«Este tipo...»

—¿Y cuánto te costó que lo arreglaran así?

No evitó preguntarlo porque, honestamente, removiendo imaginariamente las capas de polvo e insectos muertos sobre el parabrisas, el auto se veía demasiado bien para como lo hacía sonar. Sobre todo si había soportado un viaje desde California hasta Massachusetts sin ningún problema aparente.

—En realidad sólo gasté en pintura y reemplazar unas cuantas piezas averiadas. El resto lo hice yo mismo... Bueno, papá ayudó un poco un par de días en los que mamá visitaba a la abuela, pero prometo que fue más como supervisión. Te digo que esos tipos no sabían lo que tenían en-

—Espera, espera —lo cortó, boqueando mientras intentaba procesar lo que había dicho—. ¿Cómo que lo hiciste tú? ¿Desde cuándo sabes de mecánica?

Reese suspiró, inclinando ligeramente la cabeza hacia un lado.

—Pues... no estoy seguro —respondió honesto—. Cuando vivía con Craig pasaban muchos programas sobre reparaciones en televisión, y en realidad no había mucho más qué hacer para pasar el rato, así que... fue un poco a prueba y error, supongo... Pero, eh, la verdad resultó muy bien.

Y, ante eso, Malcolm lo miró genuinamente sorprendido, porque, ¿cuántas cosas habían pasado, y cambiado, desde que se fue?

Reese volviéndose de cierta manera independiente, aprendiendo cosas, y..., bueno,

Honestamente se sintió un poco extraño; dos emociones tan diferentes rodeándole el pecho al mismo tiempo. Como la sensación de frío y calor; alegría y tristeza...

Porque se sentía increíblemente bien que su hermano pareciera haber progresado más de lo que él mismo habría pensado, y, a la vez, era algo doloroso confirmar que, para lograrlo, había tenido que salir de esa casa donde la mayoría lo veía como un fracaso desde antes del intento... Como un caso perdido.

De nuevo, Malcolm se encontró molesto con el resto de su familia;

Su madre, tan obsesionada con controlarlos a todos, que a veces simplemente olvidaba que eran personas más allá de sus oportunidades para triunfar en la vida.

Su padre, a quien, a excepción de ciertos momentos, honestamente no le interesaba mucho nadie más que su esposa y sus deseos.

Sus hermanos, que la mayor parte del tiempo parecían simplemente despreciarlo...

Y él mismo, que había pasado tanto tiempo encerrado en su propia autocompasión como para verlo más allá de todo.

Porque Reese era increíble en su propia manera, sólo que nadie se detenía lo suficiente para verlo, y-

Y cuando él lo hizo, aparentemente no supo poner los límites suficientes para ser un buen hermano, y en cambio acabó siendo una persona horrible.

«Horrible y trastornada»

—Luces triste...

La voz inusualmente preocupada lo arrancó de sus divagaciones, y Malcolm no pudo sino mirarlo confundido en el momento en que Reese entornó los ojos con afligida sospecha.

—¿Qué?

—Pareces deprimido —murmuró.

¿Lo hacía?

—... ¿Realmente te molestó tanto que viniera?

«Vaya...»

Por enésima ocasión, un chispazo de culpa lo azotó, y Malcolm trató de sonreír, negando suavemente con la cabeza en un gesto que intentaba ser conciliador aun si su propio humor interno no lo era para nada.

Serotonina [Wilkercest]Hikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin