tu eres solo mía// frey Stein

|☾︎𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 4☽︎|

Me encontraba sentada en la sala viendo una película, mi película favorita "Harry Potter y el prisionero de Azkaban" era mi película favorita desde niña, también me gustaba verla por mi personaje favorito Draco malfoy en especial en esa película se veía muy guapo.

Amaba con mi alma esa película, mi padre llegaría asta mañana porque hoy tenía mucho trabajo seguramente llega mañana como a la dos de la tarde, las palomitas empezaron a sonar en el microondas, ya olía a palomitas de mantequilla.

El microondas sonó, le puse pause a la película y me levanté por mis palomitas, las puse en un  tazón, volví a mi sofá para ver mi película, le puse play y me senté todo la tarde a terminar la película.

Ya iba por el final del Harry Potter y el cáliz de fuego, cuando alguien tocó mi puerta pause mi película y me levanté para ir a abrir.

Al abrir mi mirada recorrió a la persona frente mío, frey estaba parado frente a mi puerta con las manos en los bolsillos de su pantalón, llevaba puestos unos pantalones negros unas botas del mismo color al igual que su sudadera.

En si iba vestido totalmente de negro.

—¿Que haces aquí? ¿Que quieres?—pregunte con un todo no del todo amable.

—Pero que modales, esas no son formas de tratar a un invitado—dijo en tono burlón.

—Tu no eres mi invitado.

—Ah no? Bueno pues ahora lo soy, así que aste a un lado y déjame pasar que acá afuera me estoy congelado—exclamo antes de entrar a la casa.

—Ey que te pasa! Sal de mi casa ahora mismo.

—¿Y que quieres que le diga a tu padre?.

Le di una mirada de confusión y el lo entendió de inmediato.

Soltó un suspiro antes de hablar.

—Tu padre fue a mi casa en la mañana a preguntarle a mi madre que si te podían cuidar mientas el no estaba, por lo visto no te tiene mucha confianza para dejarte sola, pero kaia y Heist estaban ocupados, asi que yo era el único que lo podía hacer y creeme que por mí me hubiera gustado quedarme en mi casa pero mi madre me obligo a venir y cuidarte—hizo una pausa—aunque no soy el más indicado para cuidarte y ella lo sabe—dijo en un susurro que apenas pude escuchar pero lo ignore por completo para centrarme en lo que había dicho antes.

—¿Mi padre te pidió que me cuidaras?.

—Que si, ¿eres retrasada mental o algo?—pregunto con tono de burla.

Me límite a mirarlo con mala cara y darle una sonrisa sarcástica.

El se sentó en el sillón y miro a la pantalla frente a el, la observo por unos segundos para después decir algo que no alcance a entender, parecía que estaba hablando otro idioma. El silencio se empezó a hacer incómodo.

—¿Y Heist? ¿En qué estaba ocupado?—pregunte intentando romper el hielo, aunque en realidad me interesa saber más sobre el rubio no podía negar que era atractivo. Pero mis preguntas solo lo hicieron tensar la mandíbula y desviar la mirada hacia la ventana como si estuviera enojado.

—Ey! Te estoy hablando—exclame cuando me ignoro.

—¿Para que quieres saber de heist? ¿Acaso te gusta?—su voz ya no tenía ese tono burlón si no más bien un tono como de molestia.

—¿Qué? Solo quería romper el hielo y platicar un poco.

—¿Y la única forma que se te ocurrió fue pregunta por mi hermano?.

—Pues no sabía que más preguntar—mire a otro lado y el ya no respondió.

Wow, bravo Laila, acabas de arruinar todo, felicidades.