Hace tiempo que habíamos salido de esas cuevas de mierda. No fue algo tan interesante como para mencionarlo ahora.
Estábamos en una extensa y sinuosa red de carreteras asfaltadas y casas residenciales, similar a un vecindario suburbano moderno. Habia niebla a nuestro alrededor, lo suficientemente espesa como para no poder ver nada mas de diez metros adelante.
Esto no parecía ser algo particularmente bueno.
Allen nos habia advertido que no habláramos por ningún motivo y que intentáramos buscar unas señales que apunten al norte para llegar a nuestra meta personal, el nivel 11.
Kane y yo nos manteníamos juntos. Sabíamos que este nivel estaba infestado de entidades hambrientas que harían lo que fuera por atraparnos.
Los gruñidos pasivos indicaban que no estábamos equivocados.
Levante mi mano hacia una de las calles cercanas. Finalmente habíamos encontrado las señales.
Ambos nos movimos lentamente hacia los carteles metálicos de color verde sin texto. De vez en cuando uno de los dos volteábamos a ver atrás. Eso era para evitar una muerte segura a manos de una de las muchas entidades presentes.
Habíamos cruzado por varias calles sumidas en la soledad absoluta.
Habíamos visto criaturas que escapaban de la imaginación humana.
Eso me hizo pensar, que los backrooms son tan similares a la realidad donde solíamos existir Kane y yo. Este vecindario tiene algo que me hace pensar que ya habia estado aquí.
Es mas que claro que eso no es posible.
Casi llegábamos al limite de las 100 millas. Faltaba poco mas de 12.
Los cambios comenzaban a notarse a nuestro alrededor. La niebla empezaba a desaparecer, las casas pasaban a ser edificios o tiendas y la oscuridad comenzaba a ser lentamente reemplazada por la luz del sol.
Mire hacia arriba. Ahora, podía ver mas que solo oscuridad.
Era un poco agobiante y repetitivo ver la misma maldita oscuridad en todos lados. Esto era un buen descanso para mis ojos.
Ambos nos levantamos con dificultad, admirando el lugar al que tanto habíamos luchado por llegar en una pieza.
¡Bienvenidos a la ciudad interminable!
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The Backrooms: Vol. I
Bilim Kurgu- Cometimos un error, ¿No lo ves? esos niños...nunca volverán a casa...- dijo, con la cara hecha mierda, lagrimas salían de sus ojos. Ella no podía con esto. El tomo su mano. Quería hacerle saber que el estaba ahí. - ¿De que hablas? Ellos lo cometie...
