Capítulo 22 "No es tu culpa"

185 19 51
                                    

—Sí, ¿qué pasa?

—No querrá ni verme la cara.

—Darío, tú no has hecho nada.

—Conscientemente no, pero su hermano se ha ido porque has vuelto conmigo.

—No es tu culpa, tú ni sabías de su existencia. Y él sabía que yo quería volver contigo.

—¿Hemos vuelto?

—Yo creía que sí.

—Claro que sí tonta, te estaba tomando el pelo.

—Déjate de tonterías y vamos a casa de Mel.

—Le tienes que decir que al final cenamos con ellos. — dijo sin estar convencido del todo —

—Ahora cuando lleguemos se lo digo.

Íbamos camino a casa de Mel cuando mi madre me llamo.

—¿Mi suegra? — y asentí con la cabeza tras contestar —

—Hola mami.

—¿Por qué no me has llamado esta mañana?

—He estado liada.

—¿Ha pasado algo? Me lo puedes contar.

—¡He vuelto con Darío!

—Me alegro muchísimo cariño, sé lo enamorada que estás de él. ¿Todo bien entonces?

—Mejor que nunca.

—¿Y qué vais a hacer con Víctor?

—Estamos juntos por él.

—¿Ha cambiado de opinión en unas 4 semanas?

—Eso parece...

—Es raro.

-Mami, te dejo que estamos llegando a casa de Mel. ¡Te quiero mucho!

—¡Y yo! — y me colgó —

Justo llegamos a donde vivía Mel y subimos, ella nos abrió la puerta y Darío no quería entrar, Mel se dio cuenta.

—¡Al final cenamos los cuatro juntos!

—¿Qué le pasa a Darío? Pasa anda.

—Se cree que él tiene la culpa de que Jordi se haya ido y que Marc no lo quiere ver.

—¡Si es él quien me ha dicho de cenar juntos!

—¿Dónde está Marc? — dije al no verlo en el salón —

—Estaba respondiendo una llamada de Jordi. — dijo saliendo del cuarto de Mel — ¿Por qué no entra? — dijo mirando hacia la puerta —

—No quiero molestar. — dijo Darío mirando a Marc —

—No molestas Darío. — le dijo Mel para intentar que fuera más él —

—Por mi hermano, ¿verdad? Tú no tienes nada que ver. Pasa anda, que no muerdo. — le dijo Marc y finalmente entró —

—¿Tenéis pensado dónde ir a cenar? Yo no conozco Barcelona. — dijo Darío intentando aparentar que estaba bien —

—¿Qué os apetece? — dijo Mel al ver que la cosa estaba tensa pero menos que al principio —

—¿Os parece ir a un restaurante chino? — preguntó Marc —

—Pero está lejos. — dijo Mel —

—Se te olvida que tengo coche.

—A mí me apetece.

—A mí también. — dijo Darío —

Amor prohibido (1) ✔️Where stories live. Discover now