Inefable

𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 𝙸

Mi nombre es Lukas y cursaba el segundo año de secundaria cuando Derian y yo interactuamos por primera vez.

Yo no solía tener amigos en ese momento y solo conversaba con lo demás cuando se trataba de tareas y proyectos en equipo. Sin embargo, apesar de ser un poco asocial, para mí la escuela era lo mejor y sentía que era el lugar más seguro que mí propia casa...

Todo está bien hasta que un día...

-Lukas ¿te han dicho que pareces niña?

Alzo la mirada para ver a uno de mis compañeros enfrente mío analizando mi apariencia de pies a cabeza.

-Si te dejarás el cabello crecer- agrega señalando con su índice mi cabeza - y te pusieras una falda, fácilmente serías una chica, incluso tu voz es igual a la de una.

Él y sus amigos comienzan a reírse como si lo que hubiera dicho fuera lo más gracioso del mundo. No supe cómo reaccionar debido a que era la primera vez que me molestaban.

-Dejen de molestarlo- grita una de mis compañeras defendiendome y voltea hacia mí sonriendo— No les hagas caso Lukas, te tienen envidia por ser guapo.

El chico se voltea hacia ella- ¿Acaso estás enamorado de él?— pregunta burlón.

La chica lo ignora mientras sigue platicando con sus amigas. El profesor entra justo en ese momento y todos corren a sus asientos.

La clase empieza y no tuve la intención de no prestar atención, pero es que estaba tan aturdido con lo que había pasado antes que solo pude pensar en como el problema había alcanzado llegar hasta mi escuela. Nunca creí que ese tipo de comentarios los escucharía del único lugar que consideraba seguro.

El timbre sonó y todos comenzaron a salir empujándose unos a otros. Tomo mis cosas y estaba por salir cuando el profesor me pide quedarme junto con otro chico.

Lo miré unos segundos intentando recordarlo hasta que logró dar con él.
Su nombre era Derian y él al igual que yo era uno de los pocos que hablaba con otros, sin embargo su nombre era mencionado por todos como el chico que saca malas calificaciones.

De esto último fue la razón por la que nos llamaron. Teníamos que hacer un proyecto para antes de salir de vacaciones y por lo qué el profesor me comentó fué que la madre de Derian insistió en que algún compañero de clase ayudara a que su hijo se interesará en la escuela y el profesor solo pudo pensar en mí.

Claro que no era para que yo le pasará todas las tareas o hiciera todo por él, sino que él aprendiera de mí y se motivará en aprender.

aunque no creía que eso fuera posible.

No tuve de otra más que aceptar y el profesor me dijo que confiaba en mí.

Salimos de la escuela y ambos caminamos en silencio... Hasta que abrió una bolsa de gomitas. Volteo hacía él y me sonríe.

—¿Gustas?— dice extendiendo la envoltura y niego. Él encoje los hombros y se lleva varias gomitas a la boca— Entonces... ¿Cuál será mi trabajo?

—Primero tenemos que escoger el tema y de allí empezaremos a repartir la investigación.

—¿Cuál será el tema?

—Si no tienes alguna idea puedes decirme.

Él se queda pensando y niega— No, no se me viene nada. 

—Entonces yo puedo escogerlo... Si quieres.

Él asiente sin tomarle tanta importancia y suspiro pensando en que tal vez fué mala idea aceptar.

Justo cuando estaba por preguntar en si podíamos investigar sobre el espacio, él se detiene.

-¿Qué?- cuestiono

-Nada, yo me quedo aquí— señala la casa de al lado.

-Ah... Entonces nos vemos en la escuela

Él ni siquiera dice algo, solo asiente mientras se lleva otro montón de gomitas y se da media vuelta y caminar a su casa.

Intento de socializar n° 126789: Fallido.

Resignado me doy la vuelta y continúo mi camino hasta la parada. Solo quiero llegar a casa y dormir.

[...]

Derian estaba sentado frente a mí jugando con el lápiz mientras yo le explicaba que temas tendría que investigar y la importancia de que comprendiera el tema para que cuando lo presentara no le fuera difícil.

—¿Alguna duda?— finalizo y alzo la mirada para verlo y notar que ha dejado de jugar y que ahora me mira fijamente.

Ambos nos quedamos viendo durante unos segundos sin decir nada y su mirada me hace sentir incómodo—¿Qué?— pregunto ya fastidiado.

—Creo que eres bonito— responde ladeando la cabeza

—¿Qué?— frunzo el ceño confundido

—Pero no pareces niña— desvía la mirada y toma su cuaderno para comenzar a escribir— Aunque talvez te falte crecer, estás muy enano.

Aún confundido intento comprender sus palabras hasta que él recuerdo de lo que pasó ayer en el salón viene a mi mente.

—Es por lo del comentario ¿no?— murmuro

—Ajá

—Bueno, supongo que ¿gracias?— digo apenado— En realidad no es la primera vez que escucho ese tipo de cosas... Mis padres también suelen decirlo seguido— digo esto último muy bajo

Él deja de escribir y voltea a verme. Por alguna razón su mirada me intenta decir algo pero no logro decifrar qué.

—Eso es muy tonto— bufa molesto— Creo que los que te dicen eso no saben lo que dicen.

—Talvez... Aunque talvez también tengan razón. ¿Debería cambiarla?

Su ceño fruncido se relaja y ahora aparece sorprendido. Él baja la mirada y escribe más rápido— No sé... Si quieres puedes hacerlo... Pero creo que no debas cambiar solo para complacer a los demás.

Su respuesta me deja sin palabras. No creí que Derian pudiera decir esas cosas, lo creía un chico muy tonto pero vaya que me equivoqué y además, es la primera vez que alguien me dice algo motivador y no solo solo críticas y ofensas.

Sus palabras me dieron felicidad.

No pude evitar sonreír y agradecerle por sus palabras de apoyo y él también sonrío y después dijo que pondría todo de su parte para que el proyecto fuera el mejor de todos.

y aunque no fué el mejor como él lo creía, al menos su calificación subió significativamente y todos quedaron sorprendidos.
Derian en agradecimiento me compró el almuerzo y cada oportunidad que tenía, me pedía estudiar juntos...

Desde ese momento no volví a estar solo y desde entonces, él y yo no hicimos otra cosa más que continuar juntos. Que al inicio era una amistad...