afterglow | s.s

once

Después de que Lydia armara su preciada bomba molotov, se la entregó a Scott. Tessa observaba como este hablaba con Allison, la cual estaba última trataba de hacerlo cambiar de opinión y que se quede con ellos. La castaña tenía en mente ir, tomar la bomba entre sus manos y salir ella misma a buscar las llaves, ya que había sido su idea desde un principio pero, justo cuando estaba por hacerlo, alguien la tomó del brazo.

— Ni lo pienses —  le dijo Stiles. La castaña frunció el ceño y giro a verlo, su cara de confusión lo decía todo —  No puedes ir. No quiero sonar sexista pero eres una simple chica, por lo menos para los demás y es mejor que Scott lo haga. Además, la última vez ya saliste herida no quiero imaginar que pasaría esta vez.

Tessa lo quedó mirando unos segundos, buscando alguna pizca de maldad en el rostro del chico para saber si lo que estaba diciendo era en serio o no. Luego de no encontrar nada más que preocupación, la castaña sonrió de lado, divertida.

—  ¿Estás preocupado por mi? — soltó ella, sonando no de la manera que tenía en mente, lo cual lo tomó por sorpresa.

—  Pff no, por favor, primero tendrías que importarte para sentir preocupación por ti —  dijo tratando de sonar hiriente, lo cual Tessa casi lo cree, si no fuera por lo rapido que latía su corazón.— Alguien tiene que quedarse a cuidar de nosotros y tú eres mejor opción que Scott.

—  ¿Piensas que soy mejor que Scott?—  preguntó levantando una ceja— Cuidado, Stilinski, pensaré que ya no me odias más.

—  Tessa, no estamos la mejor situación, estamos por morir y uno dice un montón de cosas que no son ciertas en estas situaciones — explicó nervioso.

—  Bien, lo dejaré ahí —  sonrió, divertida.

—  Cierren la puerta cuando salga —  ordenó Scott. Tessa y Stiles observaron al lobo adolescente irse, ambos estaban preocupados pero sabían que todo iba a salir bien.

                                     ***

—  No lo entiendo —  habló allison —  No entiendo por qué el está afuera y nos dejó — dijo al borde de las lágrimas mientras observaba sus manos temblorosas —
Mis manos...mis manos no dejan de temblar.

—  Está bien —  la calmó Jackson —  Está bien, todo saldrá bien —  dijo, tranquilizandola.

Tessa observó la situación, no podía creer que Jackson confortara a Allison cuando tenía a su novia junto a él, casi en el mismo estado que Allison.

—  Jackson, tu me pasaste el ácido sulfúrico, ¿cierto? —  preguntó Lydia, curiosa —  Tiene que ser ácido sulfúrico sino, no encenderá.

—  Te di exactamente lo que me pediste, ¿o no? —  soltó molesto.

—  Si, estoy segura que lo hiciste —  contestó ella de forma complaciente, lo que molestó a la castaña.

Tessa iba a comentar algo pero de pronto, un gran rugido se escuchó por toda la escuela, tomando por sorpresa a Tessa ya que, debido a ese rugido, llevó ambas manos a sus oídos debido a que el sonido era demasiado penetrante, logrando que cayera de rodillas.

Tessa sintió cada hueso de su cuerpo arder, sintió como sus garras salían de sus manos sin que ella quisiera hacerlo y además, sintió como sus ojos cambiaban de color.
Stiles observaba toda la situación con confusión, ya que el rugido no solo había afectado a Tessa sino que a Jackson también, lo cual se le hizo bastante extraño y le generó curiosidad.

— Stiles —  escuchó que Tessa lo llamaba, entonces fue hasta ella y se arrodilló, para poder verla mejor.

—  Hey, ¿estás bien? —  preguntó, ya que no podía ver su rostro porque su cabello se lo impedía.