Capítulo 16

198 27 7
                                    

El alfa seguía sin entender nada, si bien la visita al pequeño apartamento del omega no había sido del todo desastrosa, tampoco podía decir que fue la más productiva. No pudo concluir la conversación con el chico, justo cuando pensó que las cosas estaban a punto de aclararse, que el ojiverde estaba dispuesto a escucharlo, la pareja de amigos que siempre parecían estar rodeando al chico, llegó a interrumpir su charla, ahora, una semana después de aquel evento, Joel podía perfectamente entender que esas personas estaban invitadas a almorzar ya que la mesa estaba servida pero de todas maneras, en aquel momento específco el rizado no se pudo percatar. 

Tiene que admitir que se enojó bastante, que la presencia de otro alfa en aquel espacio lo puso muy inquieto, tuvo que hacer un llamado a todo su autocontrol para marcharse y dejar a su omega en la compañía de aquella pereja, tuvo que comportarse como un caballero y largarse del apartamento porque así lo podió Erick. Ha pasado toda una semana y a pesar de que le dijo que lo llamaría y que él mismo se ocupó de dejar su número personal escrito en un papel, el omega no ha llamado, ni siquiera ha dejado un mensaje y eso lo está volviendo loco, puede ir una vez más hasta su casa, puede buscarlo en la empresa pero no lo ha hecho, ha luchado en contra de todas las ganas y se ha mantenido firme porque le hizo una promesa. Joel quiere hacer las cosas bien, quiere demostrarle a ese pequeño lo mucho que le importa y está dispuesto a esperar pero eso no significa que le siente bien.

Estos días han pasado algo tensos, la empresa marcha bien y le gusta que todo funcione pero un nuevo proyecto siempre trae algo de inestabilidad, algo de cambios y tal vez su estado de ánimo es lo que le impide concentrarse. Está tratando de separar el trabajo de su vida privada, siempre ha sido un hombre que mantiene muy bien definidas sus prioridades y es consciente de que una de las principales claves del éxito en su vida como empresario, ha sido precisamente eso, mantener bien separado el trabajo de los sentimientos y hasta hace muy poco le estaba yendo bien sin embargo a raiz de la llegada de unos ojos verdes desastrosos, el alfa se ha encontrado a sí mismo bastante inestable emocionalemte y eso causa que su carácter sea algo...irritable.

-No lo se, ya te dije que no lo se. No es la primera vez que preguntas y mi respuesta sigue siendo la misma, no tengo ni puta idea, Richard.

-Oye, no quiero ser impertinente pero ya tuvimos una conversación como esta hace un tiempo y...

-No es lo mismo pero impertinente si eres, es parte de tí.

-Claro, como si tú no fueras un maldito amargado insoportable. Mira, ya se que estás tenso porque el niño no te ha llamado pero eso no significa que se olvidó de tí, yo pienso que simplemente le da vergüenza, a fin de cuentas eres el dueño de la empresa en la que él trabaja y digamos que no han tenido la relación más...normal.

-Richard...

-No, Richard no, es la verdad, estás tomando todo como un chiquillo sin experiencia, pareces un chachorro pidiendo amor, Joel, por favor. El chico te corresponde, ya sabes que aquella vez se puso todo loco porque sintió un aroma en tí y aunque...

-Yo no tenía ningún aroma, no se de donde sacó aquello, hace tiempo no estoy con ninguna omega. -El alfa se estaba incomodando, cada vez que recordaba ese detalle, una especie de ira comenzaba a arremolinarse dentro de su cuerpo porque no entendía como el pequeño pudo abandonarlo por algo como eso cuando el estaba seguro de que no había tenido a ninguna omega cerca.

-Si, bueno, sobre eso...¿Cuándo fue la última vez que tuviste sexo? -Preguntó burlonamente su mejor amigo sin embargo el rizado no lo tomó de la mejor manera.

-Idiota, eres un verdadero idiota.

-Solo era una pregunta.

-Una pregunta estúpida, sabes bien que no soy de esos alfas que va por ahí follando como si no hubiese mañana, solo estoy con alguien cuando es necesario y siempre me preocupo de que no haya ningún accidente y de que no tengan ningún olor.

