Alas de cuervo // Robb Stark

Capítulo 41 El nuevo Rey

-Jon, mírame- le pidió Alysanne-Tienes que entender que lo que pasó el otro día, lo del beso.No estuvo bien.No puede volver a pasar

-Lo sé perfectamente, me dejé llevar. Fui un estúpido- seguía mirando al suelo

-Te veo como mi hermano.Lo que siento por ti es una cariño fraternal no carnal.Yo amo a Robb

-Solo dime una cosa, ¿si Robb no estuviera vivo, si no hubiera muerto, lo habrías intentado? Amarme

-Oh Jon- negó- Si lo hubiera intentado nos habríamos estado engañando los dos.Eres uno de los hombres más maravillosos que he conocido.Eres leal, gentil, bueno, atento.Pero yo no soy para ti- le cogió la mano- pero encontrarás a alguien que te ame como te mereces.Te lo prometo

Le dio un beso en la mejilla indicándole que todo quedaba en paz y se alejó, dejando al pelinegro apoyando la cabeza contra la pared intentando dejar y sus sentimientos.Sin ser ninguno consciente de que alguien los había oído.

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Sentados en el centro de la mesa alta en el Gran Salón de Invernalia estaban Robb y Alysanne, justo donde deberían sentarse el Rey y la Reina. Junto a ellos descansaban Sansa, Jon y Arya, quienes se veían igual de cansados ​​del ambiente en la habitación.

Todos los Señores hablaron unos sobre otros bastante groseramente, y cuando finalmente pudieron escuchar los comentarios individuales hechos por uno, generalmente fue una protesta o un insulto. Finalmente, teniendo suficiente de la cháchara, Robb levantó las manos y golpeó la mesa provocando un ruido que alertó a todos.

-¡Suficiente!- Gritó, silenciando sus voces al instante. -¡Hablarán de uno en uno!

-Su excelencia- Smalljon Umber se puso de pie y lo llamó, su sola presencia fue suficiente para irritar a Alysanne. -¡No puedes esperar que nos pongamos del lado de los invasores salvajes!

-Te pusiste del lado de los Bolton que masacraron a nuestra propia gente, ¿seguro que los Salvajes son tan malos como los pintais?- Alysanne no pudo evitar dispararle, lo que instantáneamente hizo que su rostro se sonrojara mientras recibía miradas mortales del resto de la habitación.

-Y no invadimos-agregó Tormund inteligentemente, -fuimos invitados .

-No por nosotros- respondió Hatrick Hornwood cuando Smalljon tomó asiento. -Vinimos a luchar por la Reina en el Norte, los Salvajes fueron invitados por Jon Nieve

-Y la batalla probablemente se habría perdido mucho antes de que llegara el ejército del Valle- disputó Alysanne en su defensa, -¿cuántos más de nosotros habríamos sido masacrados si no hubiéramos tenido el apoyo de los salvajes?

Sus palabras lo silenciaron efectivamente, aunque los murmullos se elevaron desde el resto de la habitación.

-Encontramos a nuestros verdaderos amigos en el campo de batalla-siguió diciendo-nuestro verdadero enemigo ahora son los Bolton, los Karstark y los Flint. Su traición debe ser tratada.

-Los Bolton están derrotados, la guerra ha terminado, ¡ha llegado el invierno!-Henrick Mazin se levantó. -Si los maestres tienen razón, será el más frío en mil años. Deberíamos regresar a casa y esperar a que pasen las tormentas.

-La guerra no ha terminado- Jon no pudo resistir cortar a Alysanne antes de que pudiera responder, -y te lo prometo, amigo. El verdadero enemigo no esperará a que pase la tormenta. Él es la tormenta.

Robb y Alysanne compartieron una mirada, su mirada se decía todo lo que ambos necesitaban saber. Cogió la mano de su esposa por debajo de la mesa y la sujetó con fuerza para tranquilizarla mientras ambos comenzaban a ponerse de pie, preparando lo que habían practicado para decir toda la noche. El corazón de Alysanne se aceleró en su pecho ahora que toda la habitación se había girado para mirarlos.