afterglow | s.s

cuatro

La noche del sábado había llegado, Tessa no había compartido ninguna palabra con Stiles y Scott desde la pelea de aquella noche. Se había enterado por la mañana que Stiles había hecho la denuncia y ahora, Derek, estaba en la cárcel.

Para ser sincero, Tessa odiaba los lugares con mucha gente pero, esa noche, necesitaba estar allí por si a Scott se le ocurría perder el control.

Tessa observó como Stiles y Scott llegaban a la cancha, también notó que Allison estaba aquí junto a su padre. Tessa quedó mirando a este último, Stiles le había dicho que era un cazador y eso era en lo que estaba pensando, ¿qué pasaría si se enterase de Scott? ¿Iría ella a ayudarlo o escaparía sin voltear hacia atrás?

El sonido del silbato llamó su atención, el partido había comenzado y, de lejos, podía sentir el nerviosismo que emanaba Stiles, incluso cuando él no estaba jugando. Tessa no entendía mucho de Lacrosse, solamente lo básico y por lo que observaba, nadie del equipo de la escuela estaba pasándole la pelota a Scott.

Esto no es nada bueno

De un segundo a otro, la pelota se perdió, Tessa notó que Scott la había encontrado y se dirigía hacia esta pero, de un momento al otro, este había sido empujado por Jackson para luego anotar un tiro. Todas las personas allí se levantaron de su asiento para celebrar, la chica podía escuchar el corazón de Scott latir rápidamente, se estaba enojado.

— Ayudame a sostener esto — escuchó a Lydia decir, Tessa giró su cabeza y notó que la pelirroja y Allison levantaban un cartel que decía "Te amamos, Jackson" Al ver ese cartel, Tessa corrió su mirada hasta llegar a Scott, se notaba más enfadado que antes y eso no era nada bueno.

— Scott, es un estupido cartel, controlate — murmuró, esperando que Scott fuera capaz de oírla.

El segundo tiempo había empezado, de lejos se podía notar a Scott, tratando de mantener el control y asustando a gran parte del equipo contrario. Lydia había cambiado de cartel, esta vez era uno que decía " Jackson, eres el #1" el cual no ayudaba a la situación, ya que ese cartel podría llegar a herir el ego de Scott, convirtiéndolo en celos y con un gran sangriento final. Tessa se masajeó la cien, pensando en que podía hacer para que el chico se controle pero nada le venía a la mente, sin pensarlo, se puso de pie y se dirigió hasta donde se encontraba Stiles.

— ¿Esto fue lo mejor que pudiste hacer? — pregunto ella, al llegar junto a Stiles, lo cual le había tomado por sopresa.

— ¿Vienes a decirme "te lo dije"? — preguntó él con fastidio — Porque si es así, no quiero escucharlo — Mientras hablaba, Stiles no quitaba la mirada del partido y lo mismo hacia Tessa, ya que Scott había tomado la pelota de un gran salto y había empezado a correr, evitando toda defensa, para hacer un tiro perfecto. Todas las personas allí empezaron a celebrar, incluso Stiles, que por un momento intentó chocar los cinco con Tessa pero esta solo siguió cruzada de brazos. El partido siguió, esta vez un jugador del equipo contrario le había entregado la pelota a Scott, sin pensarlo dos veces y este volvió a acertar otro tiro.

El entrenador se había acercado, se sentándose junto a Stiles — ¿El jugador del equipo contrario acaba de pasarle la pelota deliberadamente a McCall? — preguntó confundido.

— Creo que si, entrenador — le contesto Stiles, dejando de morder su guante debido al nerviosismo.

— Interesante — soltó el entrenador, con media sonrisa para luego ponerse de pie y detenerse al ver a Tessa — Tu eres la chica que atrapó la pelota, ¿verdad? — Tessa asintió — Bien, tu sigues en línea por si necesito sacar algún idiota de allí — dicho eso, el entrenador se alejó, dejando a Stiles con la boca abierta por la sopresa.