Tengo Que Salvar Este Mundo (Kenichi, Komi-san, My Dress-up Darling, Etc)

Un dia mas, un dolar mas ganado

[arthur, arthur, despierta ya es hora de ir a la escuela]

[no mamá, cinco minutitos más, por favor]

arthur medio dormido dijo a la persona que la intentaba despertar.

[jejeje, arthur no soy tu madre]

al escuchar su respuesta, entre abrió sus ojos, para ver quien era.

[oh, si no es la hermosa miu] dijo mientras cerraba de nuevo sus ojos.

[arth..ur no dig..as e..so] dijo con un sonrojo notable en su cara.

[mejor levante]

miu empezó a moverse el cuerpo aún adormilado de arthur.

[no miu, yo peligroso]

[jejej no creo que seas peligroso]

[ah no?]

la risita de miu paro, al sentir como arthur sacaba su mano de su cama y tomaba la mano de ella.

para luego a una velocidad impresionante arrastrar el cuerpo sorprendió de miu debajo de las cobijas.

[5 minutitos más, por favor] menciono arthur mientras abrazaba a una miu muy sonrojada, la cual estaba encima del pecho de arthur.

[pero, los maestros] intento decir mientras se intentaba levantar.

[por favor, mi hermosa dama] suplico arthur con los ojos cerrados.

[e..s..ta bien, pero solo cinco minutos] resignado dejo de lucha, al darse cuenta que no se podía mover.

[gracis.zzz]

no pudo terminar de decir arthur, ya que se había quedado dormido.

pero la que no podía hacer lo mismo era miu, ya que muy tarde se dio cuenta que arthur dormía sin camiseta.

sentir el calor y el aroma de arthur más escuchar sus latidos y respiración suave, se le hizo de sierta forma un poco adictivo a la oji azul.

no sabia el por qué, pero sus manos empezaron a tocar el pecho firme de arthur, y un poco de su abdomen.

los músculo de arthur no eran tan grandes, como los de sus maestros, pero lo que sí tenia era un poder vestíal cerrado en cada uno de ellos, y miu con el simple tacto lo pudo sentir.

sin poder hacer nada más, acostó su cabeza en el pecho desnudo de arthur para empezar a escuchar los latidos de su corazón, los cuales le traían una calma sin igual.

los minutos pasaron y sin que los dos se diesen cuenta, media hora ya había pasado.

pero toda esa calma fue rota al escuchar, el sonido de un celular.

(ya es hora de despertar) pensó arthur al recordar que había puesto una alarma en su celular.

al intentar moverse sintió un peso extra en su pecho, recordó lo que su yo adormilado hizo y con una sonrisa en los labios regreso la mirada al bulto en sus sábanas.

levantó las sábanas, para ver a una de las chicas más hermosa que el en su vida había tenido la esperanza de poder ver.

con cuidado la dejo en su cama, ya que con el sonido del corazón de arthur se había quedado dormida.

se levantó, apago la alarma y con energía bajo a la cocina para empezar a cocinar del desayuno.

el realmente no era un experto cocinando, pero de alguna manera se podía defender y más gracias a los consejos de un padre y su hijo pelirroja.

(ya mismo bajan) pensó al ver la hora en un pequeño reloj pegado a la pared.

toda la mesa estaba llena de platos con siferentes porciones de comida, en algún momento arthur se preguntó como se acostumbro a servirles a los monstruos que el llamaba maestros.