Capítulo Veinte. "La batalla se acerca."

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Heinrey estaba observando el retrato más reciente que le habían hecho, hace aproximadamente ocho meses.

Era la misma persona, pero había diferencias del Heinrey del retrato y él. En especial su mirada, él poseía una mirada tierna, pero ahora su mirada era vacía y neutra.

- Su majestad. - Dijo uno de los sirvientes.
- ¿Pasa algo?

El sirviente bajó su mirada, pese a que Heinrey empezaba a tener ataques de ira espontáneos y alucinaciones tenían que tener demasiado cuidado al hablar con él. No debía cometer errores y hacerlo enfurecer.

- Y-Yo Y-Yo... - Comenzó a tartamudear por los nervios.
- ¿Tú?  - Preguntó sarcásticamente

Apretó los puños y se armó de valor.

- V-Vine a decirle que la persona que citó ya llegó, s-su majestad. Lo está esperando en la sala de té.
- Gracias, puedes retirarte.

El sirviente asintió y salió rápidamente de ahí aterrado.

Heinrey se dirigió a la sala de té, en donde encontraría a un hombre de edad avanzada de cabello y barba canosos y de ojos rojos.

Él se sentó a su lado.

- ¿Y bien? ¿Qué tan cierta es la existencia del gran mago?
- ¿Él gran mago? Sí, existe. Pero no debería preocuparse por el gran mago, de él es de quién menos debería tener cuidado.
- ¿De qué habla?
- Hay alguien, alguien más fuerte que el gran mago. Me temo que su fuerza sea igual que la tuya, o peor. Que sea más poderoso.
- ¿De quién se trata? - Preguntó. - ¿Del Emperador? - Se burló.
- No, pero sí de alguien cercano a él.
- ¿Ah sí? ¿Quién es esa persona?
- Tendrá que descubrirlo por su propia cuenta.

El anciano sonrió, sacó un cuchillo del bolso de su saco y se lo clavó a sí mismo en el pecho, justo en el corazón.

Heinrey se acercó al hombre.

- ¡Qué ridículo! ¿Prefieres suicidarte, el lugar de ayudar a tu mejor aprendiz? - Le dió una bofetada, el anciano escupió sangre en el pecho de Heinrey manchando su camiseta. - Ew... - Dijo completamente asqueado.

Heinrey se quitó la camisa y salió de la habitación, dejando el cadáver en aquel sofá.

**
Navier estaba caminando al lado de Koshar.

- Las cosas no van nada bien, ¿verdad?
- Eres muy susceptible, me sorprende ver qué de das cuenta de los sentimientos por más discretos que sean. Y sí, acertaste. La señorita Rollers está aterrada, al parecer su majestad continuará la guerra sin ella.
- ¿No se supone que ella era quién iba a acabar con el Rey Heinrey?
- Creo que logró engañarnos a todos, su poder es increíble. Pero no es ni una cuarta parte del poder del Rey.
- Su majestad tomó esta guerra como algo personal, probablemente vamos a perder la guerra. Todo hubiera sido más fácil si él hubiera ofrecido una tregua.
- Sí, todos se han percatado de eso. En especial tú. - Se detuvo. - No sé que hubiera pasado si tú te hubieras casado con él. Habrías destruido nuestro lugar de orígen con tus propias manos.
- Lo sé. Yo no sabía nada acerca de los planes de Heinrey, no sabes cuánto me arrepiento de haber tenido una amistad con él. Y haberlo tomado como candidato para que se casara conmigo.
- No me agrada tu esposo, pero por primera vez en tanto tiempo estoy de acuerdo con él. No era para menos, Heinrey estuvo robando el maná del imperio por varios años planeando hacer una rebelión y así conquistarlo, no solo te traicionó a tí. Si no, a el imperio por completo. Debo admitir que sabía guardar las apariencias, parecía ser una buena persona.
- También pensaba lo mismo... Pero las personas cambian.

Navier se detuvo, estaba a punto de caerse pero gracias a los reflejos de Koshar, éste la sostuvo antes de que cayera al piso.

- ¿Te encuentras bien? ¿Quieres que mande a traer al médico real?
- N-No, estoy bien. Es sólo que con lo de la guerra próxima me he sentido muy estresada. - Se enderezó.
- Debes tranquilizarte, su majestad tiene todo calculado.
- Lo sé, también estoy al tanto. Es sólo que tengo un mal presentimiento.
- Deben ser los nervios.

Era la primera vez en todo el tiempo que tenían de vida en el que ser invertían los papeles, ahora quién estaba preocupada era Navier y quién mantenía la cordura era Koshar.

- Ganaremos esta guerra, Navier. Todo está a nuestro favor. Tranquilízate.
- Sí... Tienes razón, debo tranquilizarme. Últimamente mi salúd ha ido de mal en peor, las preocupaciones sólo harán que no pueda mejorar.































𝙋𝙧𝙤𝙭𝙞𝙢𝙖𝙢𝙚𝙣𝙩𝙚 𝙨𝙚𝙧𝙖́ 𝙥𝙪𝙗𝙡𝙞𝙘𝙖𝙙𝙖 𝙡𝙖 𝙨𝙚𝙜𝙪𝙣𝙙𝙖 𝙩𝙚𝙢𝙥𝙤𝙧𝙖𝙙𝙖 𝙙𝙚 "Una Última Oportunidad."































Fanfic creado por @compulsive lover.





























꧁★𝒫ℴ𝓇 𝓈𝓊 𝒶𝓅ℴ𝓎ℴ 𝓎 𝒶𝓉ℯ𝓃𝒸𝒾ℴ́𝓃, 𝒢𝓇𝒶𝒸𝒾𝒶𝓈.★ ꧂

Una Última Oportunidad... (Sovieshu X Navier)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora