Gravity Falls. El Segundo Verano.

Padre yupiiii.

-¡Quieto ahí! ¡No te muevas! -Grito en aquel momento Ford mientras sacaba rápidamente su arma y me apuntaba con una pistola de tecnología alienigena robada. Claro que esa cosa no me puede hacer nada, aunque en este estado tampoco estaría muy seguro.

-¿Saben? No pensé que me curarían mis heridas. -Comente mientras me miraba los vendajes que me cubrían el torso, he ignorando completamente a mi tío en el proceso. -Se los agradezco en verdad chicos. -Termine de decir mientras levantaba mi mirada y les mostraba una gran sonrisa. -Aunque ha pesar de eso, estoy muy ocupado como para una reunión familiar ahora. Por tanto, lo siento tíos, Mabel, pero me voy. ¡Hasta dentro de 13 años! -Exclamo moviendome a la puerta del laboratorio.

Antes de salir los mire a todos por última vez y utilice mi velocidad demoníaca para salir del escondite de Ford y de la cabaña para dirigirme al bosque en busca de respuestas y de indicios de mi familia actual.

Satán si les paso algo a Bill o a ellos de verdad que no podría soportarlo. Pero solamente puedo averiguarlo regresando a bosque a buscar el portal que me arrojo aquí. Y si se cerro entonces usare la tecnología del ovni para abrir otro pero de que regresare con ellos y le daré una paliza al desgraciado demonio rojo que me hizo esto, lo haré. 

O ese era el plan pero parece que DE VERDAD recibí MUCHO MÁS DAÑO del que creí. Porque apenas salí de la cabaña sentí mi herida arder y quede en es suelo OTRA VEZ, completamente incapaz de usar magia alguna.

No paso mucho tiempo para que mi antigua familia saliera en mi búsqueda y me vieran en el suelo y retorciéndome de dolor.

-Mierda... ¡MIERDA! ¡Maldita sea! ¡Cuando te ponga las manos encima te juro que TE MATARE LUDOCIEL!  ¡HAARGGHH! 

Volví a gritar de dolor sin poder evitarlo y siendo incapaz de volver a ver a a las personas con quienes comparto sangre. Hice el completo ridículo. Primero juego a ser orgulloso y hago un; "Me voy de nuevo para no volver a verlos nunca" y luego termino de esta forma. En verdad no podía volver a verlos pero por la vergüenza, sobre todo porque esta es la primera vez que nos vemos desde que huí con Bill y me volví un demonio. Ya es mucho saber que soy la oveja negra de la familia, ahora todo empeora porque le tengo que dar la cara a mis miedos.

-Dipper. -Me hablo Mabel con una voz tan segura y seria que hasta me dio escalofríos. Como se nota que ha crecido. Pensar que hace 13 años aun nos divertíamos haciéndonos bromas y riéndonos juntos. Aunque claro, las circunstancias han cambiado mucho desde ese tiempo. -Escúchame bien Dipper. Necesitas ayuda, no puedes irte así como así con una herida que casi te mata  y que para colmo es muy reciente al parecer.

-No necesito tu ayuda ni la de nadie. Soy un demonio Mabel me recuperare rápido de esta.

-¿Y entonces porque gritas de dolor?

-Eso no te incumbe.

-Dipper no te hagas el; "no necesito ayuda" porque de ser así ya te hubieras ido. ¡Así que acepta mi ayuda de una vez!

-¡No puedo tengo que irme!

-¡Dime porque carajos la prisa por irte y abandonar otra vez a tu familia!

-¡Mabel no es eso, es- En aquel momento pase a mirarla directo a los ojos.

-¡¿Es que?! ¡¿Es que acaso te damos asco?! ¡¿Es que somos inferiores a ti porque no somos demonios?! ¡¿ES QUE DIPPER?! ¡¿QUE?! 

-¡ES QUE MIS HIJOS PODRÍAN ESTAR EN PELIGRO!

Ahí se detuvo la pelea y Mabel no supo que contestar. Quedo en shock, bueno no solo ella. Ford y Stan quienes estaban escuchando y observando todo atentamente también. Incluso Pacifica que no se que hace aquí.

-Mierda... -Digo en un susurro. -Ustedes no debían enterarse de eso, perdón.

-¿Que...? ¿Estas hablando en serio Dipper? ¿Tu...?

-Si ¿Okey? Soy padre, ¿Contenta?