𝓢𝓪𝓭𝓵𝔂 𝓞𝓷𝓮-𝓢𝓱𝓸𝓽𝓼

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Un pequeño llanto se escucho, la niña desperto, un hombre fue a atenderla rapidamente.
Pasos apresurados sonaron, la puerta se abrió, la tomo en brazos con delicadeza, al minimo descuido se rompería.
Su entorno creció, paseaba en un hermoso valle con grandes pastizales y preciosas flores, al igual que sus orbes rojos cual sangre.
Lo conoció a el, le esculpio una sonrisa en su rostro canela, y le subió la sangre a sus mejillas pecosas, se volvieron uno, su piel albina lo enamoro.
Ahora era un hombre, comprometido desde la noche pasada, sus ojos sangre brillaban regozijando de alegría, se habían vuelto parte del otro, la piel de su amado era adornada con una marca de unión, eran uno solo, si el moría, moriria con el.
La nieve despareció, dolia en lo mas profundo de su corazon, cuanto mas tiempo pasaba peor estaba, lo que lo aliviaba es la seguridad de que el seguia vivo.
Su pecho punzó, grito agonizante, levanto la cabeza con los orbes aguados, corrio entre la nieve, lo encontro, callo de rodillas frente a su cuerpo ahora frío, la nieve bañada en un color escarlata, lo tomo entre sus brazos y lo acurruco en sus muslos, sus ojos eran muertos.
El moriría tambien, no se podía hacer nada, el quería eso, no podría sin su nieve, ellos le obligaron, el de verdad no quería, le obligaron a romper la unión, eso le dolio mas que el sufrimiento de estar muriendo por el.
Solo siguió con su vida, en contra de su voluntad, vivía tranquilo, estaba hablando calmadamente, un estruendo sono, corrió, trato de salvarlos, el lugar exploto, nada estaba bien, callo con un sonido sordo a la nieve mientras veía como su hogar se derrumbaba en cenizas, todo se veía borroso y  estaba bañado en sangre, no podía moverse, todos murieron, el tambien.
Volvió a despertar, sabanas blancas lo cubrían, no podía moverse, no recuerda nada, no puede ver nada, solo sabe que sigue respirando, su rostro se humedecía, no sabe por que gotas gruesas caían de sus ojos ahora empañados por la ceguera.
Los doctores lo atendieron, pero le gritanban, el no reaccionaba, no podía hacer nada, simplemente apenas y podía moverse, necesitaba ayuda para todo, sus ojos perdidos eran opacos, muertos como los de él cuando lo vio innerte.
Los recuerdos lo golpearon, entro en pánico, lloraba y gritaba desconsoladamente, estaba inconsiente, no sabía donde estaba, no veía nada, choco contra el suelo, lo sujetaron.
Era anesteciado cada cierto tiempo o corria riesgo de matar a alguien o tener un infarto.
Ellos lo causaron, sabian lo que era, y lo usaron, se alerto de eso, con su poca cordura, se escondió, busco sus pertenencias, solo tomo la ultima cosa que quedo de su nieve, una katana afilada.
Espero y espero.... , no tenia por que controlarse, no podía, cambió a su naturaleza, les corto la cabeza y aplasto sus cráneos.
Sus ojos antes rubí ahora de un azulado claro y opaco, no se podía reflejar la rabia que sentía, se sentia terrible, dolió mucho mas de lo que esperaban.
Gritos se escuchaban, caos en ese manicomio, el solo escuchaba con una expresion calmada, blandio su espada una vez mas, bañada en rojo, acabo con todos, el hospital estaba en ruinas, estaba dispuesto a acabar consigo mismo, diviso un aroma desconocido, se volteo hacia el y callo inconsiente con una ultima lagrima, no podía vivir así, sintio el frío de los escombros antes de cerrar sus ojos.
Estubo suficiente tiempo en ese manicomio, sin poder hacer nada, luego los asesino a todos allí, pero el seguía vivo.

𝕷.𝕭.-