-Lo siento, quería ver como reaccionabas y lo logré.

-Te odio.- bromeé.

-Oye, eso no, yo quiero ir bien.

-No te creas, no te odio, al contrario yo te...- a ver, espérense tantito ¿estoy por decirle que lo quiero? ¿Qué diablos me sucede?

-¿Sí...?- está esperando que le diga, yo... joder, no sirvo para esto.

-Te quiero- digo al fin después de tanto drama que hago. Él parece sorprendido, lo sabía, la cagué.

-Y yo te quiero a ti chula- sonríe mostrándome su perfecta hilera de dientes blancos como la nieve, es hermoso.

¡¿LO ESCUCHÉ BIEN?!

Alguien está yendo en serio.

-Por cierto, no se te ha corrido nada de tu maquillaje por si eso dudabas. Te ves bonita.- añade y no evito sonrojarme.

-Gracias José- sonrío.

-Eres adorable- me dice como cumplido- y más cuando te sonrojas o sonríes.

-¿Por qué eres así conmigo? Tan tú, tan lindo...- muerdo mi labio inferior:

-Me interesas, alejandra.- susurra en mi oído como respuesta, este tipo me pone los pelos de gallina.

-No lo hagas y menos cuando yo me he comportado como una estúpida.- pido.

-Ese es el problema...

-¿Qué cosa?- le miro desconcertada.

-Que cuando eres así conmigo, más ganas de decirte cosas bonitas me dan.

¿Responder o huir? La verdad no sé qué hacer, jamás me había sucedido algo así y ahora que sucede actúo como una verdadera tarada o sólo pienso en esquivarlo.

Pero cuando no, lo necesito.

-¿Qué me hiciste?- parpadeé varias veces, estaba estupefacta.

-¿Qué me hiciste tú a mí?- cuestiona de la misma manera y me toma de la cintura.

-Tengo miedo- me sinceré y vaya que era cierto, hace dos años no vuelvo a sentirme querida o que no vuelvo a querer y el pensar que con este chico pueda suceder algo, me aterra-... mucho miedo...

-Déjame entrar a tu vida- escupe y me suelta. Creo que no le quedó claro que acepté- por favor- suplica.

-Y a mí déjame entrar en la tuya- digo yo.

Su aliento huele tanto a alcohol y tiene un aroma a perfume tan delicioso, le miro fijamente, sus bellos ojos brillan tan chispeantes, tan bonitos. Esto parece un sueño tan irreal...

-Sabes muy bien que accedo a dejarte entrar a mi vida, alejandra.- acaricia mi mejilla.

-Wey, Sandy hará un after en su departamento, vamos- le habla una varonil voz detrás suyo, un chico de cabellera larga algo peinada, castaña y barba del mismo tono, vestía de una camisa de la banda de José, pantalones de mezclilla y unos zapatos. Era guapo- sabes que yo no acepto rechazos.- añade.

-Puta madre Juxi- dice a regañadientes, ah ya veo, así se llama el chico, qué raro- ¿por qué llegas en momentos infraganti?

-Lo siento, ahora vámonos. Por cierto, hola- se dirige a mí amablemente, saludándome con un beso en la mejilla.

-Ho-Hola- balbuceo.

-Disculpa pero éste gigante y yo debemos irnos, adiós.

-Descuida, yo, yo iré con mi amiga, diviértanse.

-Ven con nosotros- propone José.

-No, no y no- lo rechazo inmediatamente- no quiero dar molestias.

-Para nada, anda, acepta.

-No José, no quiero.

-No la obligues cabrón, si no quiere no.

-De acuerdo- hace una mueca- nos vemos... pronto.

-Lo siento, diviértanse. Adiós.- finalizo, apresuro el paso antes de que pueda decirme algo más.

Sé que si estuvieran en mi lugar, aceptarían. Porque "nunca se pierde la oportunidad".

Pero simplemente no puedo, no quiero sentirme fuera del lugar, no quiero ser un bicho raro entre gente que no conozco, mejor me reservo; ya habrá otros días en que únicamente seamos él y yo, es todo.

Seguramente se sintió mal por haberlo rechazado, se porta tan bien y yo ¿qué hago? ¡Así es! ¡La cago y lo mando por un tubo! ¿Qué mierda me sucede?

De: Ale.
Para: José.
Asunto: Discúlpame.
No quise ser o sonar tan dura ante tu propuesta, sólo... sólo que no quería ir porque ¿qué tal si no iba a ser aceptada ahí?
Perdóname, prometo que si se da en otra ocasión, esta vez aceptaré.

De: José.
Para: Ale.
Asunto: Disculpa aceptada.
Te entiendo en eso chula, descuida, será después.
¿Y si vamos al cine mañana? ¿Qué dices?

De: Ale.
Para: José.
Asunto: Gracias.
Sí, me parece bien. ¿A qué hora?

De: José.
Para: Ale.
Asunto: A las ocho.
Y de ahí te llevo a conocer el DF cuando la noche nos visita.
Buenas noches, te... te quiero:)

Esto es mucho para mí, necesito aire.

No tengo tanto de conocerle y ya me está alocando las emociones. Dios mío.

The Reason.Where stories live. Discover now