Al crecer siendo nieta del doctor Cornelius, Catalina tuvo la oportunidad de crecer en el castillo telmarino junto a Caspian mientras se educaban en las mismas asignaturas y actividades no académicas, al tiempo que clandestinamente escuchaban las hi...
Oops! Această imagine nu respectă Ghidul de Conținut. Pentru a continua publicarea, te rugăm să înlături imaginea sau să încarci o altă imagine.
- ¿Por qué yo no puedo ir?- Interrogo Catalina a Caspian mientras se colocaba la armadura- Ayude a hacer la estrategia para invadir el castillo, yo debería ir con ustedes
- A mi también me gustaría que fueras conmigo- Caspian tomo su cintura mirándola a los ojos- Pero prefiero que te quedes aquí a encargarte de todo, de esa manera ambos estaremos liderando a pesar de estar en lugares diferentes
- Si no voy, prométeme que traerás a salvo a mi abuelo
- Lo prometo- Asintió Caspian juntando sus frentes- Incluso puedo traer tu vestido de novia
- Buen intento, pero no lo veras hasta que sea el día- Rio Catalina llevando sus manos a sus mejillas
Lentamente, empezaron a besarse con la comodidad de estar en un pequeño cuarto que les habían otorgado al llegar.
- Todavía hay tiempo antes de que me vaya- Murmuro Caspian bajando sus besos a su cuello
- ¿Qué sugieres hacer en ese tiempo?- Suspiro enredando sus manos en su cabello
- Tengo algunas ideas
Rápidamente se agacho ligeramente para tomarla de los muslos, a lo que ella enredo sus piernas en su cintura sin despegarse del beso; tratando de no hacer el mayor ruido posible, empezaron a despojarse de sus vestimentas.
Una vez que ya no existieran barreras que se interpusieran entre ellos, Caspian camino hasta la sencilla cama que compartían para caer suavemente sobre ella con el encima, donde continuaron intensificando el momento.
Entre caricias, suspiros y besos, se unieron en uno solo quedándose quietos por unos segundos para dejar que sus cuerpos se adaptaran, a pesar de ya haberlo hecho múltiples veces pero siempre tenían esa costumbre para no lastimarse.
Cuando se sintieron listos, empezaron a moverse suavemente sin despegar la mirada de los ojos del otro.
Minutos después de terminar el acto sexual, Catalina ayudo a Caspian a colocarse su armadura de nuevo luego de vestirse con su ropa; una vez que terminaron de arreglarse, empezaron a caminar hacia la salida donde todos los que irían ya se encontraban ahí reunidos.
- Por favor, regresa con vida- Rogo Catalina- No me importa si tienes unas cuantas heridas, solo quiero que regreses a salvo
- Siempre volveré junto a ti- Aseguro Caspian con determinación- Esto no será la excepción, y prometo traer al profesor con nosotros
Dejándose llevar, Catalina se abalanzo a abrazar a Caspian fuertemente, a lo que el respondió enterrando su nariz en la curvatura de su cuello.
- Oigan- Edmund se acerco tímidamente- Ya es hora de irnos
- Déjame adivinar, perdiste algo y te mandaron a ti- Rio Catalina cuando se separaron
