NUESTRA REALIDAD © M-PREG

Parte 14

Stiles despertó a causa del llanto lejano de Leo, parecía un sueño pero a la vez se sentía muy real y era extraño. Lo último que recordaba era la cena con sus amigos, y a Derek poniendo a dormir a su cachorro, luego él quedándose dormido en el sofá... ¿Por qué Leo lloraba tanto? 

En medio del malestar podía sentir calor, algo le sofocaba y sabía que algo no andaba bien, sabía que eso no era normal. Se removió volviendo a la conciencia, y se encontró con lo que parecían ser unas cadenas en sus muñecas. Y no oía rastros de su hijo.

—¿Qué... ?— abrió los ojos con dificultad intentando acostumbrarse a la oscuridad y se encontró en la habitación de Derek, pero sus muñecas estaban encadenadas sobre su cabeza impidiéndole moverse. —¿Derek?—

El silencio hizo que el miedo le invadiera. —Leo —dijo alarmado e intentó tirar de las cadenas sintiendo como las mismas abrían heridas en su piel. —¡Derek! —llamó, y una risita proveniente de la esquina del cuarto le erizó la piel. Conocia esa voz demasiado bien. —¿Jack? —preguntó aún sabiendo cuál sería la respuesta —Jack por favor —

—¿Otra vez suplicando Stilinski? —

La voz neutra de este hizo que Stiles viera al techo fijamente analizando sus alternativas. Pero más importante. 

—¿Dónde está Leo? ¿Qué hiciste con él? —

—Leo está dormido, pareciera que en este lugar puede dormir profundamente... —contestó acercándose, fue entonces que Stiles pudo verle —Y Derek... —suspiró con una sonrisa —Derek Hale no podrá moverse en unas cuantas horas —comentó —Horas en las que voy a hacer lo que quiero contigo Stiles, y vas a desear no haberte metido conmigo —

—Eres un infeliz, y sea lo que sea que hagas Derek va a devolvértelo con creces así que puedes comenzar a cavar tu propia tumba —contestó tirando de las cadenas de nuevo. Jack prácticamente ignoró lo que dijo porque en cuestión de segundos estuvo encima suyo y levantó su remera accediento a la piel de su torso —¡No me toques! ¡Jack suéltame! —Stiles se movió intentándo alejarlo y con lágrimas en los ojos maldijo el día en que lo conoció, maldijo haber aceptado estar juntos, maldijo haberse ido con él. —¡Te odio... te odio tanto... ! —dijo peleando aún —Derek — llamó ganándose así una cachetada por parte del lobo. 

—¡No lo nombres! — gritó el alfa sobre su rostro —Lo único que vas a conseguir es más dolor Stiles, te recomiendo... —

—Te recomiendo que te alejes de él —interrumpe Derek desde atrás, sus ojos son rojos y Stiles puede ver las venas de su cuello y brazos hinchadas —Voy a asesinarte tan lentamente que me vas a terminar rogando que termine con tu vida —dice tomandole por un tobillo y tira de él al suelo donde sujeta su cuello con una mano y lo aprieta cada vez más. 

Stiles puede ver a Jack intentando llegar a Derek pero no ve más que eso, y tira de las cadenas en sus muñecas buscando deshacerlas pero sabe que es en vano. —Derek déjalo, por favor... —pide entre lágrimas —Derek... —repite y puede sentir el ardor en su piel 

Escucha a Jack boquear por aire y cierra los ojos con fuerza. 

—No debiste volver —dice Derek y envía la mano libre al estómago ajeno clavando sus uñas despacio —¡Te advertí que no te metieras con mi familia! ¡No... con... mi... familia! —rugió 

—¡Derek por favor! —grita al mismo tiempo y no puede detener su llanto. Y ya no oye nada, a su vez ve a Derek ponerse de pie y la tranquilidad le invade. El lobo se acerca a la cama y le ve limpiarse las manos a un lado, y se aleja un poco cuando ve rastros de sangre. 

—Se acabó — dice el ojiverde en un susurro —Lamento haber tardado... —murmura mientras le coloca bien la ropa con cuidado. Stiles puede ver su mirada perdida, lo que le hace dudar. —Yo... —

—Derek mírame —dice, pero el otro no lo hace —Derek Hale —llama. Y entonces lo ve. —No vuelvas a dejarme —pide con un nudo en la garganta. 

Derek rompe las cadenas de un tiró y Stiles lo abraza por el cuello sin dudarlo dos veces solamente queriendo sentirse cerca. —Lo lamento, lamento haber sido tan caprichoso, lo siento... —dice sin dejar de llorar —Solo no me dejes de nuevo por favor, no podría soportarlo de nuevo, no de nuevo... —

—No puedo estar en ningún lugar donde no estén ustedes, no más —susurra para su alivio —Déjame sacarte de aquí y... llamar al resto, pero déjame llevarte con nuestro hijo primero —pidió y el castaño asintió en silencio. 

Derek lo tomó en brazos, ocultó su rostro en su cuello impidiéndole ver nada, y lo llevó fuera del cuarto, directo al cuarto de invitados donde Leo se encontraba durmiendo en una cuna. A Stiles le temblaron las piernas al bajar, pero Derek no le soltó al instante, así que se quedaron ahí, uno frente al otro por unos minutos.

Stiles también sabía que no había lugar donde prefiriera estar que ese, a su lado, por lo que le quedara de vida.