LOYAL ⫷Crónicas de Narnia⫸

XXV

Doce años habían pasado desde el nacimiento de Aravis, la tercera y ultima hija de Catalina y Caspian quienes decidieron que con tres hijos tenían suficiente, aunque si en algún momento llegaba otro de sorpresa lo recibirian con mucho amor.

Durante esos años, Catalina y Caspian continuaron liderando al reino de Narnia de la misma manera en que llevaban haciendolo durante los ultimos diecisiete años, junto con la ayuda de sus confidentes mas cercanos, pero no todo era facil debido a sus hijos adolescentes, aunque a menudo se escapaban por las noches para cabalgar por los alrededores de Cair Paravel y alejarse un poco de la rutina, ademas de recordar sus escapadas que tenian cuando eran jovenes.

La carta que recibio Mary por parte del principe Maksim cuando nacio Aravis no fue la ultima debido a que llevaban escribiendose cartas semanales desde entonces, que a menudo Mary les contaba a su familia de lo que hablaba con Maksim.

Por otro lado, Rillian había crecido muy unido a su abuelo por lo que pasaba gran parte de su biblioteca, a excepción de cuando entrenaba junto con sus hermanas con las armas que habían escogido y cuando se encerraba en su habitación con su pareja quien tambien habia crecido en el palacio, lo cual no era un secreto para nadie.

Y en cuanto a Aravis, ella apenas tenia once años pero estaba demasiado interesada en los asuntos del reino a pesar de no ser la heredera al trono, demostrandolo al asistir a todas las juntas para tratar asuntos del reino e informarse acerca de toda la historia de Narnia y sus ambitos politicos.

Durante muchos años, la paz había reinado en Narnia para fortuna de todos, pero nada dura para siempre...

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Lo que parecia ser una mañana tranquila en Cair Paravel se convirtio en una ilusión cuando una discusión se desarrollo entre los mellizos en medio de su entrenamiento mañanero, lo que causo que Glenstorm les arrebatara sus armas antes de que se atacaran mutuamente con ellas mientras que Aravis rodaba los ojos al tiempo que se iba del campo de entrenamiento para ir al comedor donde sus padres y abuelo se encontraban desayunando.

- Buenos días- Saludo Aravis abrazando a sus padres antes de tomar asiento en su lugar

- Buenos días linda, creimos que seguirias entrenando con tus hermanos y Glenstorm- Catalina fruncio el ceño viendo como su hija menor agarraba comida para servirse en su plato

- Empezaron a pelearse- Aravis se encogio de hombros

- Por favor dime que no tenian sus armas- Suspiro Caspian pasando sus manos por su cara

- Si las tenian- Asintio Aravis provocando que sus padres gruñeran de fastidio- Pero Glenstorm se apresuro a quitarselas

- Gracias a Aslan- Mascullo Cornelius

- A veces creo que yo debi de ser hija unica- Solto Aravis- Yo no causo problemas, me porto bien, los otros dos solo pelean

- Aunque no lo creas hubo un tiempo en que no lo hacían- Menciono Caspian con añoranza- Durante sus primeros seis años

- Sorprendentemente fue nuestro unico tiempo de paz como padres- Comento Catalina

Justo cuando Aravis estaba a punto de soltar un comentario sarcastico, escucharon como afuera del comedor pasaban los mellizos teniendo una discusión.

- ¡Eres insoportable!- Grito Mary

- ¡Tu lo eres mas!- Respondio Rilian- ¡Sabes que yo siempre utilizo la ballesta!

- ¡Pero yo queria utilizarla hoy! ¡Podias haber usado la espada!

- ¡La use ayer! ¡La ballesta era mia!