perdóname (caché g!p)

Capítulo 52: hacerlo diferente

Poché

Los días de nuestra luna de miel fueron maravillosos, aún recuerdo cada caricia suya al hacer el amor, fue tan delicada y tan comprensiva que no se volvió a repetir porque según ella teníamos que ir con calma ¿Cómo no amarla?

Por un momento tuve mucho miedo y las ganas de gritar y salir corriendo fueron muy fuerte, pero ella supo manejarlo muy bien y solo me concentré en ella y su manera de amarme. es única he igual de único cada caricia suya ¿Cómo describiría mi noche de bodas? Simplemente maravilloso.

—¿tienes todo?

—sí, todo en la maleta —se acercó y me dio un beso —extrañaré este lugar

—también yo, fue increíble todo lo que vivimos aquí

—haremos que siga siendo increíble también en casa ¿te parece? —su sonrisa automática y esa cara que hace cuando se le ocurren ideas me fascina, es único de Daniela calle.

—tengo un par de ideas para lograrlo y puede ser luego de tus clases cuando te recoja

—me iría contigo a donde sea —estampé mis labios sobre los de ella y subí al auto con una sonrisa al dejarla fuera aun con la trompa extendida, le gustan mis arrebatos de robarle besos —extraño a vale

—estaremos en casa en unas horas y podrás hablar con ella —ya me imaginaba a mi hermana prácticamente arrastrándome a su habitación para contarle absolutamente todo y con absolutamente todo, me refiero a todo.

En el avión le escribí para decirle la hora en la que llegaríamos y sea Joaquín quien nos recoja, calle se la pasó en el celular y algunos gestos de molestia me llamaron mucho la atención, pero en cuanto le pregunté dijo que me lo diría luego.

Conociéndola y por experiencia sé que ese te lo digo luego es solo para tratar de cuidarme y no salga lastimada, siempre hace eso inconscientemente.

No volví a preguntar sobre el tema ni cuando íbamos en el auto porque sé que me lo dirá cuando sepa cómo, Joaquín prácticamente me cargó cuando me vio y a diferencia del principio cuando calle se sentía algo celosa de él esta vez fue extraño porque solo sonrió y luego le extendió la mano para saludarlo.

De camino a casa solo éramos nosotros hablando como dos viejos amigos mientras calle solo veía por la ventana y revisaba el celular de vez en cuando.

—¿estás bien mi amor?

—sí, perdón por estar tan distraída es solo que tengo muchas cosas en la cabeza

—creo que se acabó lo bonito ¿no?

—no es eso amor es solo que.... —no esperé a que dijera nada más porque bajé del auto para saludar a mi hermana, Mafe y nana quienes esperaban en frente de la casa. Dejaré que calle ordene su cabeza y sea ella quien me hable cuando esté lista, no quiero discutir ahora que acabamos de regresar de unos días maravillosos, no quiero arruinarlo.

Ella saludó a todas y luego desapareció junto a Joaquín, lo dejé pasar y me concentré en lo emocionada que estaba mi hermana, le había enviado algunas fotos del lugar y quedó encantada.

—¿será que me encargaron nietos? —la pregunta de Mafe me volvió un tomate y eso no pasó desapercibido por mi hermana

—lo hablamos, pero no es el momento —la ilusión de aquella mujer se desvanecía y la boca de mi hermana parecía tocar el suelo así que preferí huir —estoy un poco cansada, iré a descansar y tengo que ordenar maletas

—ve hija descansa, nosotras prepararemos la cena —me puse de pie y vale llegó hasta mí para sujetarme del brazo

—yo te ayudo —solo seguí caminando y en cuanto llegué al pasillo me llevó a su habitación —cuéntame todo —dijo poniendo el seguro en la puerta