Mi familia no tan perfecta

Capítulo 35

Toda la mañana me la pase arreglando mis cosas, como ya me había llevado algo de ropa al departamento y algunas cosas de higiene personal tenía que comprar algunas cosas para estar en la casa un tiempo o hasta saber que iba a pasar con mi matrimonio y con el padre de Justin.
Se me pasó el tiempo demasiado rápido que no me di cuenta en que momento llegó Justin de la oficina con Mia del colegio.

-Hola.
-¡Me asustaste!
-Perdón, estabas muy concentrada ¿Qué haces?
-Arreglo un poco el armario de Charlie, el clima está empezando a cambiar y pronto va a necesitar ropa para invierno.
-¿Eso quiere decir que...?
-Me quedó, siempre y cuando no tengas inconveniente con eso.
-¡Por supuesto que no, Hanna este es nuestro hogar!
-¿Dijiste hogar?
-Sí.
-Es la primera vez que dices "Es nuestro hogar" y no "Es nuestra casa".
-Ya entendí que el hogar es donde te siente bien, seguro y amado, casas hay muchas.
-Justin tomé una decisión importante para mí.
-¿Cuál?
-Iré a terapia, necesito ayuda y es bueno que vaya con un profesional.
-Entonces iremos, tomemos terapia juntos... Hanna cuando nos casamos dijimos que estaríamos en las buenas y en las malas. Eso haremos.
-¡Gracias Justin, por nunca dejarme!

-¿¡No se van a divorciar!?
-Mi amor ¿Qué haces ahí?
-Perdón papá, pero no quería escuchar que se van a divorciar.
-Ven aquí.

Justin subió a Mia a la tarja de manos del baño de la habitación de Charlie para que quedara a nuestra altura.

-¿Por qué tú crees que mamá y yo nos íbamos a divorciar?
-¡Los escuché cuando mamá llegó de su viaje, ademas tu llegaste antes y nunca se separan y no quiero que se divorcien porque si se separan mamá se va a ir y va a dejar de quererme porque no soy su hija y solo va a querer a Charlie porque él sí es su hijo, yo quiero mucho a mi hermanito y no quiero que nos separen!

-¡Mi amor eso no va a pasar, tú eres mi hija y siempre te voy a querer igual que Charlie, estemos o no juntos tu papá y yo, para nosotros siempre van a ser lo más importante tu hermanito y tú!
-¿Entonces se van a divorciar o no?
-... No mi amor, tu papá y yo no nos vamos a divorciar.

Que difícil era tomar una decisión tan importante con los niños de por medio, sabía que para Charlie sería más fácil crecer con sus padres separados porque se acostumbraría a eso pero, para Mia era algo muy difícil porque había pasado por tantas cosas siendo tan chiquita. No podía dejarla y tampoco podía abandonar todo lo que habíamos construido juntos por mis inseguridades, iba a trabajar en eso aunque sabía que no sería fácil.

-¿Es verdad papi?
-Es verdad mi amor ¿Cuando te ha mentido mamá?
-Nunca.
-Entonces debes creerle.

-¡Te amo mamá!
-Yo también te amo mi niña.

-Te amo papá.
-Te amo mi princesa.
-¿Puedes decirle eso a mami?

-Te amo como no tienes idea.
-Te amo con la vida Justin.

-Voy a ver a mi hermanito, lo extrañé mucho.
-Está bien mi amor y te cambias porque saldremos a almorzar.
-¡Okay!

[...]

-Sin palabras.
-No imagine que Mia supiera todo.
-Tampoco yo.
-¡Me siento mal, no quería hacer sentir así a nuestra hija!
-Tranquila amor, las cosas se irán mejorando con el tiempo, estoy seguro de eso.
-¡Eso espero Justin!
-Ya no llores amor... Hanna ya que estamos en esto de arreglar las cosas hay algo que quiero mostrarte.
-¿Qué cosa?
-... Esto.
-¿Qué es?
-Ábrelo.

-¿Una invitación?
-Es de Rebeca, cuando estuve en Washington y me pidió que nos viéramos fue para darme esto... Se va a casar y nos invitó.
-¿Se va a casar?
-Sí, Hanna cuando te dije que no había pasado nada entre Rebeca y yo fue porque en serio no pasó nada; nos vimos y cenamos juntos pero Rebeca fue con Marcos, su prometido. Me dijo que le hubiera gustado cenar los cuatro juntos, Rebeca quería dejar las cosas bien conmigo ya que su futuro esposo quiere hacer negocios con nosotros.

Justin
Hanna empezó a llorar y podía entender porque estaba así pero hasta cierto punto también era culpa mía.

-¡Mi amor no!
-¡No te creo cuando dijiste que no pasó nada!
-Amor no te estoy reprochando nada, si te digo esto es porque quiero que sepas absolutamente todo lo qué pasó.
-¡Perdóname por favor Justin, por desconfiar de ti, te juro que no volverá a pasar!