afterglow | s.s

dos

Segundo día de clases, la clase de historia empezaba a tornarse más aburrida de lo normal. Tessa observaba a Scott, el cual estaba hablando animadamente junto a Stiles a unos asientos por delante de ella. Desde el día de ayer, Tessa notaba algo extraño en Scott y no se trataba de ningún aspecto físico, sino que algo en él emanaba una esencia que nunca había experimentado años anteriores.Tenia una teoría, una loca teoría en realidad, pero no estaba segura y es por eso que desde el día de ayer no podía evitar escuchar las conversaciones de aquellos dos amigos. Tessa estaba tan absorta en sus pensamientos que no se había dado cuenta que llevaba unos cuantos segundos observandolos y que Stiles se había dado cuenta de ello.

—¿Por qué estas mirándome? — preguntó él, levantando una ceja.

Tessa parpadeó un par de veces y con molestia contestó  — Espero a que explotes espontáneamente — Stiles rodó los ojos con fastidió y volvió a concentrarse en Scott.

—Está claro que le gustas — le dijo Stiles a Scott, refiriéndose a Tessa.

—¿Por qué estas seguro que yo le gusto? — inquirió Scott, confuso —Puede que seas tú, eso tendría más sentido, ¿no crees?

El timbre de fin de clase había sonado, Tessa tomó sus cosas y se puso de pie con mucha rapidez. Cuando pasó junto a Stiles y Scott, se detuvo, apoyando su mano sobre el pupitre de Scott — Antes de gustar de este idiota, me arrancaría los ojos con dos tenedores o incluso con mis propias manos — sentenció para luego irse de allí.

—¿Cómo hizo para escucharnos desde allí?— preguntó Stiles, desconcertado. Scott no le contestó, solo se encogió de hombros.

                                   ***

Cuando Stiles se había enterado que, en el cadáver que habían ido a buscar con Scott, los forenses habían encontrado pelo de lobo empezó a buscar por todo medio información sobre Licántropos, para ser más exactos : hombres lobo. A medida que iba leyendo, todo cobraba sentido, desde el aullido que Scott había escuchado en el bosque hasta sus nuevas habilidades para jugar Lacrosse y era por eso, que lo había citado a venir a su casa. 

El sonido de alguien golpeando la puerta de su habitación hizo que se sobresaltara, cerró su computadora y se dirigió hacia la puerta para abrirla, dejando entrar a un Scott algo sonriente.

—Pasa. Debes ver esto — dijo, apenas lo vio — Estuve leyendo toda la noche. Sitios de internet, libros.

—¿Cuántas anfetaminas tomaste hoy? — preguntó Scott, al ver a su amigo algo sobresaltado.

— Muchas — dijo sincero — Pero no importa, tienes que escuchar esto.

—¿Es por el cadáver? ¿Ya saben quien fue?— preguntó Scott, arrojando su mochila sobre la cama de Stiles y tomando asiento en ella.

—No, siguen interrogando gente. Incluso Derek Hale — contestó.

—El que vimos en el bosque.

—¡SÍ! Si, pero no es eso.

—¿Por qué entonces?

—¿Recuerdas la broma que hice el otro día? ¿Sobre los licántropos? — Scott asintió — Dejo de ser una broma. El lobo. La mordedura. Comencé a leer sobre esto, ¿Sabes por qué aúllan los lobos?

—¿Debería?

— Es una señal. Cuando un lobo esta solo, aúlla para indicarle a la manada donde está. Si oíste a un lobo aullar, es porque podrían haber mas. Quizás toda una manada.