Capítulo 22

1.1K 150 50
                                    

Capítulo 22

Me dolía muchísimo la cabeza

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Me dolía muchísimo la cabeza. Tenía la boca pastosa. No quería levantarme. Me acurruqué aún más en las sábanas, aunque pronto la luz del exterior me hizo abrir los ojos. Maldije por lo bajo al mismo tiempo que los entrecerraba.

¿Qué había pasado anoche? Estaba en mi habitación, así que me había portado bien al menos. Lo último que recuerdo era que Logan me había llevado a casa.

Me lo había pasado genial, de eso sí que me acordaba. Había bailado hasta que me dolieron los pies y había bebido con la intención de olvidarme de todo. Recordé vagamente estar con Logan fuera de la fiesta y de nuestro baile bajo la mirada atenta de los demás.

No sé qué hacía ese chico para que quisiera verlo aunque lo hubiera hecho hacía una hora atrás.

Te gusta. Te gusta mucho.

¿Me gustaba? La última vez que me había enamorado me habían roto el corazón. No quería volver a sufrir nunca más, no quería dejar en manos ajenas los pedacitos de mi ser. Porque realmente lo pasé muy mal. Lloré muchas horas, me encerré en mí misma y me negaba a quedar con mis amigos. Sky consiguió que poco a poco saliera de mi burbuja de dolor y, aun así, me negaba a sentir. No quería que nadie, jamás, me lastimara.

Por eso me asustaban tanto los sentimientos que había empezado a desarrollar por ese chico. Me caía muy bien y me lo había pasado en grande en la fiesta, pero ¿quería algo más? ¿Estaba lista para meterme de nuevo en una relación, para confiar en el otro?

No pude seguir cavilando porque de repente me puse tensa. Y es que había notado una persona no identificada en el extremo opuesto de mi cama.

Me incorporé como un resorte y al ver quién estaba a mi lado, se me encendieron las mejillas. Pero ¿qué había pasado? ¿Qué hacía Logan en mi cama? ¿Tan borracha había estado?

Me vino un flash de la noche anterior: estaba muy pegada a él y mi yo ebrio se le tiró encima con la clara intención de besarlo, pero él me rechazó con una sonrisa nerviosa. También me vi a mí misma sentada a horcajadas sobre él, lamiéndole el cuello.

Joder, qué puta vergüenza. ¿Cómo iba a mirarlo ahora a la cara?

Tenía que encerrar a la Felicity borracha bajo siete llaves. Si es que no podía beber sin liarla.

Escuché un murmullo apagado y en seguida me puse tensa. Mierda, mierda, mierda. ¿Qué iba a pasar ahora entre nosotros? ¿Por qué tenía que estropear todo, con lo bien que me sentaba la pequeña amistad que teníamos?

Porque te pone el sexy nerd.

¡Cállate!

Odiaba mis pensamientos. No podía... No quería...

—¿Lizzie?

Lo miré. Era tan guapo recién levantado. Tenía el pelo apuntando mil direcciones, los ojos somnolientos, una sonrisa perezosa y la voz ronca terriblemente irresistible.

El no héroe del cuento (Trilogía Apariencias 2)Where stories live. Discover now