De nueva aquí

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Desesperada intento buscar un taxi o algún bus que fuese a la dirección del hospital pero fue imposible.

Ya que estaba en una sona no muy poblada y los taxis rara vez pasan por estos lugares.

Ya no sabía que hacer intentaba prender su teléfono pero no funcionaba, asta que escucho un voz familiar, llamándola.

[Señorita Nino la llevo a su destino]

Al ver de dónde provenía la voz vio al mismo joven del callejón, pero esta vez llevaba un transporte de dos ruedas llamada bicicleta, uns bicicleta negra con llamas azules.

Nino casi se ríe de las ocurrencias de Arthur pero este no era el momento.

[No gracias]

Dijo contundente.

[Vamos que podría perder si no lo intenta, aparte no veo ningún taxi o bus cerca, que la pueda llevar a su destino]

Lo pensó y Arthur tenía razón, no tenía nada que perder si lo intentaba aparte en el camino podría encontrar un taxi.

[Esta bien]

Con eso ella se acerco y se sentó en la parte de atrás de la bicicleta.

[Por favor sostenerse bien que este va a ser un viaje muy movido]

Sin tomarle importancia solo agarro la camisa de Arthur con una mano.

En un via transcurrido estaba un hijo de una famia prestigiosa jugando con su regalo de cumpleaños, la cual era una moto Ducati Panigale V4 rojo.

Probaba las velocidad que podría alcanzar el motor, de 0 a 200 en uno minutos, contento con su regalo presumía a los carros lentos que sobre pasaba sin dificultades.

Al darse cuenta que ninguno de los carros o motos de esta vía eran competencia para el, perdió el interés y se concentro en miras adelante con la intención de ver la máxima velocidad de su motocicleta.

Pero algo lo dejo sin palabras, por el rabillo del ojo vio a dos jóvenes en una bicicleta igualar su velocidad, con una sonrisa en la boca del joven peli negro mientras la chica peli rosa abrazaba con fuerza la cintura del joven.

Arthur al sentirse observado regreso la cabeza y vio al joven hijo de la familia rica, al cruzar miradas sonrió más y aumento la velocidad perdiéndose en la distancia.

El hijo rico tubo que parar su moto y procesa lo que había pasado, [creo que por este día e jugado mucho] dijo para poner rumba a su casa.

Al principio Nino no tomo importancia a la advertencia de Arthur pero al sentir la velocidad, tubo que tomar enserio su comentario.

[Llegamos]

Al escuchar las palabras de Arthur abrió sus ojos incrédula al ver el hospital en frente de ella.

(Se me hace conocido este hospital)

Pensó Arthur mientras veía la entrada del hospital.

Nino se sonrojo al ver cómo estaba tan cerca de Artur, salto de la bicicleta y acomodo su ropa desordenada por el viaje.

[Gracias Arturo]

Dijo para luego salir corriendo hacia el hospital sin regresar a ver.

[No te preocupes]

Susurró, sonreía solo al ver cómo se alegaba y el peso en su corazón se había aligerado.

[Ah mira que casualidad, es el hospital de la señorita J, mmmm ya se aprovechemos el tiempo y dejemos descansar a mi mounstro]

La bicicleta era algo muy valioso para Arthur ya que fue el último regalo de su abuela.

Por eso lo trago a Japón, pero al paso del tiempo la bicicleta se hacía cada vez más frágil o ¿el se hacía más fuerte?

Al preguntarle a sus maestros que podría hacer le dieron la idea de modificar su bici, cambiar la llantas, modificar los pedales, reforzar los frenos era una de las pocas ideas que tenía.

Encontró una mecánica que escucho todas sus ideas y no se rieron de el, como las otras, hoy era el primer día que le entregaron la bici y no estubo nada decepcionado.

Decidió estacionar su bicicleta y entrar al hospital, ya que estaba aquí podría encontrar a su próximo objetivo.

[Hola señora J]

Con alegría saludo a la recepcionista la cual estaba ocupada revisando algunos papeles.

[Que tal Arthur, ¿Para que se debe tu visita?]

[Bueno le quería pedir ayuda como siempre para buscar a mi nuevo objetivo]

[Pero no quieres descansar un poco, solo en la mañana ya provocaste un caos tremendo por la recuperación milagrosa de la señora Nakano]

[Si pero ahora tengo algo de tiempo libre y prefiero aprovechar antes de olvidarme como llegar a este lugar]

Unas líneas negro cubrió la cabeza de la recepcionista al recordar cómo muchas veces tubo que buscar a Arthur en los pasillos del hospital, por qué se había perdido.

Abrió un cajón de su escritorio con muchos papeles de casos de pacientes con enfermedades terminales o que no tienen cura.

Cada caso estaba archivado desde el más grave asta el menor, de ella saco cinco casos y los puso al frente de Arthur.

[Caso 1, una chica con un cuerpo débil y una enfermedad desconocido con un talento nato en la música.]

Con cuidado puso a un lado la hoja y siguió leyendo.

[Caso 2, una joven estudiante con un gran problema en el funcionamiento de sus páncreas, mmm una extraña manía de buscar alimentos exóticos]

Dejo la hoja

[Caso 3, una chica de las fuerzas especiales japonesas Anti terrorismo con un corazón robótico que lentamente esta dejando de funcionar, ¿Eh? Fuerzas especiales japonesas, señora J segura que estoy autorizado a leer este documento]

La recepcionista movió la mano de un lado al otro quitando importancia a la pregunta de Arthur.

[Bueno, Caso 4: un joven que a estado en coma desde niño, el único testigo de un asesino en serie de niños.]

Dejo el papel y tomo el último.

[Caso 5: una chica con problemas de oído desde niña.]

Valorando los pros y contras tomo el caso 1 y 3, el primero por la gravedad del asunto y el tercero por mera curiosidad.

Se despidió de la recepcionista y tomo rumbo para visitar sus nuevas pacientes.

[Shadow por favor]

De la sombra una figura con cuernos pequeño salió y tomo los papeles.

Sin decir nada se sentó en la cabeza de Arthur y con una materialización de sombra formo una mano apuntando en una dirección en específico.

Arthur se centro en leer los papeles sin prestarle atención a sus alrededores, ya que leer sobre una organización secreta lo tenia muy intrigado.

Tan metido estaba en los papeles que no escucho el sonido de pasos corriendo.

Justo cuendo cruzaba la intersección, de una esquina salió una figura femenina y choco con el pecho de Arthur.

Arthur al sentir el impacto dejo de leer los papeles levantando su cabeza.

En el preciso momento para que sus ojos choquen con unos hijos azules oscuros.

Casi al instante una corriente electrica recorrió todo su cuerpo provocando el latir frenético de su corazon.

Sus pupilas se agrandaron y una luz rosada rojiza los cubrirá.

En los ojos de la chica la misma luz intensa se pudo ver mientras sus mejillas empezaban a sonrojarse por el sentimiento nunca antes experimentados que surgía de su corazón.

Las manos que sostenían los papeles temblaron haciendo que los documentos se tienen en el piso.

Tengo Que Salvar Este Mundo (Kenichi, Komi-san, My Dress-up Darling, Etc)Where stories live. Discover now