Cuando El Sol No Brilla (Gay 🏳️‍🌈)

Capítulo 15; Los secretos del universo (Alex)

Cuando tenía seis años escuché a alguien de la TV decir que éramos polvo de estrellas. Aquel fue un tiempo de credulidad total para mí, por lo que no pude encontrarle un significado más allá de lo literal. Mientras apilaba las conchas de caracol vacías que había encontrado en el antejardín del vecino de mi abuela, pensé que las personas de la TV decían muchas cosas, y no todas eran ciertas.

Años después, cuando mamá me sacó de los dominios de la abuela y me llevó a vivir con ella, conocí al tío Fernando. Nos visitó por primera vez una mañana particularmente soleado de mayo. Lo encontré parado frente a nuestra puerta al volver de la tienda, con su metro ochenta de estatura y una barba bastante espesa. Si bien al principio me sentí tan intimidado por él que procuraba ni siquiera respirar fuerte cuando estaba cerca, luego supe que era sólo apariencia. Después de todo, una persona que hiciera reír a mi madre de la forma en la que él lo hacía no podía ser mala en lo absoluto.

Enterarme que tenía un tío del cual no sabía nada me hizo reconsiderar varias cosas. Como que allá afuera también existían otras personas que poseían mundos y vivencias diferentes a las mías, y que, probablemente, yo vivía tan enfrascado en mi burbuja de ignorancia que pasaba por alto ese hecho. Aunque quise dejar de andar abstraído por la sorpresiva llegada de aquel ser tan singular, no lo logré sino hasta tiempo después. No porque me extrañara la familiaridad con la que me trataba a pesar no habernos visto nunca, por su acento que daba la impresión de ser sacado de una telenovela española o por su sola presencia en general. No. Lo que me parecía más raro y fuera de lugar era tener parentesco con una persona con el cabello así de rojo. 

Un cabello que parecía estar en llamas todo el tiempo.

Ya no pensaba que el mundo fuera demasiado grande. Sino que, más bien, tenía muchos habitantes y muy poco espacio.

— ¿En qué estás pensando, Vincent? — Me preguntó aquel extraño. 

Yo tomé un sorbo de mi chocolate y lo miré tan fijo como me lo permitieron mis ojos. Nadie nunca me había llamado así.

— En que si tú realmente eres mi tío, la tierra es bastante más pequeña de lo que imaginé. — Le respondí, sin ápice de duda. — Y si el mundo es así de pequeño, entonces por lógica uno puede suponer que debe existir algo más grande ¿Verdad? — Pregunté, mirando a mi madre.

Ella sólo me dirigió una mirada de extrañeza. Sin embargo, él me sonrió.

— Vale, la próxima vez que venga te voy a mostrar algo que flipas. 

Estuve tentando a decirle que no tenía idea a qué se refería con eso, pero preferí acabar mi taza de chocolate antes de que se enfriara.

Semanas después, mi tío apareció de nuevo frente a la puerta con algo más que su altura descomunal y su barba de vikingo. Esa vez también traía un libro bastante grueso entre manos. Al verlo de cerca, noté que por él habían pasado algo más que unos cuantos años. Estaba bastante demacrado. Tenía la tapa medio despegada y las páginas cubiertas de un amarillo mugriento que se acentúa aún más en los bordes. No obstante, una vez reparé realmente en su interior descubrí lo maravillosa que una imagen podía llegar a ser. 

 Sus ilustraciones eran literalmente una cosa de otro mundo.

Con una paciencia que no muchos adultos habían tenido conmigo hasta el momento, mi tío me explicó cosas sobre lo que había más allá de las nubes. De lo que quizá se escondía en un punto fuera de nuestro alcance y lo poco y nada que sabíamos de la inmensidad del universo. Nunca fui un adepto a la lectura, cada vez que cogía un libro terminaba por aburrirme a los pocos minutos. Pero ese día, en cuanto él se fue y yo quedé solo junto a mis incógnitas, empecé a devorar párrafo por párrafo los no tan extensos textos que había en cada página. Los planetas, las galaxias, los cúmulos de estrellas. Todo era tan extraño y fascinante que me costaba creer que fuera real. O aún más que eso, me costaba creer que algo tan grande estuviera pasando y todos parecieran vivir sin dar cuenta de ello.