34. Nueva vecina

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La melodía del disco vinilo acompañaba la habitación

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La melodía del disco vinilo acompañaba la habitación. Las suaves notas hacían sonreír a Naruto mientras bailaba lentamente alrededor de la sala.

Entre sus manos sostenía un pequeño overol y lo movía a la par de la melodía, su sonrisa se agrandaba e imaginaba a un cuerpito que entrara en la prenda. Desde el encuentro que tuvo Sasuke habían pasado cuatro días, en los cuales no desaprovechó el unirse a su hermano para que su embarazo fuese asegurado.

El sonido de la puerta se hizo presente, las llaves tintinearon sobre la mesa y Sasuke ingresó lentamente a la sala. El cansancio era evidente en el rostro del mayor. Las ojeras debajo de sus ojos le mostraban lo poco que había dormido y su ropa ligeramente manchanda de una sustancia roja demostraba que acaba de cumplir con otro trabajo.

—¡Sasuke mira! —Exclamó Naruto mostrándole la prenda entre sus manos.

El mencionado elevó una ceja y se sintió confundido al ver que Naruto tenía ropa de bebé. Su vista recayó a sofá y notó que había lana y agujas sobre una cesta, justo a esta reposaba otro conjunto de ropa pero que parecía ser de algodón.

—¿Saliste? —Preguntó Sasuke al saber que él no había comprado nada de eso.

—Hice una nueva amiga. —Respondió el rubio sin quitar su sonrisa. —Es nuestra vecina.

¿Vecina? Sasuke sabía que la otra casa próxima a la suya estaba al menos dos horas de distancia. Se ocupó de tener un sitio lo suficientemente alejado para que nadie lo molestara, además aquella zona era privada, nadie podía entrar sin autorización.

—¿Que vecina Naruto? —Preguntó el azabache en un tono serio mientras lo observaba a los ojos.

—La anciana que vive a la casa de al lado, su hijo vino a visitarla pero se perdió y terminó cerca de nuestro hogar. —Explicó el menor aún jugando con la prenda. —Lo acompañé para que no se perdieran, además tiene un auto muy bonito.

Sasuke negó en sitio y apretó su mandíbula ante lo que acababa de escuchar. Si bien el no cerró a Naruto como antes hacía, no llegó a pensar en que este quisiera salir más allá del jardín. Ya estuvieron un tiempo considerable y Naruto en ninguna ocasión intentó pasar la puerta de entrada. Pero al saber que lo acababa de hacer y además conoció a un sujeto con “un auto bonito” convertía a su interior a uno lleno de enojo y molestia.

—Me está enseñando a tejer. —Dijo el más bajo mostrándole la cesta a Sasuke. —Me regaló esto cuando le dije que iba a tener un bebé, es una anciana muy adorable, pensé que ninguna lo era. Al principio le tuve miedo, pero después...

—No puedes salir Naruto. —Interrumpió a Naruto con el ceño fruncido. —Ya hablamos sobre esto,—se acercó más al menor. —Pensé que lo había entendido ¿Quieres volver a estar encerrado? —Inquirió el azabache cruzándose de brazos.

—No puedo quedarme aquí... Dentro de poco iré al hospital a hacerme los analisis. Debo cuidar a mi bebé si quiero que crezca sano.

Bebé otra vez es tema. Sasuke estaba completamente candado que las únicas palabras que el menor decía eran “bebé” Él sabía que la situación había afectado a Naruto, por alguna razón se aferró tanto a ese niño imaginario que puso toda su atención en él. Al principio intentó ser paciente hasta que la pena dejara el interior del menor. No obstante ya estaba cansado, si escuchaba una vez más esa palabra iba a estallar.

—Por alguna razón siento que será un niño... Por eso la Sra. Hyūga me dió el color azul, pero...

—¡YA BASTA NARUTO! —Gritó el más alto perdiendo toda su paciencia. —¡DEJA DE PENSAR QUE TENDRÁS UN BEBÉ! ¡NO ESTÁS EMBARAZADO Y NUNCA LO ESTARÁS!

La expresión en el rostro de Naruto se deterioro al instante en que le escuchó decir esas palabras. Sin embargo un botón se activó dentro de él, aquel que le decía que no lo escuchara. Él tendría un bebé. Lo sabía.

—Si lo tendré. —Respondió Naruto en un tono más bajo. — Sé que no lo quieres, pero... Yo sí...

—Naruto... —Pronunció el azabache intentando guardar la calma —Sé que leíste todo tu expediente. —Le recordó acercándose un poco más.

—Yo tengo mareos... además siento que esta creciendo aquí... —Dijo el menor llevando una mano a su abdomen.

—Naru... —Pronunció Sasuke suavemente poniendo ambas manos sobre sus hombros. — Eres estéril... Tú no puedes tener bebés...

La melodía que sonaba de fondo se trabó, el silencio se hizo presente y Sasuke sintió como el cuerpo de Naruto se tensaba debajo de sus manos.

El último mencionado se quedó en esa posición por un par de minutos y el más alto notó que miraba fijamente un punto, perdido en la nada.

—Dobe... —Pronunció el azabache subiendo sus manos hasta sus mejillas. —Eres perfecto así, no necesitas de un bebé para...

Sin embargo no pudo terminar la oración debido a que el menor quitó las manos de Sasuke lentamente y comenzó a caminar hacía las escaleras, para subir a la habitación.

—¿Naruto? —Preguntó el mayor siguiéndolo.

Sasuke sin mucha prisa subió las escaleras e intentó pensar a que se debía la reacción de su hermano. En el expediente de este último claramente mostraba que no podía tener bebés. Y sabía que Naruto había leído esa parte.

Llegó a la puerta y antes de entrar escuchó un fuerte estruendo que provenía del interior.

—¡Naruto! —Gritó el azabache con preocupación entrando rápidamente.

La imagen de Naruto con lágrimas en los ojos mientras sostenía una maleta sobre su pecho le hizo detenerse antes de llegar a él. Aquella maleta se encontraba en la parte superior del armario, el azabache supuso que empleó demasiada fuerza al sacarlo porque el armario estaba volcado completamente.

—¿Por qué siempre me mientes? —Pronunció el rubio débilmente.

—Naruto, deja de pensar eso de mí. —Respondió Sasuke acercándose al más bajo.

—¿Me... Amas...? —Preguntó Naruto mientras más lágrimas resbalaban por sus mejillas.

—Sí... Eres lo más importante en mi vida... —Confesó el más alto quedando frente a él.

—Sí es así... Dime la verdad...

—Lo hago Naruto, tú no quieres creerme. —Respondió Sasuke acunando su mejilla.

El mencionado se alejó levemente y sujetó la pequeña maleta entre sus manos para comenzar a abrirla.

—¿Entonces qué es esto?

—¿Entonces qué es esto?

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PSYCHO // SasunaruDove le storie prendono vita. Scoprilo ora