Digamos que Joel no era un alfa como los demás, no le gustaban los aromas dulces, mucho menos los que desprenden las omegas cuando están en celo, no, eso para él no era excitante, no era llamativo, contrario a eso le molestaba, casi que le repugnaba oler la necesidad de esas criaturas que no lo veían como algo más que un pedazo de carne. Joel tenía un par de personas a las que recurría alguna vez cuando el deseo físico era insoportable, cuando no podía satisfacerse a sí mismo y ansiaba un cuerpo para liberar tensiones sin embargo no eran más que eso, un medio para "sentirse mejor" porque él, a pesar de no ser un romántico que soñaba encontrar a su alma gemela, si tenía la esperanza de coincidir con esa persona y entonces...entregarse.

-Lo se, amigo, no es necesario que me mires con esa cara, solo trato de ayudar.

-Pues no ayudas, no así.

-Está bien, no diré nada más al respecto pero si te diré algo. -Habló Richard con un tono de voz serio y se acercó a su amigo. -Se un poco más positivo, eres un buen hombre y por lo que me cuentas, él es un buen chico, dale tiempo, solo debe tener miedo de enfrentarse a lo desconocido, seguramente nunca ha tenido este tipo de situación en su vida. Al final del día, no es más que un muchacho que descubrió de la noche a la mañana que su alfa es el magnate que compró la empresa para la que él limpia el suelo.

-Limpiar el suelo no lo hace menos que nadie.

-No...pero...¿Has pensado en lo que cree él? No sabes si se avergüenza, no sabes si se siente menos, no sabes si de una u otra forma él siente que no está a tu altura.

-No digas eso, no hables así de Erick. -Joel estaba enojado, aunque en el fondo sabía que el moreno tenía razón, le costaba calmar su molestia.

-No estoy hablando mal de él, al contrario, hombre, no seas tan cerrado, me refiero a que tú no sabes realmente como se siente el muchacho, se le nota en la cara que es un chico de un mundo diferente al tuyo y es muy normal que se sienta inseguro.

-Pero yo soy su alfa, no tiene por que sentirse inseguro conmigo.

-Joel, en serio te pones muy cerrado cuando quieres. Mírame. -Habló una vez más con el rostro serio, quería mucho a su mejor amigo y realmente le dolía ver como este era incapaz de razonar de forma correcta, lo entendía, obviamente lo hacía pero por eso precisamente necesitaba que lo escuchara. -Yo no estoy diciendo que le generes inseguridades, de hecho, estoy seguro de que se siente bien contigo y que te acepta como su alfa pero no debe ser fácil para él descubrir de un día para el otro que su destinado es un hombre como tú, un hombre que impone por su presencia y su aura fuerte y que además es literalmente su jefe y no te lo tomes a mal, considero que todo trabajo es honrado y digno pero en este mundo en que vivimos, las clases sociales están jodidamente marcadas y al final del día el chico no es más que un empleado de limpieza que debe sentirse aterrado de esta situación, debe tener miedo de que lo lastimes o lo uses, debe tener miedo de que el resto de la gente piense que está contigo por interés.

-Yo nunca le haría daño. -Casi ladró el de cabello rizado, su amigo solo suspiró mientras lo miraba con algo de pena.

-Lo se, amigo, lo se pero trata de entender lo que te digo, solo ponte por un segundo en su lugar y piensa que harías o como te sentirías si fueras tú quien tiene delante a un hombre que es tu superior en todo y llega a cambiar tu mundo para ponerlo de cabeza.

Y Joel realmente se quedó pensando, quizás Richard tenía razón y Erick si lo quería, solo que tenía miedo. Así que se hizo una promesa, él, Joel Pimentel de León, haría todo lo posible por demostrarle a aquel bonito ojiverde que no tenía nada que temer y que estaba dispuesto a amarlo y cuidarlo por toda la eternidad.

 Así que se hizo una promesa, él, Joel Pimentel de León, haría todo lo posible por demostrarle a aquel bonito ojiverde que no tenía nada que temer y que estaba dispuesto a amarlo y cuidarlo por toda la eternidad

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
ForeignWhere stories live. Discover now