Cartas a mi crush • Kevin Álvarez

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Explicaciones, permisos y sinceridad.

Kevin :

Habían pasado un par de días, Alexia se encontraba en casa de Maya. La entendía, hasta yo sentía pena de que nos hayan encontrado en tan comprometedora situación y lamentablemente, no podíamos negar que estaba pasando lo que seguramente imaginaron.

En este momento estaba yendo a verla, no había querido irse a casa y seguramente sus padres estaban extrañados. Fernando ya había venido ayer aquí buscándola, no me creyó cuando le dije que no estaba hasta que entró y se convenció de que efectivamente no estaba quedándose aquí.

La llamé y le hice llamar a sus padres para que les dijera donde estaban, finalmente lo supieron y se quedaron más tranquilos. Claro que el que tu hija no llegue a casa siendo que siempre avisa preocupa, pero ahora que saben donde está complica todo.

¿ Como va a decirles que es por pena?, es una tontería y a la vez no, simplemente es complicado y ya.

Subí las escaleras hasta el piso de Maya, era una suerte tener buena condición o estaría muerto de subir cinco pisos seguidos. ¿ por que siquiera maya había elegido un edificio sin ascensor?, no lo sabía y ni siquiera quería buscar una explicación.

Llegué a su pasillo y toque el timbre, unos segundos más tarde fue Alexia quien abrió la puerta. Vestía un short jean, una playera enorme y su cabello estaba amarrado en un chongo descompuesto.

— ¡ hola amor! — exclamó feliz.

— Hola bonita — le doy una sonrisa justo cuando se acerca a besar mis labios.

Ambos nos adentramos al lugar, Maya estaba en la cocina preparando algo que olía delicioso.

— Hola May — la saludo en voz alta ya que tienen música en un volumen alto.

— Hola Kev, que bueno que llegas, la comida está por salir.

—¿ Si vas a quedarte? — me pregunta Alexia.

— Si, obvio.

Ella sonríe.

— Hoy en la tarde vuelvo a casa — me hace saber cuando nos sentamos en el sofá.

— Que buena noticia, tu hermano casi me mata pensando que estabas en mi casa – ríe.

— Eres un exagerado, Fernando ya me dijo que solo fue a buscarme.

— ¿ Y si te dijo que entró y buscó hasta debajo del sofá?

— No hacia falta, yo se que fue así.

Niego divertido.

— Hay algo que quería contarte.

— ¿ Que es? — me mira atenta.

— Bueno, en el club están buscando a alguien que se haga cargo de las redes sociales. Como dijiste que ibas a buscar algo, creí que sería buena idea que tomaras ese trabajo.

Alexia me mira con asombro, uno junto a una sonrisa.

— Esa es una buena idea, solo tendría que ir a ver si me aceptan con medio tiempo por que tampoco puedo descuidar mis estudios.

— Ni que lo digas, pero dejame a mi hablar con ellos para que te quedes con el puesto. — Niega.

— No. No quiero que digan que solo por ti estoy ahí, no quiero ser alguién influyente amor.

— Amor no..

— Kev, por favor. — suspiro.

— Está bien, no voy a influir en la decisión de si te dan o no el trabajo.