♡MARIPOSSA♡

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A los omegas comprados o alquilados estaba mal visto que preguntarán por quién lo hizo, en cierta manera para proteger sus identidades, en caso de que llegará a pasar algo.

Pero Jimin en verdad tenía curiosidad saber quién era y darle las gracias por liberarlo, de que le dieran un hogar a el y su bebé.

—Solo puedo decirte que fue una familia muy prestigiosa, tú serás el regalo de cumpleaños de su hijo mayor Alfa -dijo sería, lo miro de arriba abajo y hizo una mueca-Por eso debemos de cambiarte esos harapos y ponerte como se debe, como un Omega de verdad.

Eso fue un golpe bajo para el omega del castaño.

A Jimin le encantaba su jersey marrón, lo usaba de pijama por que era muy cómodo, además también fue un regalo de su antiguo Alfa y prometió guardarlo, aunque aquella era su única prenda.

Algo apenado asintió.

Debía obedecer o sería peor.

—Llévenlos a ser limpiados y preparados para su entrega-dijo Made mirando a los guardias y estos asintieron.

Separaron a Jimin de su bebé en habitaciones distintas, en una las mujeres betas se encargaban del pequeño y procurando que fuera visto adorable, mientras tanto Jimin era atendido por jóvenes alfas, a pesar de estar castrados no dejaron de mirar de más al omega.

Sintió muchas manos sobre su cuerpo, ayudándolo a lavarse y limpiarse bien el cabello, el agua de la bañera se volvió oscura, hacía tiempo que no se tomaba un baño así de relajante.

Era satisfactorio, a pesar de que los alfas jóvenes pasaron la línea de las zonas privadas y llevaron sus manos de más.

Pero como siempre, Jimin solo podía asentir en silencio.

Una vez seco le hicieron probar muchas variaciones de estilos, intentando encontrar el indicado para su nueva vida, la familia era de mucho dinero y no podía mandarlo con mala imagen.

—Date la vuelta -dijo uno de los alfas serio.

Jimin obedeció y se puso mirando a la pared, dándole la espalda a todos los que había en la sala, estaba desnudo e indefenso, unos brazos rodearon su cintura y terminaron de ponerle su corsé.

Made entró en la habitación junto a otros ayudantes, hizo un gesto con la mano y todos los Alfas se apartaron, dejando ver a Jimin en medio de todo, con su vestimenta ya puesta.

Un vestido blanco sencillo de mangas largas, dejaba a la vista gran parte de sus piernas y casi sin dejar a la imaginación, gracias a un corsé de color perla su pequeña cintura era más marcada y su pelo fue decorado con una flor pequeña.

Sobre sus párpados posaba un hermoso maquillaje de brillos, haciendo más llamativos sus ojos color miel, pero lo que llamaba la atención eran esos labios gorditos, resaltados por un labial rosa.

Made quedo impresionada, era un omega muy hermoso, pero su defecto era que ya había sido usado antes.

—Estás perfecto, ya pueden llevarlo para ser entregado-dijo tirándose a ver a sus ayudantes.

Cuando estuvo a punto de salir de la habitación un hilo de voz llamándola la detuvo, se giró encontrando al pequeño omega más cerca con la mano arriba.