carreras ilegales.

Su confianza en mi en estos años se había vuelto ciega y sólida y solo gracias a eso no solo fue que supe sobre sus conexiones y amistades si no que también empecé a trabajar para sus carreras y algún que otra persona influyente que estuviera dispuesto a pagar una buena cantidad por mis servicios a sus autos y motos.

Los que se volvieron mis principales clientes después de P'Pakin y su mano derecha, era la familia Theerapanyakul y sus socios de los que nadie sabía nada pero todos conocen los Thitipong.

Todos sus miembros, de ambas ramas de la familia, sumando al par que conformaban la otra familia, me daba más escalofríos que nada en el mundo.

Pero el que nunca abandonaba mi mente era el pequeño demonio de Rain Thitipong... El Ángel de la Muerte, el asesino más letal de todo el maldito país.

Cómo odiaba no poder verlo como un simple asesino a sueldo.

Rain... Una criatura pequeña, de apariencia frágil y hermosos ojos que te hacían creer que era el ser más inocente del mundo, pero yo sabía la realidad, yo sabía muy bien como esos ojos se volvían de hielo y mirar sin dudar y con completa indiferencia como le arrebataban la vida a alguien.

Esa noche que lo ví por primera vez fue en una de las carreras ilegales, ya conocía a Phraphai y era alguien fácil de tratar, sobretodo cuando compartíamos la misma pasión, en otrad circunstancias podríamos ser los mejores amigos, sin embargo no podía olvidar que era el líder de una mafia poderosa, socio de P'Pakin.

Phai nunca llevaba a nadie y siempre se iba con la conquista de turno, pero siempre llegaba solo, a excepción de esa noche.

Se apareció con un ratoncito de apariencia asustada a su espalda, que no hablaba, no sonreía con nadie... Pero cuando le di un refresco me dedico la sonrisa más bonita que había visto en mi vida, haciendo que mi instinto fuera estar cerca de el y protegerlo, un sentimiento completamente diferente a con Sky.

Familia Where stories live. Discover now