Mi Salvación... | Fanfic (YIZHAN)

Capítulo 32

HaiKuan estaba realmente sorprendido, era una gran coincidencia que justamente ambos consejeros imperiales de países vecinos se hayan encontrado solos - ¡Oh! ahora entiendo porqué quería hablar directamente con su majestad - se levanto y revendió - discúlpeme por tratar así a un invitado tan importante  - 

- No se preocupe, comprendo su actuar - respondió Zhuo Cheng.

Al levantarse de la reverencia, HaiKuan miro más serio - Sin embargo, lamento notificarle que el emperador no puede recibirlo, tendrá que conformarse conmigo únicamente -

Cheng frunció el ceño, mostrando su molestia - Disculpe, pero necesito hablar directamente con él, o más bien entregarle esta carta - mostro la hoja - solo él puede darme una respuesta, nadie puede leerlo más que su majestad, ni si quiera yo no tengo permitido hacerlo -

- Entonces debe ser extremadamente importante, pero no me malinterprete - aligero su voz - su majestad no puede recibirlo no porque así no lo quiera, si no más bien porque minutos antes de que usted llegará, su majestad salió con su hijo, a lo que no se cuando regresará, yo he quedado a cargo por el momento, y usted ha de comprender, porque hasta que yo tengo conocimiento ha pasado por una situación similar, nada comparado, pero comprensible -

El menor no pudo decir nada más acerca del tema, pues era cierto, nada comparado, pero lo comprendía - disculpe mi reacción, pero ver la angustia de mi emperador, me hizo entender que esto es más que importante, así que... - un poco dudoso, camino hacia al mayor, ligeramente extendió la carta -  realmente necesito una respuesta, lo poco que se es demasiado delicado, que no se si usted solo pueda darme alguna respuesta, sin el consentimiento de su mayor - dijo.

HaiKuan al escuchar esto supo que era mucho más de lo que se esperaba, deducía ahora que podría ser, analizando la situación de dicho país y la rapidez en lo que se manejaba, solo coincidía en algo y que todos esperaban, una nueva batalla, no había más opciones.

Tomo la carta, pero se sintió ajeno a hacerlo, aunque el papel era sencillo en estas condiciones pasar desapercibido era lo correcto, no vio problema, lentamente abrió la carta, la primera impresión es una letra legible y limpia, pero con trazos chuecos, dando entender el nerviosismo del momento, en la parte inferior derecho un gran sello que contenía el nombre del país "Liang" a lo que no era mentira lo dicho por el menor.

Ya seguro comenzó a leerlo.

"Emperador de Wei, mi más cordiales saludos a su majestad.

El emperador de Liang ha mandado a un servidor más cercano a mi nombre, pues ha de estar enterado de la situación que ha pasado mi país últimamente, y hace poco regrese, por lo cual por el momento no puedo dejarlo.

Realmente, la razón de mi carta es pedir su ayuda. Una gran guerra se aproxima, no le pido que mandes soldados y luche a nuestro lado sin conocernos, ni tener una lianza, pero si le pido que por lo menos a mi familia la salve, o más bien los reciba, mi consejero esta al tanto, solo de una cosa no, es que el también es mi familia y eso lo incluye, mi consejero suele ser muy terco, a lo que deduzco que el decirle que se quede será imposible, pero si usted lo puede retener cuando lo mande con mi familia sería mejor.

El más que nadie conoce más de política y tiene una gran capacitación de batalla, además de ser leal totalmente, no lo desamparé.

Tengo un hijo pequeño que se que no le causará problemas, y una prima que sabrá cuidarlo.

Solo deles techo y alojamiento en lo que termina esta guerra, sea quien sea el ganador.

Si yo pierdo, ellos tienen un lugar en donde irse sin problema, lejos, ellos sabrán recompensarlo, por algo el país es muy codiciado en secreto por Ruo Ran.