Con su aliento endulzado

9. EN TUS MANOS

El hombre que estaba frente a ella le recordaba terriblemente a un mar en calma, olas suaves y vientos suaves, como si la salpicadura del agua azul fuera tan tierna y dulce como el beso de una madre.

Estaba pálido, como si el sol abrasador no hubiera adornado su piel desde que nació: ojos tan azules como un zafiro reluciente y labios tan rojos como las rosas que se marchitan en la entrada del Cuartel General. 

Cabello tan azul y tan claro como el cielo que pintaba arriba y aparentemente brillaba bajo el resplandor del sol: se ve terriblemente suave, como si fuera a desmoronarse y deslizarse entre sus dedos con un solo cepillo.

El marine era tan bajo que ni siquiera le llegaba a la barbilla. Se ve tan tímido, como si un solo golpe salvaje del viento pudiera enviarlo al otro lado del mundo. Si T/n fuera a agarrarlo por el brazo y doblarlo, estaba segura de que se rompería como un frágil vidrio. 

"Xeno, ¿supongo?" Ella había preguntado, suave como la brisa que se arrastraba por la ventana abierta. 

Él asintió con la cabeza, el cabello azul bailaba con su propio ritmo vicioso. 

"¿Serás mi aprendiz?" Pregunta aunque sabe cuál será la respuesta, retrasando quizás lo inevitable. 

Él le dio otro asentimiento, un brillo de determinación en sus ojos como si fuera un guerrero a segundos de la guerra. 

Ella no necesitaba un aprendiz, y mucho menos alguien que probablemente pudiera lastimarse con un solo movimiento de una llave quebradiza. Se ve tan suave y gentil que incluso ella tenía miedo de ponerlo a trabajar; no sabía si era por lástima o si era demasiado perezosa para recoger el desastre que seguramente crearía mientras trabajaba con ella. 

Xeno parece un príncipe, uno que nació bajo la suave melodía de un arpa en lugar del choque de espadas y un escudo destrozado: no era el tipo de príncipe que nació con el propósito de gobernar y liderar, era todo lo contrario, él era el que sostendría libros en lugar de una espada de acero, cantaría en lugar de pelear, hablaría en lugar de matar: era el gentil, el de ojos amables y una sonrisa suave que huele a flores y sol en lugar de sangre y inmundicia 

Entonces, ¿cómo diablos se supone que ella lo hará trabajar y hacer mandados cuando parece que estaba destinado a ser alimentado con uvas maduras y acostado sobre sábanas de seda como lo haría un miembro de la realeza? 

Odiaba a Garp por esto. 

"¿Cuantos años tienes?" Preguntó, parece un niño con sus mejillas gordas y su baja estatura. 

Xenon, con movimientos temerarios había sacado un bolígrafo azul y una libreta. 

Ella inclinó la cabeza, ¿qué diablos está haciendo? 

"Te hice una pregunta, no creo que este sea el momento adecuado para-" 

Él le entregó un solo papel, manos pálidas y delicadas temblando, ella podía ver el azul y el verde de sus nervios representados en la palidez de su muñeca mientras agarraba el pergamino con fuerza. 

Ella lo aceptó a regañadientes, sus ojos se encontraron con su azul bebé. 

Se representó un gran ' 19 ' en el papel con el uso de mina de lápiz, la curva en el extremo del 9 se tambaleó ligeramente para darle una imagen elegante y casi bonita. 

Apretó la mandíbula, mirando una vez más al tranquilo, aparentemente adulto, marine que estaba de pie frente a ella. El azul de su cabello balanceándose como la hierba en la colina, los dientes mordiendo la carnosidad de sus labios rojos, nervioso.