¿Se agranda la familia?

Extra: Harry y Louis

Su lobo rugió con fuerza dentro de su pecho cuando divisó su esbelto caminar. Era tan bonito, lucía suave y relajado y definitivamente el alfa de Harry enloquecía cuando lo observaba deambular a través de los pasillos.

—Ya deja de hacer eso... pareces acosador —Steven golpeó su hombro, sacándolo así de su ensoñación.

—Es que es tan lindo... —Harry suspiró— solo míralo como sonríe y esconde sus manitos bajo el suéter.

Steven rio levemente, a sabiendas de que cuando su amigo se enamoraba ya podían darlo por hombre muerto.

Harry había tenido pocas relaciones a lo largo de su vida, algunas exitosas y otras no tanto, pero ahora que estaba en su tercer año en la universidad de medicina había caído flechado por un bonito omega de ojos celestes. Según tenía entendido el chico se llamaba Louis y estudiaba derecho.

Desde le momento uno no pudo sacarlo de su cabeza, incluso su lobo gruñía cada vez que percibía el suave aroma de la lavanda cerca y es que la esencia del chico era la más deliciosa que alguna vez había tenido la dicha de oler, inclusive parecía alzarse por sobre los pertenecientes a los demás estudiantes.

Sin embargo, nunca le había hablado. Harry no era de los típicos universitarios "populares" que integraban las casas de fraternidad, simplemente había encontrado un pequeño departamento cerca de la institución y todos los días iba y venía. Aunque tenía la ventaja de que vivía solamente con Steven.

Notó como el pequeño omega le dirigía una sonrisita apenada desde la otra punta del pasillo y como recibía un golpecito por un rubio de al lado. Ambos rieron y pronto los vio acercarse.

Harry entró en pánico. El bonito omega que se había pasado observando durante varios meses ahora se estaba acercando a paso tranquilo hasta ellos.

Steven se rió de su reacción y con un toque en el hombro se despidió de su amigo. Definitivamente Harry se las haría pagar por haberlo abandonado en una situación así.

—Hola —Harry tuvo que contener un gemido que quiso escapar de entre sus labios cuando la armoniosa voz del omega llegó a sus oídos.

—Hola...

—Eres Harry, ¿no? el ayudante de laboratorio.

—Así es.

El alfa sentía que en cualquier momento caería desmayado por el atrayente aroma del omega. Incluso llevo dos dedos disimuladamente a la comisura de sus labios para verificar que no estuviera salivando de más.

—Verás... estudio derecho, estoy en mi primer año, y tenemos que hacer una clase de proyecto sobre los estudiantes que trabajan dentro de la institución, ya sabes... sus beneficios, las leyes que los rigen y todo eso. ¿Estarías dispuesto a ayudarme?

Estaría dispuesto a ayudarte en mucho más que solamente tu proyecto, pensó Harry. Carraspeó para salir de su ensoñación y observó al omega de mejillas sonrojadas.

—Claro, ¿qué tengo que hacer?

Una sonrisita de labios cerrados se hizo presente en las finas facciones del omega. Era hermoso, no cabía duda.

El alfa interior de Harry aullaba y clamaba por un poco más de cercanía. 

Terminaron arreglando encontrarse luego de clases, cuando el horario de Harry en el laboratorio comenzara. Normalmente no se aceptaba gente externa, es decir que no fueran estudiantes o profesores, pero Harry intentaría que hagan un excepción con Louis.

Estuvo lo que restaba del día pensando en Louis. En su forma de hablar, sus manos tímidas y ojos celestes atrayentes. Su lobo estaba extasiado, tendría más tiempo al lado del bonito omega.